septimo :gumbion

INDICE. PRIMERA PARTE. LIBRO PRIMERO " STAR TIGER." Capítulo Página I. Ariel Trigena II. En el Ejército III. La Expedición LIBRO SEGUNDO. " YAKSUN ". I. Romance II. Bross LIBRO TERCERO " OLOR A YODO." I. El juicio II. Don Maluenda III. El nuevo mundo IV. El relato de Mashan V Fernando VI Mashan VII Reclutadores SEGUNDA PARTE LIBRO CUARTO " LA LETEA". I II III La Letea IV V LIBRO QUINTO " OOROMONA ". I Víctor II La Luna III En la Tierra IV Escaramuzas V Relato de Guerra LIBRO SEXTO " LA MIRROR ." I Maloom Warz II Mueldon 48 III Bross IV Definitivo desastre V El profesor Brown VI El Gravitor Brown VII Obion VIII Eloom IX La Tierra X La gran nave TERCERA PARTE LIBRO SEPTIMO " GUMBION 300 ". I Soy Gumbion 300 II El Gusondi III Árido IV Prieke )))))))))))))))))))))))) libro septimo : ^^^^^^^^^^^^^^^^^ " GUMBION 300." Cuento de C/F por Alfredo Francisco Humberto Juillet Frascara. 1991.- TERCERA PARTE LIBRO SEPTIMO GUMBION 300 CAPÍTULOS DE LA OBRA "GUMBION 300".: 1.- SOY GUMBION 300. 2.- EL GUSONDI. 3.- ÁRIDO. 4.- PRIEKE. 5.- LE ROI ET SON COURTISAINS. 6.- EN VIAJE. 7.- LA NAVE TRIANGULAR. FINIS. &&&& PROLOGO. Gumbión 300 es una novela que se adjunta perfectamente a la saga de los Yaksunes, con nuevos personajes. Es la última de la serie. Han pasado muchos años desde el último relato, y ya los Priekes y sus enemigos los Yaksunes han dejado mellar sus armas en la paz y la decadencia. Es el tiempo, que nivela montañas y apaga los peores incendios... CAPITULO I. "SOY GUMBION 300." El campo de fuerza me ayudó a llegar a tierra. Caí sobre unos arbustos de hojas carnosas. Era de noche y las estrellas iluminaban como lo haría la vieja Luna. En el planeta SARBRA no había Luna; sólo estrellas en un firmamento distinto. A lo lejos se divisaban resplandores rojizos; eran las luces de las casas más cercanas de la gran ciudad Lukerna... Puse en acción el Antigravitor, que me elevó instantáneamente a dos metros del suelo; dí el avance moderado hacia adelante, volando hacia las casas en lontananza. Una calle se adentraba en la ciudad. Como era un suburbio, no vi vehículos ni gente, ya que eran las 03:30 horas.. Miré hacia las estrellas..., los que me dejaran en tierra ya debían estar otra vez en órbita asincrónica alrededor del planeta... Seguí la señal del aparato ubicador que llevaba atado al brazo derecho. Llegué ante un edificio en penumbras; penetré por una ventana del tercer piso, y coloqué una bomba en cada esquina del mismo. Salí de allí del mismo modo, y a los cinco minutos estallaban las bombas, arrojando llamas inmensas por las destrozadas ventanas. Las llamas se propagaron al edificio vecino. Una sirena aulló a lo lejos, y pronto carros de Bomberos convergieron veloces hacia el sector, para apagar la conflagración. Me alejé, volando a diez metros de altura, cerca de los muros de la calle siguiente, mientras las sirenas aullaban ahora por toda la ciudad, alertada por los resplandores rojizos. Aprovechando tal distracción, accioné el segundo blanco de mi misión; la señal me llevó a un edificio próximo, al que penetré quebrando los vidrios de una de sus ventanas, estrépito que quedó opacado por las sirenas. Mi aparato señalizaba a pocos metros el blanco; en una pieza, una persona encendía la luz, alertado por tanto ruido. -"¡De pie! ¡No intente nada o dispararé!"- Le avisé, encañonándolo con mi arma de servicio. -"No me moveré."- Respondió con voz pastosa, producto de su avanzada edad y de haber salido del sueño segundos atrás. Lo llevé hasta la pieza vecina, encendiendo las luces. Su cuerpo escamoso parecía caerse a pedazos: las escamas eran quebradizas y parecían hechas de mica, diferentes a las de los individuos jóvenes de la raza Serpentoide. Sus ojos negros, quietos, hubieran aterrado a cualquiera que no hubiera visto antes a un Serpentoide ; felizmente yo les había conocido anteriormente, razón por la cual sólo sufrí un involuntario escalofrío. Lo até a una silla, y de pie ante él, le interrogué: -"¿Hay porvenir?" -"No." -" ¿Qué será de nosotros mañana?" -"No hay mañana. El verdadero porvenir es hoy. Se sufre al vivir porque se presiente a la muerte a cada paso." -"¿Y la locura?" -"La locura deja de serlo al hacerse colectiva; entonces, pasa a ser algo ajeno para el individuo." El Serpentoide tipo " Grome" se agitó en la silla. Lo había amarrado fuertemente y no podría desatarse por sí mismo. Continué inquiriendo: -"¿Hacia adónde marcha la vida del hombre? " -" Al sepulcro." -"¿De qué manera se debe vivir?" -" ¿Tropezáis con uno que miente? Gritadle a la cara: ¡Mentira! ; ¿tropezáis con uno que roba? Gritadle: ¡ladrón! ; ¡Y adelante! ¿Tropezáis con una muchedumbre que escucha con la boca abierta a quien les quiere guiar en un sentido provechoso para sí mismo? Gritad ¡Estúpidos! "Y adelante, siempre adelante!" -"¿Qué es un poeta?" -"Aquel que quiere hacer del batallar vivencial un baile delicioso. Aquel que con su indulgencia de bohemio contribuye a mantener la cobardía y la mentira y la miseria anonadante . Cuando predican la inmoralidad es para apropiarse de la hembra ajena. " -"¿Cómo hablar?" -"Que tus palabras sean estridentes y agrias." -"¿Qué opina de la Fé?" -"La Fé es el puente del sepulcro." -"Enuméreme los meses Mayas." -"Pop, Vo, Zip, Zotz, Tzec, Xul, Yaxkin, Moll, Chen, Yax, Zac, Ceh, Mac, Kankin, Muan, Pax, Kayab, Chumhu, Vayeb." La grabadora incorporada a mi traje recogía sus cascadas palabras... -"Recíteme el calendario Tibetano." -"Hay cinco elementos = tierra, hierro, agua, madera, fuego. Hay doce animales que aparecen dos veces ,siendo el primero macho y el segundo hembra. El calendario ejecuta un ciclo completo cada sesenta años. "Por ejemplo: Tierra/Ratón, Tierra/Toro; Hierro/Tigre, Hierro/Conejo; Agua/Dragón, Agua/Serpiente; Madera/Caballo, Madera/Oveja. ¿Más animales? Está el mono, el pájaro, el perro, el cerdo, el ratón, el toro, el tigre, el conejo, el dragón, la serpiente, el caballo, la oveja y comienza a rotar nuevamente." -"Hábleme de los Períodos del planeta Tierra." -"Período Carbonífero, Triásico, Jurásico, Cretáceo, Era Cenozoica, Era Cuaternaria." -"Es impresionante que lo tenga Ud. en su mente. Esos conocimientos se perdieron al arder la Tierra cuando Uds. la atacaron, en el año 5.613 E.J." -"No fue mi culpa."- Repuso. Ya eso lo sabía yo: él había sido uno de los cinco Rigenmax ( Dictadores anuales) que se había opuesto a la guerra de expansión Serpentoide/Grome. La votación había sido cinco en contra y ocho a favor..., lo cual tomó por sorpresa a las naciones terráqueas del año 5.613. -"Lo até porque al distraerme un segundo Ud, me atacaría aunque supiera que le iba a matar, ya que su naturaleza Serpentoide le habría impulsado a ello. Soltaré sus amarras para que se libere Ud. mismo."- Le indiqué, haciéndolo, para luego salir de allí por la ventana, sostenido por el aparato Antigravitor, llevándome la información obtenida mediante la grabadora de sonidos. Di la señal convenida, presionando el botón de la emisora de ondas hertzianas, por mientras me elevaba gracias al Antigravitor. Vi acercarse la masa oscura y lustrosa de una nave auxiliar, entrando en ella por su abierta esclusa. Se cerró la compuerta a mis espaldas, y el robot ETA- 300 computó la órbita de encuentro con la " Herakles" , a la que ingresó diez minutos después. La "Herakles" medía 540 por 80 metros, siendo la única del tipo "Destructor" en operaciones en órbita cercana al planeta de los Serpentoide. Bajé de la nave auxiliar, y ya en el pasillo me dirigí a la Sala de Mandos, flotando por los corredores . En la Sala estaba Carmen, Patricia, María, Alejo, Barros y el Fotógrafo. -"¿Cómo le fue?"- Me preguntó el Comandante Alejo Hiperión, general de tres estrellas en la Flota Humana. -"Traje la información, tras destruir la Base enemiga."- Informé, dándole el aparato grabador . -"¡Sígame!"- Ordenó, y se dirigió a su celda de trabajo, en donde flotamos alrededor de una mesa. -"Me alegro de que haya vuelto indemne. Pero quiero hablarle de otra cosa."- Indicó. -"De lo que Ud. quiera."- Comenté. -"Eso de enamorarse es cosa seria, que se hace fuera de las horas de trabajo, y por eso pareciera que fuera poco importante. La realidad que lo poco importante es trabajar, porque se hace para ganar plata y con ella alimentarse. "En el trabajo hay horarios y reglamentos que cumplir. Si no se cumplen se es despedido, dejando de percibir un sueldo...y el hambre se hace presente. "Por eso pareciera ser el trabajo muy importante : más que el amor, pero es el amor el que realmente vale más, ya que mueve a ser feliz y a querer trabajar. "Yo viví con una mujer conocida en mi juventud. Se transformó en una convivencia aburrida, repleta de mis dudas de si ella me era fiel o no. La mala suerte fue que ella mentía al decirse serme fiel, ya que poseía a otro hombre para sus expansiones sexuales."- Me explicó el Comandante. -"Otra vez con el mismo problema."- Le dije, cabizbajo, dejándole solo. La separación de esa mujer le había alocado. -"¡ Vuelve!"- Gritó Alejo. Volví. -"¿Y no tienes nada que aconsejarme?"- Inquirió. -"Sabéis que soy un robot."- Respondí.-" Puedo deciros que tenéis que haber comprobado muchas veces que erais engañado por ella, en vuestro subconsciente. Nada hicisteis, esperando la muerte súbita. Que no os llegó. Hoy sufrís por dos cosas: por haber aguantado tanto para separaros, y por haberos separado, fracasando en vuestra idea de una convivencia de por vida y sin infidelidades." Salí al corredor, y esta vez no me retuvo. Dentro de la Confederación de Planetas, la maldad se había infiltrado y algunos de sus miembros habían perdido humanidad, quizás por oír a demonios, o por alejarse de la religión. Lo cierto fue que se comenzó a practicar la antropofagia, ya que en los planetas mineros hacían falta alimentos. La gente consumía lo que llegaba en las naves cargueras, y a veces se mezclaban alimentos tradicionales junto con otros que no lo eran... Para lograr sus demoníacos fines se anunciaban puestos bien remunerados en las mismas naves, o transporte barato para integrarse a colonias extraterrestres. Una de esas naves era la " Cubadunga", nave inmensa para Alto Espacio. Consiguieron embarcar y criogenizar en ella a miles de lunáticos ( de la Luna, satélite de la Tierra), ofreciendo transporte barato para los planetas recién habilitados de Gama de las Pléyades. Criogenizados, muertos - vivos en las cápsulas heladas, a merced de los carniceros del espacio... Estas cosas se habían llevado a cabo en el pasado, y ahora la Tierra y sus millones de ciudades ya no existían. Nosotros volábamos ahora de mundo en mundo, pues en ninguna parte encontrábamos el Hogar. Llegué al Laboratorio, hallando allí a seis robots ayudantes y a su jefe humano, Barros. Al verme Barros, me espetó : -" Unamuno dijo que el que todo lo comprende no comprende nada, y el que todo lo perdona nada perdona. No tiene escrúpulos en venderse. ¿Qué razona Ud. de esto?" -"Debe tener razón."- Repliqué. -"Desconfiar del arte y de la ciencia. Dijo que el verdadero arte y la verdadera ciencia era la Fé."- Habló el bibliómano.-" Al esclavo que canta a la libertad no se le ocurre romper las cadenas; en eso pone a la literatura como esclavizadora de la idea genial que brota espontáneamente al escribir sin arreglar tanto el decir." -"Tiene razón, porque si el escritor se deja llevar por el rapto creativo, crea más que entablillando las ideas. El problema es que muchas veces no existe ese apasionamiento y hay que entablillar una simple idea, un reflejo de la verdadera acción."- Opiné. -"¿Y para qué?"- Inquirió Barros, arriscando su nariz. -"Para acallar a ese genio que el hombre lleva adentro, que no por viejo se va a acallar. Una necesidad que quiere verse expresada. Y el fuego ya no brota, pero hay calor, quizás el reflejo en el piso de vidrios pardos a los cuales le cae el rayo solar."- Respondí. -"¡Bueno, basta de esto!"- Dijo Barros, y me mostró una pantalla escrita, diciendo:-" ¡Memorízala!" Miré en ella, siendo lo siguiente lo que vi: Constelación y denominación. Magnitud Máxima Magnitud mínima ---------- OPHIUCHI II 4 12.7 T CORONA BOREALES 2 10. Q CYGNI 3 15 T AURIGAE 4.2 14.8 SAGITARIO I 4.9 <16.5 PERSEI II - 0.2 VAR. GEMINORUM I 5.1 <16 LACERTA I 4.6 14.4 GEMINORUM II 3.6 14.7 AQUILAE III -1.1 10.8 G I MONOCEROTIS 5.7 15.1 CYGNI III 2 15.6 R R PICTORIS 1.2 12.8 D.Q.HERCULIS 1.5 14.5 C P LACERTAE 2 15.3 V 630 SAGITARIO 4.5 15 V 368 AQUILAE 5.4 <15 V T MONOCEROTIS 4.3 15.8 C P PUPPIS 0.4 <17 D K LACERTAE 5.9 16 -------------------- -------- ----------------- ------ --------------------- -"Visitaremos la Tierra II."- Anunció Barros. Le miré con expresión incrédula. -"¡No me mires así!"- Rió Barros.-" Debo explicarte el funcionamiento de mi nuevo invento." -"Adelante." -"Es un Desfasador dimensional."- Brilló su mirada al decirlo. -"No está en mi banco de memoria."- Revelé. Me guió hasta un rincón de la sala. Allí se veía una caja gruesa, y en su interior había una esfera sujeta por cables. -"¡Es muy sencillo! La esfera es proyectada a otra dimensión por los campos que nacen de la caja que la contiene. Hay una banda infinita en donde elegir."- Rió Barros. -"¿Y funciona?" -"¡Sube!"- Me urgió. Por una puerta entré en la caja. La esfera colgaba de los cables, y se balanceó al introducirme adentro. -"¡Viajarás a la dimensión N + 1. Estarás allí una hora y luego te traeré de vuelta. ¡Ojo! Si te alejas de la esfera, ¡caput! Trata de entrar antes de una hora, o volverá sin ti."- Comento el científico. -"¿La esfera no tiene movimiento propio?"- Pregunté. -"No, no puede guiarse por sí sola. Es como un yo - yo, y yo tengo el hilo. ¡Abur!"- Sonrió, y cerró la puerta de la esfera, que por dentro estaba iluminada tenuemente por una ampolleta azul. Tras unos segundos sentí una vibración y un golpe, mientras giraba la esfera algunos segundos. Abrí la puerta metálica, para ver qué estaba pasando. &&&&&&&&&&& CAPITULO II. EL GUSONDI ." Frente a mí, una casa de apariencia extraña brillaba metálicamente en la oscuridad de la noche. Sentí un rugido, y miré hacia la derecha: una sombra como correspondiente a un oso venía desde el cercano bosque. Me oculté tras unos matorrales y observé. El oso se acercó a la puerta de la casa, y tras husmear el olor que percibía en el interior, se paró en dos patas y derribó la puerta hacia el interior. Corrí hacia allí, y al entrar a la casa, vi que el oso ya devoraba la cabeza de un hombre en traje de dormir, que aparentemente había intentado detener su avance. Una mujer gritaba, mientras cogía a dos niños, con los ojos desorbitados de horror. Pasó corriendo por mi lado, y salió a la oscura noche. El hombre ya estaba muerto; el oso saciaba su hambre; allí nada me retenía. Corrí tras los tres humanos restantes, para resguardarlos de peligros. La mujer no quiso detenerse, al ser interpelada, por lo que me limité a protegerla sin acercarme demasiado; tres ofidios trataron de atacarla, pero los destruí apresándolos en mis manos, y rompiendo sus cabezas contra las piedras. Tres horas duró el avance, llegando finalmente ante una casa similar a la de la pasada tragedia, y al ruido de los gritos de la mujer, sus ocupantes salieron al exterior, armados con una carabina. Se trataba de un par de ancianos, que le miraron sorprendidos, y a mí con recelo. El anciano me encañonó de inmediato, por lo que no moví un dedo. La mujer hablo en un idioma desconocido, y los ancianos la hicieron pasar al interior, atrancando la puerta. Me senté con la espalda apoyada en un tronco de árbol, con visión plena del frontil de esa casa, distante sesenta metros. Cuatro horas después, y aún de noche, oí las pesadas pisadas de un animal aproximarse desde el bosque. Caminaba siguiendo el rastro de olor que la mujer había impreso con sus pies en el suelo... El animal apareció ante mi campo visual, olfateando las emanaciones con fruición. Me vio. Sus ojillos eran malignos y brillaban de un modo satánico. Bufó al venir hacia mí, que le esperaba de pie. Medía dos metros cincuenta y cuatro centímetros, cuando se paró sobre sus patas traseras., Su cabezota hirsuta se recortaba contra el tenue rastro de las estrellas. Puse la velocidad máxima y corrí a su rededor, golpeándolo con fuerza Mach 3, el máximo permitido para no dañar mi estructura. Sentía quebrarse sus huesos a cada golpe y en tres minutos ya no tenia cómo quedar en pie, por lo que cayó al suelo, con un largo aullido de dolor. Cogí una roca y le abrí el cráneo, sacando su cerebro, que arrojé al suelo. El animal se agitaba aún... Le abrí el estómago con una piedra afilada, y saqué de allí los restos de comida tragada recientemente: vi trozos de cabeza humana, con los cabellos aún pegados al casco . Regresé al lugar en que apareciera la esfera de Barros, pero no estaba. Me quedé por allí, esperando. Seis horas después vi regresar el aparato, y cuando se abrió la puerta metálica, fue el Profesor Barros quien bajó al planeta "N + 1" con un bufido. Me ubicó con la vista, y aproveché para indicar:-"¡ Funciona!" -"¡Claro que funciona! Si ya había enviado robots antes. ¿Adónde te fuiste? ¡Tuve que venir yo en persona a buscarte!"- Se engrifó. Le conté la historia y luego me dijo:-" ¡Muy interesante! Esta es una zona rural en un planeta de humanos...¡Claro! Tiene que ser parecida a la Tierra; esta dimensión es la más cercana."- Meditó Barros, para luego hacerme entrar en la esfera con él, retornando al navío en un periquete. &&&&&&& Capítulo III. "" ÁRIDO ". Estaba yo allí con Barros, cuando entró a la sala el Gumbión 604 y me dijo:-" Lo busca el Fotógrafo." Lo seguí por los pasillos de la nave, y entré a los aposentos del Fotógrafo, quien era un hombre de contextura delgada, 48 años de edad, usaba barba y lentes ópticos con marcos de carey. -"¡CCC! Necesito tu ayuda"- Me dijo el Fotógrafo, con mirada chispeante. Siempre parecía ser fiesta, a su lado. -"Estoy a vuestras órdenes."- Le aseveré. -"Quiero salir fuera y tomar vistas de una estrella que tendremos cerca muy pronto.." Salimos al exterior junto con sus ayudantes, ayudándonos en el avance con los pasamanos y escaleras que disponía la nave para las reparaciones del casco. Llegamos hasta una cúpula de observación abierta, y colocamos las cámaras en posición. La estrella en cuestión ya se veía más refulgente que el resto, siendo su brillos dorados . -"¡Es maravilloso!"- Exclamó el Fotógrafo, captando imágenes con sus instrumentos; yo manipulé cuidadosamente uno de los aparatos, capturando bellas vistas de los planetas desperdigados por sobre el tapete negro del Gran Abismo que nos rodeaba. La nave giró majestuosamente y se acercó a un grandísimo planeta. -"¿Querrá bajar el Comandante?"- Preguntó el Fotógrafo.-"¡ Sería hermoso!" Entramos a la nave, tras la sesión de fotografía, y escuchamos mensajes auditivos: "Equipo de Exploración, a sus puestos! Naves Nº 3, 30 y 33 comenzarán separación de la nave en diez minutos." El Fotógrafo se comunicó con el Comandante telefónicamente, diciendo luego:-"¡ Listo! Voy a bajar. Llevemos el equipo. ¡Gumbión 300 : vienes con nosotros!" Era una orden, y mis sistemas se entibiaron de excitación. En las Esferas bajamos al planeta, que se mostró rocoso y árido, por su cercanía al astro. Pasamos allí tres meses y con el Fotógrafo encontramos algunas cavernas, que se adentraban decenas de kilómetros por las entrañas planetarias. -"Comandante: Pido autorización para explorar cavernas , en compañía de un equipo de 32 robots tipo Gumbión."- Habló el Fotógrafo. Alejo respondió:-" Concedido. Iría yo, pero me duelen los pies. Tráiganme muchos filmes, para incluirlos en la Bitácora general. Yo estaré en la Base." (La Base llamábamos a una burbuja energética ubicada en una planicie barrida por el viento y las tormentas de arena.) No sé por qué los humanos se alejan de la lógica. Alejo se pasaba sus horas de vida mirando hacia afuera de la "Base" , viendo pasar las nubes de polvo empujadas por vientos de trescientos kilómetros por hora...) "Gracias, Comandante. Seguiremos el túnel más amplio. Hasta la próxima." En órbita planetaria, la " Herakles" giraba cada seis horas alrededor del planeta, que llamaron " ÁRIDO". En su interior, el resto del personal humano de la tripulación se dedicaba a labores de mantenimiento. El Fotógrafo echó a andar cuesta abajo y lo seguimos los 32 cyborgs asignados a la expedición. Tras dos horas de marcha el túnel se hizo vertical, un pozo oscuro muy hondo. Debimos bajar pendiendo de cuerdas hasta llegar al fondo. Nos enfrentamos con tres bocas de túneles más. -"¡Uf! Estoy cansadísimo. "- Comunicó el fotógrafo.-" ¡Vayan tres por cada túnel, avancen dos horas, y regresen a informarme!" Yo me apresuré a entrar a uno de los túneles, porque me aburría la espera ociosa. A mi vera siguieron 204 y 101. Pronto avanzábamos al triple de la velocidad de carrera humana, ya que nuestros cuerpos no se resentían por ello. Las paredes eran de granito y el suelo era arenoso, con numerosas rocas y piedras esparcidas, caídas desde el techo. Más tarde atravesamos por otra clase de roca, llamada basalto, siendo el piso de roca. En algunos sectores el pasadizo se hacía estrecho y debíamos evitar rozar las aristas puntudas de los muros. Al dar la vuelta a un recodo, nuestras luces hicieron brillar enormemente las paredes, y nos detuvimos a observar su causa. -"Topacios."- Dictaminó 204. -"Amatistas."- Agregó 101. -"Azules y morados. Muy bellos."- Dije, arrancando uno del muro. 204 y 101 continuaron su camino, mientras yo me comunicaba con 108, informándole del descubrimiento. -"El humano está durmiendo aún."- Me instruyó 108.-" No quiere ser despertado por nada. Le comunicaré el descubrimiento cuando despierte." -"Entendido. Fuera."- Terminé el contacto radial. Elegí las mejores gemas a la mano, y las guardé en mi caja adjunta. Servirían de muestra para el Fotógrafo de lo descubierto. Regresaron 101 y 204. Pregunté:-"¿ Llegaron al fondo del túnel?" -"Negativo. Se cumplirán las dos horas asignadas de ausencia dentro del rango permisible, si reemprendemos el regreso de inmediato."- Habló 101. -"Recojan muestras, para llevar al Fotógrafo."- Indiqué, y así se hizo. Volvimos a la carrera al punto en que estaba el Fotógrafo. Le hallamos durmiendo . Eramos treinta y dos Gumbiones mirando al humano dormir. Podría decirse que vigilábamos su sueño. Casi podría jurar que todos hacíamos lo mismo, al estar observándolo: contábamos pulsaciones, inspiraciones, expiraciones. Tratábamos de calcular el grado de conciencia del durmiente, para determinar los minutos que le faltaban para despertar. Yo calculaba dos horas y tres cuartos, pero me equivoqué en diez minutos. -"¡Ah! No hay nada como un buen "tuto" (sueño) para despertarse refrescado!"- Opinó el humano, bostezando. Se alegró al ver las gemas en bruto, brillando a su costado. Las tomó, las sopesó, y les aplicaba luz, para ver sus vetas, sus brillos. -"¡Muy hermosas! ¡Gumbión 300! Vete con dos de éstos y se las llevas al Comandante Alejo." -"¿Desea que regrese?" -"No sé...¿Quieres regresar?"- Preguntó, meditabundo. -"Sí." -"¡Hazlo, entonces! ¡Ah! Pero ¿Y cómo vas a saber por dónde nos fuimos?"- Me preguntó. -"Haga que alguno de los Gumbiones marque muros al elegir bifurcaciones."- Pedí.-" Que raye el muro con flechas." -"¡Bien pensado! Se hará así. ..¡Y ya ándate!"- Ordenó el humano afecto a las fotografías. 204, 101, 30 y yo guardamos en nuestros depósitos las gemas de muestra. El camino de vuelta era más dificultoso, lento. La carga molestaba nuestros mecanismos, y avanzábamos con tiento. Al llegar al exterior, hallamos el viento soplando con violencia, levantando nubes de tierra con guijarros que tableteaban contra nuestras cubiertas. Menos mal de que no necesitábamos respirar, o nos hubiéramos ahogado en un minuto. Caminando a lo máximo que permitía un buen funcionamiento interno, llegamos a la esfera de protección en seis horas, y entramos. Fuimos presentados ante el Comandante Alejo, quien rió, diciendo:-"¡ Visitas! ¿ Mucha tierra, eh? ¿Qué me traéis, de parte del Fotógrafo? -"Joyas en bruto."- Comuniqué. -"¿A verlas?"- Pidió, parándose desde su sillón . Derramamos las joyas sobre su escritorio, y el Comandante las cogía, una por una, admirándolas. -"¡ Quintrix! ¡Haced que sean talladas de inmediato!" Quintrix era su cyborg personal, quien nos ordenó coger las gemas y seguirle. Las gemas quedaron depositadas en una caja, que se llevaría una Esfera al "Herakles", para hacerlas joyas en el Taller de la nave. Yo regresé ante el Comandante, quien veía un video en su aparato visor. No hizo caso de mí hasta un rato, por lo que pude grabar lo que estaba mirando. Era un informe sobre Cyborgs... " Se siguen bajando los costos de producción de Cyborgs, al hacerlos con mano de obra mecanizada. De setenta y cinco mil créditos han bajando a treinta y dos mil créditos, por unidad. Se entregan con el 100 % de efectividad garantizada. "La máxima empresa es " Viamundo", con sede en el Cráter Copérnico, en la Luna, aunque fábricas orbitales alrededor de la Tierra están comenzando a operar, en menor escala." El Comandante reparó en mi presencia, al quitar la vista del video, y dijo:-" ¡No me vas a decir que quieres algo de mí!" -"Sí, Comandante : regresar a la Expedición del Fotógrafo. " -"¡ Vete! Y cuando hallen otra cosa interesante, ¡me la traes!" Y siguió bebiendo y mirando en su pantalla. Con 204, 101 y 30 regresamos a las cuevas del Fotógrafo. Éste nos había dejado claras señales y a los dos días de marcha los alcanzamos en una laguna subterránea. -"¡ Ah, ya volvieron! Hallé este lago y construiremos una almadía, para explorar la costa."- Informó el Fotógrafo. Vi que los Gumbiones habían hecho un horno de fundición y soldaban ya las planchas. Un día después, subimos a bordo y remamos otros cinco, bordeando siempre la costa. No habían signos de vida, ni minerales económicamente valiosos. El Fotógrafo se despertó, tras su sueño del sexto día, gritando que las murallas se le venían encima. Cuando lo sujetamos, vociferaba diciendo que le faltaba el aire para respirar. -"Su indicador del tanque de oxígeno marca que le queda provisión aún para 30 días más."- Le informé, tras revisar su tanque de oxígeno. -"¡ No.! ¿Qué sabes tú, máquina loca?"- Me preguntó, y sus ojos estaban enrojecidos. -"Clave 32".- Dije a los Gumbiones. 101 le inyectó y se desvaneció el Fotógrafo. Lo cargamos de regreso y llegamos ante el Comandante Alejo. Éste le sacó la escafandra ( en la Base había atmósfera artificial) y preguntó:-" ¿Qué pasó? -"Claustrofobia".- Dije, y el Comandante me dio una corta mirada, ordenando: -"¡Llévenselo a la "Herakles" ! Y que lo vea el Médico." Subimos en una de las naves auxiliares...¡Qué bello es el Espacio con sus miríadas de estrellas! -"¿Qué le pasó?"- Preguntó la humana Carmen, al vernos entrar por el corredor principal, hacia la Enfermería. -"Claustrofobia. Se puso a explorar unas cavernas y lo atacó el mal."- Informó 101. -"¡Pobre loco! Ahora quizás ni aguante estarse en la nave."- Opinó ella. El Doctor, Gumbión 18, pronosticó, tras auscultarle exhaustivamente:- "Ataque de claustrofobia. Calmante y cama. ¡En unos días estará como nuevo! Pero, ¡no más cavernas para él!" Vi al acostado Fotógrafo durmiendo pacíficamente , cuidado por dos Cyborgs de Enfermería... Bajé a Árido con 101, quien me dijo:-" La historia del Fotógrafo es triste. Su esposa lo engaño con otro, él se fue de su casa y ella lo delató por no dar dinero para la alimentación de sus hijos. Entonces, él huyó, embarcándose en la "Herakles". -"Quien huye no soluciona sus problemas."- Opiné yo. Llegamos a la planicie barrida por el viento y entramos al Domo. Allí estaba el Comandante, recostado en su sillón favorito, bebiendo vino. En otros sillones cercanos estaban Patricia y María, ligeramente beodas. Patricia tenía 28 años, y María sesenta y dos. "¡Atención!"- Anunció el Comandante Alejo.-"¡ Voy a declamar!" Ellas rieron, mientras él se ponía de pie, usando una capa blanca . Se ciñó a sus sienes una cinta plástica, y dijo: -"¡Aire que empujas la nube de tierra vuela con furia hasta la Cochinchina!" Reían las mujeres. Tres Gumbiones de túnicas celestes les servían frutas de exóticas formas, provenientes del laboratorio hidropónico. El vino era artificial, como todo lo que comían los humanos a bordo del "Herakles". Alejo bramó:-"¿ Soy un chiste? ¿Soy absurdo? ¡Y que lo sea! Sólo el que imita ser absurdo puede conquistar lo imposible. ¡No hay más que una manera de dar en la tecla, y es dar ciento en el tablero! Para triunfar hay que afrontar ser ridículo. "¡Cuántos viven mediocremente por no tener valor!" -"¡Hurra!"- Gritó Patricia, bebiendo y chorreándose la ropa con el vino. Un Gumbión se apresuró a secar el líquido, con un paño. Ella paseó su mirada en rededor, fijándola en mí, a quien pareció identificar. Me interpeló: -"¿Sois 300? ¿Cómo quedó nuestro compañero el Fotógrafo?" -"En franca recuperación de su claustrofobia."- Respondí. -"¡Claustrofobia! ¡Temor al claustro! ¿Qué claustro? ¿La caverna? ¡Entonces se trata de Cavernofobia!"- Dictaminó Alejo el Comandante, y eructó. Tembló el piso y cayeron algunas copas. Patricia empalideció; Alejo se arregló la cinta atada a su cabeza, diciendo: "¡Temblores de tierra, temblores de aire, tronaduras rocosas. estrellas desmenuzadas la suerte está echada !" Un temblor más fuerte nos hizo caer a todos. -"¿Se estará rajando el planeta?"- Preguntó el Comandante. -"Epicentro a un kilómetro, rumbo Nor este."- Anunció Gumbión 8.000, auscultando sensores integrados a su ego. -"¿Y seguirá?"- Preguntó Patricia. De pronto, se abrió la tierra y entró en tromba el viento, la arena y un terrible Gusano de arena, inmenso, sideral. -"¡Ay!"- Gritó Patricia. Cogimos a los tres humanos y corrimos, pero la tierra nos sepultó, quebrando nuestro intento. Veo oscuro, ahora. Cientos de kilos de tierra me rodean, he quedado enterrado. El Gran Gusano devoró a los humanos y siguió su curso inalterable. Silencio. El crepitar de un planeta en mis oídos desconecto mis circuitos para sobrevivir... &&&&&&& ¡CHAK! Mis sensores se reactivan automáticamente, recobro la lucidez. -"¡Gumbión! ¿Oyes?" Oigo, pero no veo. Muevo mis manos y nada palpo... -"No te preocupes : habla-"- Dice la voz de Carmen. -"¿Qué me pasa? No veo."- Obedezco. -"Ahora eso no importa. Te hemos rescatado...al menos las partes que tenías intactas. Ten calma : en unos días te reconstruirán...cuéntame qué les pasó a los humanos." Había una nota de ansiedad en su voz. -"Apareció un inmenso Gusano de tierra, penetró en la burbuja de poder y devoró a los humanos Alejo, Patricia y María, que estaban bebiendo vino ."- Informé. -"¡Por eso no advirtieron el peligro! ¿Qué sería del Gumbión que debía haber estado atendiendo a los radares?"- Inquirió Carmen. No contesté, y ella agregó:- " Bien, no tienes que saberlo todo. Esta tragedia me convirtió en Comandante. Reposa, Trescientos; ya me verás." Esperé 102 horas y me vi en un espejo, de cuerpo entero. Me habían dado un físico nuevo... -Era más apuesto antes."- Le comenté al Jefe de Robótica presente. -"¡No os quejéis! Habéis salido ganando. Os hemos incorporado elementos totalmente nuevos, que duplicarán vuestra vida útil, antes de la próxima Reparación."- Me informó el Jefe Robótico. -"¡Mejor! ¿ Puedo irme ya?"- Pregunté. -"¡Aún no! Deberás pasar la cuarentena de pruebas."- Ordenó. Estuve dos días en ello : respondí lógicamente a preguntas poco lógicas, corrí la cantidad de kilómetros indicada , para luego someterme a exámenes de duración de metales y control por rayos X de los metales. Levanté y arrojé objetos a blancos específicos; me hicieron pruebas mnemotécnicas al darme a ejecutar problemas de matemáticas , para luego repetir los resultados varias veces en diferentes horas del día. Al tercer día fui llamado ante la Comandante de la "Herakles". -"¿Y por qué no venías a verme?"- Preguntó Carmen.-"¡ Yo creí que no te habían terminado de reparar, y ya lo estabas desde hacía dos días!" -"El Jefe de Robótica..." -"¡Quiá! Yo mando ahora. Olvídate de las pruebas que te quieran hacer en lo futuro."- Exclamó ella, y recordé lo fácilmente que ella podía enfadarse. -"¡Siéntate!"- Ordenó ella, indicando un sillón cercano. Mientras lo hacía, archivé en mi memoria el hecho de que ella disponía de tres Gumbiones conectados a la Sala de Comandos de la nave... -"He estado pensando en ese gusano. ¿Y si tratáramos de sacar de su estómago a mis compañeros? "- Dijo Carmen, con gesto adusto. -"Me extraña su razonamiento, Comandante. Bien sabéis que, a esta hora, deben estar transformados en albúminas, prótidos y lípidos, en el caudal sanguíneo del Gusano."- Repuse yo. Ella bostezó , con gesto triste. Pensé en lo efímero de la vida humana y la comparé con los 1.300 años de duración de un cerebro tipo Gumbión... -"Vosotros sois nuestros herederos."- Afirmó Carmen, como adivinando el curso de mis ideas. -"Pobres herederos; somos artificiales."- Comenté. -"En poco os diferenciáis de nosotros."- Opinó la Comandante, dando por terminada la conversación con un gesto de su mano. Un día después ella bajó al planeta, vestida con un traje especial de blindaje. La acompañé en su vista a los lugares afectados por el Gusano. -"¿Le siguieron el curso que llevaba?"- Inquirió. -"No se hizo." -"¡Ordeno que se haga ahora! Puede que nos guíe hacia su nido."- Expresó sus deseos la humana. En los días siguientes, a bordo de mininaves, los Gumbiones viajamos por sobre toda la superficie del planeta y detectamos 303 Gusanos de tierra. Hicimos diagramas de sus movimientos pasados, con ubicaciones día a día. Presenté el informe a la Comandante. Ella lo miró unos instantes, opinando:-" ¡Se ve que es un desplazarse al azar! No se notan apareamientos...Este continuo arar de la tierra, ¿tendrá algún propósito definido?" -"Es seguro."- Dije, pensando en el Orden que hay en todas las cosas hechas por el Creador de Planetas... -"Filmen desplazamientos. Usen la imaginación. ¡Quiero documentales de esas bestias increíbles!"- Me ordenó, por lo que puse equipos de tres Gumbiones por cada Gusano de tierra, los cuales medían sesenta metros de largo, en promedio. La epidermis de tales criaturas era correosa, con algunas placas óseas en el lomo y hocico. Una semana de filmación bastó para tener documentales de veinte horas de duración cada uno... Al ver las películas, la Comandante Carmen exclamó:-" ¡Es maravilloso! ¡Como antiguos trenes en marcha !" -"Hemos descubierto que los Gusanos se comunican entre sí."- Le informé. -"¡ Como las ballenas!"- Sonrió ella. -" A través de las grandes distancias el rumor de su avance se transmite como ondas sísmicas, que son percibidas por organismos sensores situados en la cabeza." -"¿ Y se aparean muy a menudo?" -" Por lo filmado, poseen sexos diferenciados. Creemos que son vivíparos. No se han visto apareamientos...aún."- Hice notar. -"Debe ser horroroso ver actos sexuales entre tamañas bestias."- Tembló ella. -" No hay nada horroroso en la creación de tejidos."- Opiné . Carmen expuso:-" No me quiero ir de este lugar. El vendaval de aire y arena parece limpiar mi mente, erosionando mi alma, y quizás con el tiempo podría abandonar el cuerpo sólo con mirar este paisaje de violencia." -" No hay muchos humanos en la nave con vuestros conocimientos. Vosotros dais sentido a nuestras vidas; nuestras almas y nuestros espíritus no existen. ¡Somos un eco de vuestras palabras, dormidas en nuestros Discos! Somos un legajo escrito por la Humanidad. No tenemos vida propia."- Comenté. Ella paseó rápidamente por la habitación, mientras hablaba:-" Sois nuestra creación, nuestra voz para siempre, grabada en el metal...como también nuestra figura. De eso, no dudo." Salió a caminar por el terreno, apoyada en dos Gumbiones; el viento soplaba a 75 kilómetros por hora... Mientras andaba fuera, aproveché para leer en el Diario del anterior Comandante; entre cifras y resúmenes de ordenes dadas, Alejo escribía sus recuerdos, aquellos de su vida pasada. Eran recuerdos tristes, que hablaban de un niño sensible a las violencias del mundo adulto. Sonó un timbre. Era la Comandante, que me llamaba. La hallé en el puesto de mando, rodeada por Gumbiones atareados en el manejo de la nave . -"¿Qué hacías?"- Me preguntó, al verme. -"Leía en el Diario del ex Comandante Alejo." -"¿ Te interesa el pasado?" -"Para comprender el presente." -"¡Mucho me temo de que no lo comprenderás así, Gumbión 300, porque las alternativas siempre se van mezclando y como hay cada segundo nuevos hechos, el pasado sirve sólo para sufrir más en el presente. "Pero, basta de eso. He recordado un antiguo libro, "El Kibalión", que me imagino está en tus memoria. Hazme un resumen de él." -"A sus ordenes."- Acepté. -"Vamos a sobrevolar las dunas. Transmite el resumen, que lo escucharé aquí mismo."- Ordenó. La nave se elevó, y mientras planeaba sobre las azotadas dunas, mi voz caía cual cascada en los oídos de la mujer... EL KIBALIÓN. LOS SIETE PRINCIPIOS = 1.- El principio del mentalismo. El Todo es mente, el Universo es mental. 2.- El principio de correspondencia. Como arriba es abajo; como abajo es arriba. 3.- El principio de vibración. Nada está inmóvil; todo se mueve, todo vibra. 4.- El principio de polaridad. Todo es doble, todo tiene dos polos, todo su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son semiverdades; todas las paradojas pueden reconciliarse. 5.- El principio del ritmo. Todo fluye y refluye; todo tiene sus períodos de avance y retroceso; todo asciende y desciende, todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento a la derecha es la misma que de su movimiento a la izquierda; el ritmo es la compensación. 6.- El principio de causa y efecto. Toda causa tiene su efecto; todo efecto tiene su causa; todo sucede de acuerdo con ley; la suerte no es más que el nombre que se le da a una ley no conocida; hay muchos planos de casualidad, pero nada escapa a la ley. 7.- El principio de generación. La generación existe por doquier; todo tiene sus principios masculino y femenino; la generación se manifiesta en todos los planos. TRANSMUTACIÓN MENTAL. La mente y demás elementos pueden ser transmutados de estado en estado, de grado en grado, de condición en condición, de polo a polo, de vibración en vibración. Más allá del Cosmos se encuentra la Realidad Substancial. El Todo debe ser todo lo que realmente es. Nada puede existir fuera del Todo. Siendo el Todo Infinito, Absoluto, Eterno, Inmutable, debe deducirse que todo lo que es finito, mudable, transformable y condicionado, no puede ser el Todo. El Todo es Mente viviente e infinita. El Universo es una creación mental en la mente del Todo. El Todo crea en su mente infinita innumerables Universos, los que existen durante eones de tiempo, y así y todo, para El, la creación, desarrollo, decadencia y muerte de un millón de universos no significa más que el tiempo que se emplea en un abrir y cerrar de ojos. El Todo Es. El Todo obra porque obra. Nada reposa, todo se mueve, todo vibra. Todas las verdades son semiverdades. Para destruir un estado de vibración no deseable pòngase en operación el principio de polaridad y concéntrese la atención en el polo opuesto al que se desea suprimir. El Ritmo puede neutralizarse mediante el arte de la polarización." Después de decir esto, ella exclamó:-" ¡Es maravilloso! Abre las puertas de un mundo nuevo, que siempre estuvo ante los ojos...Somos su creación; viviremos para siempre en su recuerdo; seremos inmortales." La nave luchaba por mantenerse en curso, debido al temporal de viento y arena, pero ella no ordenaba subir a mayor altura... -"Hay mucha complicación en la factura del universo."- Comentó Carmen.-" A veces me da miedo estar en manos de un Dios." -" Sois de Él, como la música es de un violinista ."- Repuse. -"Creo que somos levemente guiados por Él, pues con la nada de la experiencia que tenemos, moriríamos prontamente."- Opinó Carmen. -"Las personas demasiado amantes de su tranquilidad, como el Ex Comandante Alejo, sufren y se desconciertan en presencia de los numerosos albañiles que han venido a demoler el mundo."- Opiné, haciendo acopio de mis archivos filosóficos.-" Es que los siglos pasados fueron amplias mansiones en que los hombres se instalaban holgadamente con sus costumbres y sus manías. Pero el siglo actual no es mansión: es camino, y mal camino. "Hará mejor jornada aquel que lleve poco equipaje. Aquel que lleve menos ideas preconcebidas, menos recuerdos, menos amor a las cosas del pasado y a las costumbres . Los humanos van de viaje y deben ser valientes para poder decir adiós a muchas sombras agradables, sin que se empañen de lágrimas los ojos. "Los protagonistas antiguos fueron los caballeros andantes, los reyes y los millonarios. "El héroe actual es uno solo: es el hombre que marcha hacia el futuro sin esperanzas, el que sabe perder, el que sabe despedirse, el soldado que pelea sin bandera, el que no vuelve la vista atrás, el que sabe caminar sobre escombros. El que llegó lleno de ilusiones a este siglo y se quedó de pronto huérfano en medio de las más grandes tribulaciones del mundo. Es el menos arrogante de los héroes. Pero tiene una misteriosa grandeza, que la mirarán casi con ternura los hombres y mujeres del futuro." Carmen movió su mano derecha, diciendo:-"¡ Tiene razón, 300! Los avatares de la vida lo sacan a una de los planes que se hizo en la oscuridad y paz de la noche. "¿Quién podría dedicarse al Arte y la Literatura en paz, si llegan y lo persiguen, lo mojan con sangre, lo llevan ante situaciones críticas, lo acusan violentamente? ¿Quién puede refugiarse ante un tablero y escribir poesías y cuentos, si hay que pagar cuentas exageradamente grandes por cada acto equivocado que haya cometido?" Guardé silencio, y ella prosiguió, con voz fina :-" Estaríamos de huida, corriendo para que no nos alcancen. Sólo esporádicamente tendríamos respiro, un rato cada tres días. Deberíamos conformarnos con eso...Y el que no se conforme, peor para él, ya que es el entorno el que lo aherroja, no su voluntad." La nave dio un bandazo, y ella pareció darse cuenta recién del peligro. Ordenó subir hasta la Herakles, que nos aguardaba en órbita estacionaria. -" Ordene a las naves que regresen ; abandonamos Árido. "- Me indicó, antes de retirarse a su camarote. Radié el mensaje de inmediato, y en media hora ya teníamos las naves auxiliares aseguradas y los Gumbiones en sus puestos de trabajo . -"Orden cumplida, Comandante."- Comuniqué en persona a Carmen. -" Rumbo a la estrella más cercana."- Dijo, mientras leía en su pantalla con atención. Salí a cumplir la orden, y pronto la Herakles aceleró su curso, saliendo de la órbita planetaria, para hundir su afilada proa en el vacío espacial... Dos días más tarde, ella me halló en el Puente, y me dijo:-" La estrella en perspectiva es una roja gigante. " -"Llegaremos en siete horas al planeta más alejado de tal astro."- Comenté. -" Acompañadme al mirador de proa."- Ordenó. Allí no había nadie, y las estrellas relucían esplendorosas contra el negro abismo. Ella me pidió:-"¡ Háblame de Unamuno!" Bucee en mis archivos, y comencé de inmediato: -" Unamuno dijo que en el Antiguo Testamento y Shakespeare se siente lo que los hombres hablan. Allí se odia, allí se mata al enemigo, se maldice a su descendencia por generaciones: allí se peca. "El almíbar del perdón , de dejarse violar y perdonar, sentir el calor de la vergüenza por no actuar, no es de ser un hombre. Es como perdonar al lobo que nos va a comer. En comiendo, se comerá a otro, por no haberlo escarmentado uno." -"¿Cómo crees que era Unamuno?"- Preguntó Carmen. -"Decía la verdad. Eso le atraía enemigos, cosa que no le importaba. Analizaba a la sociedad ; no sólo a los literatos y su mundo, sino que a panaderos, mujeres de Estados Unidos de Norteamérica, hombres de Bolivia, en fin, a ellos y sus ocupaciones, ideas, al universo humano." -" Seguid." -"Dijo que se puede y se debe pelear por el pueblo, por su bien, yendo contra el pueblo mismo." -" Lo peor es adular el error." -"Pensaba que cuando un hombre de cierta cultura se esforzaba por ponerse popular, lo que se ponía era ramplón, trivial y ridículo." Continuamos allí conversando, y el planeta quedó a nuestra vista, girando alrededor de su estrella. -"¡Es bello! Enviad naves exploratorias."- Ordenó la Comandante Carmen. &&&&&&&&& CAPITULO IV. "PRIEKES." El sol rojo iluminaba la escena. Los Gumbiones exploraron la llanura en que se posó la nave auxiliar Nº 3, y hallaron un poblado de pájaros humanoides. Éstos eran altos, de pico curvo, caminaban erectos y sus alas se habían transformado en manos toscas, pero útiles : habían llegado a la Edad de los Metales. Los Gumbiones cogieron un espécimen vivo y le llevaron a la " Herakles". Allí, por medio de la hipnopedia, se aprendió el idioma. El ser llamaba a su especie "Priekes" y hablaba de sus enemigos seculares, los " Yaksunes." Bajaron a la superficie planetaria los tres humanos de la expedición. Carmen entró al poblado rodeada de treinta y dos Gumbiones armados con fusiles de rayos paralizantes. Al verlos, los " Priekes" montaron en gran algarabía y les atacaron con lanzas. Los Gumbiones paralizaron a medio mundo, y montones de priekes quedaron botados en las calles del poblado. Las demás criaturas huyeron del poblado , creyendo que había ocurrido una gran masacre. -"¡Estos pájaros están locos!"- Opinó Carmen. -"Las lanzas no eran bromas."- Recordó Barros, quien se había refugiado tras las armazones de los Gumbiones. En las chozas, que eran pocas, vivían todos hacinados ; se hallaron utensilios de metal , talleres provistos de fraguas y hornos. -"Son industriosos."- Habló la Comandante.-" Sería interesante saber qué piensa esta gente de la Vida. Capturen Priekes de edad avanzada , interrógenla y me entregan un informe con el resultado." Regresó a la nave nodriza, llevando algunos utensilios metálicos de recuerdo. Una semana después, los Gumbiones evacuaron el Informe, que es el siguiente: TEMA PENSAMIENTO DIOS Ser Superior que los creó. GOBIERNO El Rey recibió de Dios el deber de organizar su sociedad.Se le debe obediencia irrestricta. TRABAJO El trabajo es el amor de cada Prieke por su semejante. No es remunerado, pues el fruto se reparte entre todos los Priekes. FUTURO El futuro está en la Voluntad de Dios. No se preocupan por él. MEDICINA Los cirujanos operan con excelentes instrumentos a los heridos en batallas o accidentados, pero desconocen la medicina alopática. ARQUITECTURA Estancada. Se construyen cúpulas tradicionales desde hace siglos, sin introducir ninguna modificación. $$$$$$$$$$$$ Carmen bajó a la superficie una vez más, llevando a sus Gumbiones de escolta. Barros quedó en la "Herakles", dedicado a clasificar muestras vegetales del planeta. Cerca del caserío de los Priekes, los Gumbiones resistieron los ataques de los repuestos guerreros , limitándose a dejar inconscientes por unas horas a quienes osaban atacarlos. Los pájaros humanoides aprendieron la lección: si atacaban a los seres llegados en la nave voladora, sufrirían disparos que les dejarían botados en el suelo tres o cuatro horas. Si les ignoraban, a su vez serían ignorados... Optaron por ignorar a los Gumbiones, quienes comenzaron a cruzar las calles del poblado, hasta que fue aceptado su paso sin provocar alarma ni ataques. Así, Carmen pudo pasear a sus anchas , pudiendo ver la vida normal de aquellos seres ovíparos. Cada séptimo día, los aldeanos bailaban al atardecer, y el aletear de los pájaros y sus graznidos formaban un curioso espectáculo, que fue filmado numerosas veces por la Comandante . Arrojaban nubes de polvos de colores al viento, mientras cantaban lo siguiente: "A ti Dios viviente, Universo pensante y amoroso, Padre engendrador de planetas, a ti damos este canto afectuoso. "¡Gracias por la Vida, Espíritu; gracias por la risa y los colores, por el aroma de la comida caliente, por el anochecer apacible, por el aletear de la juventud en nuestros rostros, Gracias por crearnos de la Nada, Gracias por vivirnos!" Carmen estaba muy emocionada por estas demostraciones de amor hacia el creador, y obsequió una moto bomba, para sacar agua del pozo mecánicamente, por lo cual los Priekes dieron acceso a sus chozas al personal de la " Herakles". Cincuenta y dos días después de haber llegado al planeta, se recibió un mensaje en la radio de a bordo. Decía así: CASIOPEA- 20.300 A BORDO DE NAVE NODRIZA "JULES VERNE". COMANDANTE DE NAVE "HERAKLES": VERÉ CON MUCHO AGRADO QUE UD. SE DIGNE ENVIAR , VÍA DESGRAVITOR, UN MODELO DE GUMBION A LAS COORDENADAS 30X30 RBC3004, 110, ALGRF30, a fin de estudiar y perfeccionar el modelo. SU EJEMPLAR SERÁ REEMPLAZADO POR UNO DE LA SERIE IRAQ30-3808-BRB. ATENTAMENTE, GALATEA TETE COMANDANTE DE LA " JULES VERNE". Carmen mandó llamar por mí y me dijo:-" 300, te vas a la "JULES VERNE". No sé por qué querrán perfeccionar a los Gumbiones; no les veo la falla. Pero debe ser necesario. "Fue magnifico tenerte a mi servicio. Adiós." -"Le deseo mucho éxito en sus estudios, Comandante. Adiós."- Respondí. Usando el DESGRAVITOR, pronto estuve a bordo de la nave "JULES VERNE", a 303,5 Parsecs de distancia de la "Herakles"... Bajé del podio, y me enfrenté a los allí reunidos: un hombre y tres mujeres. Una de ellas, que debía tener unos cien años de edad, ordenó:-" Gumbión 300: te enviaré de inmediato al Puesto Robótico. Gujardo, llevadle." El hombre me guió, a través de un dédalo de pasadizos estrechos. La nave era más antigua que la "Herakles"... Me presentó ante dos muchachas, diciendo:-" Llegó el Gumbión; aquí os lo dejo."- Y se fue. Una de las chicas me preguntó:-" ¿Qué nomenclatura tienes?" -"Gumbión 300." -"¿Sabes por qué estás aquí, 300?"- Preguntó la otra humana. -"No, Señora." -"¿Y quisieras saberlo?"- Rió ésta. Guardé silencio. Enrojeció la chica, y habló:-" Has sido llamado por el cerebro Central; hemos descubierto el hangar de las naves Prohibidas. Tenemos certeza de que funcionan, al menos dos de ellas. Te enviaremos a Argepol 18- zqq- 7, y tu misión será llegar allá, explorar ese planeta y regresar con las naves utilizables." -"¿Solo?" -"Irás con Deyanira O`Brien, Luigi Gianpietro, Fortinbras de Lampedusse y Orozimbo D`Or. Todos humanos."- Informó la funcionaria. -"¿Y cuántos Cyborgs?"- Pregunté. -" No más que tú."- Sonrió la joven. Me pasó seis CD con los cursos a seguir, y añadió:-" Vector 32, hangar VII. Adiós." -"Adiós, Señoras!"- Me despedí, saliendo por el pasillo y llegando al punto mencionado; cosa fácil, pues había memorizado todos los nombres de los pasadizos que recorriera con Gujardo, momentos antes. Los cuatro humanos me estaban esperando, mientras fumaban plácidamente. -"¿Eres Gumbión 300?"- Inquirió el más alto del grupo. -"Lo soy."- Respondí, haciendo un saludo a todos. -"¡Al fin partiremos!"- Resopló e hombre, y me empujó hasta una esclusa. Entramos todos allí, pasando a una nave lenticular, que había estado adosada al casco exterior de la " JULES VERNE". Ya dentro de ella, me pidieron los CD de guía, introdujendo el primero de ellos en la puerta del Computador Central de esa nave. Mencionaron sus nombres, para que les identificara a futuro. Dieciocho segundos después, la nave, a estertores, se despegaba de la nave nodriza, saliendo a espacio abierto. -"¿Cuánta distancia viajaremos?"- Preguntó Deyanira. Gianpietro replicó:-" Por siete Parsecs." &&&&&&&&& CAPITULO V. "LE ROI ET SON COURTISANS." Ya en curso, los humanos se sentaron ante una mesa redonda, mientras que el cyborg GUMBION 300 quedaba de pie. -" Me desagrada tener un robot aquí."- Dijo Deyanira. -"¿Por qué?" -"¡Estábamos tan bien sin él!"- Reclamó ella. -"¿Desdeñas su capacidad de ayudar?"- Preguntó Gianpietro. -"Prefiero arreglármelas sola."- Alegó Deyanira. -"¿Y cuando uno de nosotros enferme?"- Preguntó Orozimbo D`Or. -"¡Su labor puede ser repartida entre los demás!"- Explicó la mujer. -"¿Y qué te hace pensar que aceptaremos trabajos extras?"- Preguntó D`Or. -"No lo sé."- Sonrió ella. -"¡Ah! Ya vas viendo la realidad. No todos pensamos como tú."- Afirmó Orozimbo. Ella hizo un gesto de desagrado con su rostro. -"Bien; aceptamos la ayuda del Gumbión ."- Afirmó Luigi Gianpietro. -"¿Cuánto tiempo durará su estadía entre nosotros?"- Preguntó Deyanira. -"Se nos dio para llevar a cabo la labor encomendada. Aparentemente el Comandante Tete piensa que es necesaria su ayuda ."- Comentó Gianpietro. -"¡Con tal de que se pueda devolver al Gumbión apenas tengamos éxito en la misión, bien por mí!"- Afirmó Deyanira. -"Nombrémoslo de otro modo."- Pidió Fortinbras de Lampedusse. -"¡Que se llame Jonás!"- Pidió Deyanira. -"No, porque nos puede tragar un Agujero negro."- Denegó Orozimbo. -"Opto por llamarlo Laertes."- Propuso Fortinbras. -"¡Me gusta! Que se llame Laertes; grábatelo en la memoria, Gumbión."- Ordenó Luigi Gianpietro. -"Entendido, Señor."- Respondió (Gumbión 300) Laertes... -"Ahora, concentremos nuestras mentes : vamos hacia Argepol 18, y yo soy vuestro capitán."- Comentó Luigi Gianpietro.-" Pero yo no seré vuestro capitán, ni vosotros mis subordinados." -"¡Me parece ideal! Una democracia en vuelo."- Rió Deyanira. -"Ideal, sí. Acá sólo habrá un Rey y vosotros los cortesanos. Deyanira será mi Reina, Fortinbrás el Conde, Orozimbo el Marqués y Laertes será el lacayo."- Ordenó Luigi Gianpietro. Todos rieron, nerviosos y excitados. -"¡Bien! Como soy el Rey, os daré vuestros trabajos: ¡Reina Deyanira! Vos seréis mi amante." -"¡Saaa!"- Exclamó Orozimbo. -"Lacayo: vos pilotearéis la nave lenticular y haréis todo el trabajo...a fin de cuentas, no necesitáis dormir."- Ordenó el Rey ( Luigi Gianpietro) -"Será un placer, Señor."- Respondió Laertes ( Gumbión 300) el Lacayo. -"¡No me digáis Señor! Soy el rey; decidme Su Majestad... y hablad en tercera persona del singular, si os place...o no, pues es una orden."- Rió el Rey. -"¿Y mis labores, Oh Rey?"- Preguntó Fortinbras el Conde. -" Vos no haréis nada...y lo haréis todo: a vuestra elección. Si un día queréis pilotear, hacedlo. Si queréis enviar misiles, sea. Y así, sin distingo." -"¡Sois un Rey alucinante!"- Se maravilló la Reina. -" ¿Y vos, Marqués de Orozimbo? ¿No habláis?"- Inquirió el rey. -"¡Si vamos a ejecutar una parodia para no volvernos locos con tanto viaje por el cosmos, no hallo nada mejor que empezar de inmediato con la demencia! Espero que esto no llegue muy lejos, sin embargo."- Opinó Orozimbo D`Or. -"¡Evidente, querido Marqués D`Or! Vos haréis lo que os pida, y basta ya de charlar. ¡Lacayo! ¡Traed los utensilios báquicos!"- Ordenó el Rey. Gumbión 300 corrió a buscar el vino y las copas. Tras llenar las copas, y con ellas en las manos, el Rey brindó solemnemente:-" ¡ En el Nombre de Dios Jehová Todopoderoso, denomino desde este momento a esta nave con el nombre de "Quijote"! Bebió de un trago el licor, y estrelló la copa en el suelo. Los demás tripulantes le imitaron, menos el lacayo... -"¡Bien, mis amigos! ¡Id y levantad a la "Quijote" y ponedla en la órbita correcta! ¡Lacayo! ¡Supervise la acción!" -"¡A vuestras órdenes, Su Majestad!"- Replicó el cyborg. La nave aceleró cual saeta, perdiéndose entre las miríadas de estrellas presentes, bajo la guía hábil del Gumbión. Su misión seguía siendo traer al Comandante de la nave "JULES VERNE" (GALATEA Tete) dos o más de las citadas Naves Prohibidas, sitas en un Hangar recién descubierto en la superficie del planeta Argepol 18... &&&&&&&& CAPITULO V. ".EN VIAJE" -"¿Cómo va el curso de la nave, Lacayo?"- Preguntó el Rey. -"Avanzamos, Su Majestad."- Respondió Gumbión 300, Laertes el lacayo. -"¡Por más que avanzamos, siempre hay más que avanzar!"- Repuso el Rey. -"Es obvio. Y cuando lleguemos, antes de que bajemos, habrá que seguir haciendo cosas."- Aclaró el lacayo. -"Es una bufonada."- Opinó el rey. -"Obvio. Es una bufonada vivir, si es que no se tienen ganas. ¿Tenéis ganas vos?"- Inquirió el lacayo. -"Ninguna." -" Por eso es que os aburrís. Porque no creo que tengáis claustrofobia." -"No la tengo. Es sólo aburrimiento de todo; todo lo hallo tan latoso, tan soso..." -"Quizás sea vuestra edad."- Aventuró el Lacayo. -"¿Cuarenta y seis? Quizás, aunque a los veintitrés ya estaba aburrido." -"Viviríais muy de prisa, entonces." -"No lo creo así. Lo que más hacía era salir por las noches, con amigos. Caminábamos y conversábamos; a veces corríamos sin ton ni son. A quemar las energías que no habíamos gastado durante el día."- Comentó el rey, y dejo de hablar, por lo que el Lacayo se fue a sus labores de mantención. Pasaron tres años. La nave fallaba en muchas partes; sus tuberías dejaban escapar gases o fluidos. El equipo de reparación (el Lacayo) no disponía del tiempo suficiente para cumplir con todas sus obligaciones en la nave, ya que el Rey y sus cortesanos no querían ayudar en nada. Ningún humano hacía nada útil en la nave, ni siquiera cuando los timbres de alarma de proximidad sonaron, anunciando al planeta Argepol 18... -"¡Llegamos!"- Avisó el Rey, por los parlantes interiores. Fueron todos a la Sala de Observación. La curiosidad había borrado (momentáneamente) la apatía de 26.280 horas pasadas en la nave "Quijote"... -"¡Lacayo! Aterrice la nave."- Ordenó el Rey, desde su butaca preferida. Gumbión 300 se multiplico para poder hacerlo, combinando en un solo tablero todos los comandos. Quedaron acoplados a un satélite militar, en órbita ecuatorial. Los oficiales encargados permitieron bajar sólo a dos tripulantes, para cumplir la misión que les había llevado hasta allí. El oficial encargado de acompañarles hasta la superficie, de nombre Rorengo, preguntó:-" ¿Tuvieron buen viaje?" -"Muy bueno y muy tranquilo"- Respondió el rey. -"¿Sin problemas psicológicos?" -"Ninguno."- Respondió Luigi Gianpietro, sonriendo amistosamente. -"Me alegro. Los viajes largos son problemáticos. La criogenización es preferible."- Opinó Rorengo. Descendieron al pie de unas montañas. Un edificio blanqueaba bajo la luz del astro. -"¡Allí es!"- Informó Rorengo. Se dirigieron al lugar, presentando sus credenciales a Darth Vaderio, el jefe de Ingenieros. -"¡ Ah! Venís a llevaros las naves. Perfecto. Tenemos dos en buenas condiciones." Les transportaron hasta un amplio hangar, en donde brillaban bajo los focos dos naves . -"¡Son triangulares! ¡Parecen cristales!"- Se maravilló Luigi. -"Viajan por las dimensiones paralelas y por el espacio normal. Se necesita saber, eso sí, las coordenadas. Tenemos en la memoria de los computadores 204.321 coordenadas." -"Un buen número de planetas."- Dijo Luigi. -"Son sólo siete. Hay un infinito por descubrir y las coordenadas actuales abarcan cada uno de esos planetas en forma tal, que pueden aparecer las naves en 29.188 lugares de cada planeta..."- Explicó Darth Vaderio.-" Son naves que revolucionarán la vida humana. Llevarán a nuestra raza a través de este Universo y los Paralelos. Y a sus trillones de trillones de planetas y astros de cada uno." -"Veremos maravillas impensadas."- Opinó Luigi. -"Por ello, cumplid vuestra misión con rapidez."- Pidió Darth Vaderio. -"Para eso estamos acá. Pero debemos compenetrarnos de su funcionamiento. Dígale a sus técnicos que estamos listos para comenzar el aprendizaje."- Pidió Luigi Gianpietro. -"De inmediato."- Sonrió Darth, pulsando un timbre, y llamando a cinco humanos, que prontamente acompañaron al interior de una de las naves a los dos recién llegados, comenzando de inmediato la enseñanza de los controles de aquellas naves triangulares. Gianpietro hizo bajar a Gumbión 300 de la nave " Quijote", para que memorizara los datos que entregaban tanto las computadoras portátiles de los técnicos, como los comandos necesarios para el buen manejo de las naves triangulares. Seis semanas después, subían las dos naves a la órbita del "Quijote", y las embarcaban en su bodega principal. Se despidieron de Darth Vaderio y del oficial de enlace Rorengo, para luego comenzar el viaje de regreso hacia la nave "JULES VERNE", que viajaba a siete parsecs de distancia... Durante el periplo, el rey y su corte se entretuvieron en aprender a usar sin equivocaciones los controles de las naves triángulo, ayudados por el Lacayo (Gumbión 300). -"Estamos siendo los primeros pilotos de naves tipo triángulo, en muchos siglos."- Recalcó el Rey. -"Si volvemos con ellas ahora, ¿Cuánto tiempo deberemos esperar para que nos asignen a una?"- Preguntó el Conde. -"¿Y quién os dice que nos van a asignar a alguna? recordad que nuestra misión es de simple transportación."- Hizo notar el Rey. -"Según los Reglamentos, tenemos ocho meses de licencia ( con goce de sueldo completo), al llegar a la Base."- Recordó el Conde. -"Sabrá Dios en qué artilugio nos embarcarán después."- Declaró Orozimbo, el Marqués. -"¡Hoy estamos pesimistas!"- Clasificó la Reina. -"Es que así van las cosas presentándose, querida."- Opinó el Rey, abrazándola levemente. -"¿Y qué haremos al respecto?"- Quiso saber ella. -"Lo que hacen todos: tomarse la existencia con paciencia. No se puede tenerlo todo."- Bufó el Marqués. -"¿No os gustaría haceros de una de esas naves triangulares, Su Majestad, y explorar este Universo, y un par más ?"- Preguntó el Conde, sobándose la barbilla. -"¡Me aterraría!"- Declaró el Rey. -"¡Recordad que vos no sois ningún Rey, en verdad, pero podríais llegar a serlo, si os lo propusierais!"- Consideró el Conde, con ojos maliciosos. -"¿Y cómo haría yo tamaña transmutación?"- Preguntó el Rey. -"¡Llenando un mundo con clones de todos nosotros! Dándoles un estado y un Gobierno a la población así formada."- Ideó la Reina. El rey lo meditó, para decir :-" No ambiciono el poder, ni la Gloria, ni la adulación. Lo que anhelo más es la tranquilidad." -"¡Entonces, vos debierais haber nacido piedra!"- Se burló la Reina. -"¡Quizás lo haga, en mi próxima reencarnación! ¿O debiera decir " litonación" ?"- Habló Luigi Gianpietro. -"Entregaremos las dos naves, entonces. Nuestro equipo se desintegrará."- Se lamentó el Conde. -"¡Así lo espero, súbditos! Recordaréis este viaje monárquico, con una sonrisa. Ha sido un viaje blanco, sin maldades."- Aclaró el Rey.-" Yo me he entretenido en descifrar la Biblia, a mi manera. Os puedo prestar mis escritos. Sacaríais algo de provecho de ello, os lo aseguro. También os recomiendo comenzar tareas de cualquier tipo, que después podréis entregar a la civilización, como trabajos que quizás ayuden a alguien a subir un escalón en su evolución personal." Los escritos de Su majestad circularon por la Corte en los meses siguientes, y de muestra transcribimos un extracto: TEXTO. 1 Reyes 3: 28 = "Y todo Israel llegó a oír de la decisión judicial que el Rey había dictado; y se llenaron de temor a causa del rey, porque vieron que la sabiduría de Dios estaba en él para ejecutar decisión judicial". COMENTARIO: El caso fue que dos prostitutas alegaban que la otra había cambiado el hijo muerto por el hijo vivo. Y Salomón ordenó cortar en dos al vivo y darle la mitad a cada una. Oyendo esto la verdadera madre prefirió le dieran su mitad a la otra, mientras que la falsa madre aceptó que se le diera una mitad. Así supo Salomón cuál mentía. Y como la sabiduría de Dios es ésa, entonces Dios ve en nosotros cuándo mentimos o cuándo decimos verdad, que para que siga entero y funcionando preferimos dárselo al contrincante, para que no muera ( o se acabe). Y el caso es que lo entregamos y nos quedamos sin nada, pero sabemos que Dios sabrá entonces a quién verdaderamente le pertenecía, y se la dará, al cabo del tiempo. Acá se dice " se llenaron de temor a causa del Rey", o sea, miedo de ser juzgados por él. En caso de haber actuado mal y llegar a juicio, sería condenado quien fuera culpable, y no quien se defendiera mejor." &&&&&&&&&&&& El Rey y su corte llegaron ante la Comandante Tete, y le hicieron entrega de las naves, incluida la lenticular denominada "Quijote". que fue afianzada nuevamente sobre el casco de la "JULES VERNE". Se le otorgó a él y su tripulación ocho meses de vacaciones pagadas. El Rey sin reino llegó a su domicilio,situado en Nueva Syrtis, la ciudad marciana. El edificio estaba deshabitado, y en el hall central había un letrero: "MINISTERIO DE BIENES NACIONALES. Nueva Syrtis. A LOS PROPIETARIOS DEL EDIFICIO " NICANOR PARRA": CUMPLE A ESTE MINISTERIO NOTIFICAR EL DESALOJO Y DEMOLICIÓN DEL EDIFICIO DE CINCO PISOS UBICADO EN SAN PABLO ESQUINA TEATINOS. LOS COMUNEROS RECIBIRÁN LA INDEMNIZACION CONFORME AL AVALUO FISCAL VIGENTE. DEBERÁN PRESENTAR ESCRITURAS DE TÍTULOS DE DOMINIO VIGENTES A LA FECHA, PARA RECIBIR LOS VALORES CORRESPONDIENTES. ALCALDE ROXI BUROCRA." Luigi Gianpietro ( Ex Rey) bostezó, diciendo:-" ¡Voy a tener que mudarme!" Subió a sus cuartos, y desempolvó el lugar. Esa noche la Municipalidad se dió el lujo de provocar una pequeña lluvia y por ello debió mover su cama al recibidor, ya que habían goteras en el dormitorio. Al amanecer salió, dirigiéndose al Puesto de Comando. Se presentó ante su amigo Cornel O`Ramond y le dijo:-" Vengo llegando del espacio, pero quiero volver a él. ¡Mi departamento está en demolición!" Cornel le sonrió, respondiendo:-" ¡Siempre vagabundeando! Sabes que no te puedo asignar con tu nombre...¿Qué tal si te lo cambio?" -"¡Estaría muy agradecido!"- Se alegró Gianpietro. -"Preséntate mañana al Silo 303 y allí un oficial te llamará por tu nuevo nombre: Marbundo g3- 043." -"¡Un nombre de clon! "- Se espantó Gianpietro. -"¿Ah, con melindres ahora ? ¿Quieres o no irte al espacio?"- Preguntó Cornel. -"Quiero irme; acepto el título."- Se resignó Luigi Gianpietro. -"¡No pongas cara de mártir! Te invito a mi casa; me casé otra vez...te presentaré a mi nueva esposa."- Rió Cornel, palmeándole la espalda. Luigi le consultó por la dirección de su hogar, y tras anotarla, se marchó esperanzado. &&&&&&&&&&&&&&& CAPITULO VI. "LA NAVE TRIANGULAR." -" La tripulación está lista, Capitán." -"Bien. En diez minutos emprenderemos el viaje."- Avisó el capitán Marbundo g3- 043. La nave triangular flotaba en el espacio. Era la "AS - 1 ", la primera nave interdimensional salida de la cadena de montaje. Miles más saldrían, en los meses sucesivos, a explorar el Universo. Sonaron los timbres de alarma. Los treinta tripulantes se aseguraron en sus asientos, atentos a la maniobra. Zzzzrrrr ! Un zumbido, y la nave se hundió en la nada, desapareciendo para los ojos de los miles que les veían desde la órbita alrededor del planeta Marte. Brotó en Alfa de la Lira, cercana al último planeta de aquel sistema. -"¡Estrella a la vista! Orbitaremos el Octavo Planeta."- Anunció Deyanira go- 0034, desde su puesto de pilotaje. La nave se aproximó al planeta, en vuelo normal, girando en su rededor, mientras se filmaba su superficie rugosa y cubierta de rocas. -"No hay signos vitales. No hay atmósfera."- Avisó Obomdo 030- 030- 1, tras ver por enésima vez sus instrumentos en pantalla. Prosiguieron viaje hacia el Séptimo planeta. Un gran océano cubría casi toda su superficie, excepto en el Ecuador, en el cual un continente de las dimensiones de América del Sur erguía sus cordilleras en forma majestuosa. -"Descenderemos. Coordenadas 03103- 43B- 03,04312."- Leyó el Capitán, fijándose en los cálculos de su Computadora. Rauda bajó la nave "AS- 1" , posándose cerca del mar, sobre un monte. Bajaron diez tripulantes usando escafandras, por la escasez de oxígeno en la atmósfera. -"Es un hermoso lugar. Bajen equipo de medición e instálense por una temporada."- Ordenó el Capitán. -"El mar se ve hermoso."- Opinó Olega zr03-3. -"¡Vayamos a explorar!"- Exclamó el Capitán, haciendo que Olega le acompañara caminando por entre la floresta, que se componía de nutridos matorrales, plantas de hojas carnosas y altos árboles de pequeñas hojas, mecidas por la brisa marina. Llegaron a la playa, que estaba compuesta por arena de granos gruesos y blancos. El color del mar era azul, que en ese momento tenía altas olas coronadas de espuma, que reventaban formando mantos de trepidante albor. Divisaron, mar adentro, nubes de pájaros, pescando merced a profundas zambullidas, tras las cuales siempre brotaban de las aguas con un reluciente pez en sus alargados picos. Regresaban a la nave, cuando sintieron un galopar, y vieron aparecer un gran toro, que les atacó sin dilación. Olega y Marbundo, que iban armados, descargaron algunos tiros en contra del animal, que cayó de bruces, muerto. -"¡ Increíble! Animales de ese tamaño, funcionando con tan poca provisión de oxígeno."- Comentó Olega. Al llegar a la nave fueron objeto de preguntas por el resto de la tripulación, alertados por el sonido de las armas. -"¡Hallamos un animal salvaje similar a un toro! Nos atacaba, y debimos defendernos."- Explicó Marbundo.-" Será mejor que todos se armen, y mantengan vigilancia en este sector, por si aparecieran otras formas de vida hostiles." Los tripulantes se apresuraron a hacer lo ordenado. Marbundo entró en su camarote y pidió, al Dispensador de Bebidas, un licor suave, para calmar sus nervios. Estaba bebiendo, cuando sonó el telefonovisor. -"El Capitán al habla."- Dijo con voz grave. -"Soy el Doctor Kirk. Tengo en Enfermería a la Señorita Olega y quisiera que Ud. viniera, Capitán."- Pidió el médico de a bordo. -"Voy de inmediato."- Avisó Marbundo, arrojando el vaso a la trituradora de alimentos, para su posterior reciclaje. Al llegar, vio a Olega zr03- 03 en una camilla, y dijo:-" ¡Olega! ¿Qué tiene Ud.?" -"¡Capitán! ¡Hay demonios aquí! ¡Quiero irme de este planeta!"- Se quejó ella, poniéndose de pie. -"¡Siéntese!"- Ordenó el doctor Kirk, entrando a la Sala desde la oficina adjunta.-" Capitán; cuénteme Usted lo que les sucedió." -"Al venir de regreso a la nave, desde la cercana playa, un animal semejante a un toro nos atacó, al que derribamos de algunos tiros. Llegamos sin un rasguño. ¿Por qué ella habla de demonios?"- Inquirió, a su vez, el Capitán. -"Pase a mi oficina, Capitán; Señorita Olega, guarde la calma; nada le va a pasar." Ella le miró asustada, pero se recostó en la camilla. Ya en la oficina, el Doctor Kirk explicó:-" Sufre de delirio de persecución; algo que se le desarrolló de pronto, ya que en los chequeos previos a este viaje estaba psicológicamente sana. "Recomiendo que no sea integrada a ninguna expedición al exterior, al menos por mientras trabajamos en el aspecto psíquico que le está molestando." -"¡Ningún problema! Puede Usted disponer de ella , darle calmantes, en fin, sanarla."- Suspiró Marbundo, porque ya comenzaba a tenerle aprecio a la chica. -"Así se hará, Capitán. Y ¿piensa Ud. explorar este planeta? La gente ociosa cría malos hábitos; después no querrán trabajar."- Opinó el doctor Kirk. -"Exploraremos el planeta, para llenar el informe que entregaremos al regreso a la Tierra. Recuerde Ud. que somos los exploradores; más tarde vendrán los colonos a los planetas tipo Tierra, y debemos estar seguros de que no tengan problemas con el entorno ni los habitantes."- Explicó Marbundo. -"La escasez de oxigeno sí es un problema para nuestros organismos, Capitán. A pesar de la existencia de árboles, este planeta es escaso en tal elemento. Quizás se deba a que esté perdiendo su atmósfera por el diámetro insuficiente que tiene para mantenerla retenida."- Opinó el doctor. Marbundo no respondió, porque al médico no le competía investigar aquello, y él no estaba interiorizado aún del problema. Salió de la Sala, tras asegurarle a la mujer que pronto abandonarían el planeta Séptimo... Fue a la Sala de Mandos, y notó que afuera ya había oscurecido. Preguntó al primer Oficial:-" ¿Estamos resguardados por barreras de fuerza ?" -" Sólo por radares en alerta máxima, Capitán. No he energizado las barreras, ya que gastaríamos mucha energía." -"Está bien; conecte las alarmas al sistema principal, para que así todos se enteren si hay intrusos en el área, y de esa manera contemos con personal para repeler lo que nos amenace."- Pidió Marbundo. Volvió a su camarote, en donde halló a Olega esperándole. -"¡Perdone que le moleste de nuevo, Capitán! Pero quisiera hablar con Usted."- Dijo la muchacha. -"Pase Usted."- Invitó Marbundo, y entraron a su camarote, sentándose en las butacas del recibidor. -"¡ No piense que estoy desquiciada! Pero le prometo que oí voces, cuando apareció ese toro..." -"¿Voces? Yo no oí nada."- Expresó Marbundo, mirándole las piernas a la joven, que las lucía pues usaba un corto entrepiernas. -"¡Decía algo así como ¡Muere, muere! Y al ser herido, emitió como un llanto de bebé."- Dijo Olega, tapándose el rostro con las manos. Marbundo la trató de consolar, tomándole de los hombros, pero la chica le abrazó, sollozando. El contacto con ella, el cansancio de la noche, el trago de licor, activaron sensualmente a Marbundo , quien comenzó a besarle el cuello, para terminar besándose apasionadamente con Olega, la que le abrazó fuertemente... Al día siguiente, Marbundo se duchó y salió a recorrer el navío de muy buen talante. Ordenó al primer Oficial que alzara vuelo, para explorar desde el aire el continente. Éste, de nombre Ryeda /838, comentó:-" El Oficial encargado de Hidropónicos me pidió autorización para subir a bordo muestras del suelo, para tratar de aclimatar plantas terrestres en él, a fin de saber si pueden crecer aquí hortalizas y arboles terrestres." -"¿ Y ya trajeron dichas muestras?" -"Afirmativo, Capitán; no creí ver mal en ello."- Opinó Ryeda /838, quien era una joven mujer de 26 años . -" Lo apruebo. Prosiga."- Dijo Marbundo, yéndose a mirar por las pantallas el despegue. Dos horas después rugieron los motores y la nave se comenzó a desplazar lentamente por sobre el terreno, para que los sensores de que estaba provista efectuaran un exhaustivo análisis del subsuelo . Sectorizado el continente, llevaban dos semanas en estas labores, cuando el oficial encargado de Hidropónicos, Samuel Leferte/434 dijo a Marbundo: -" Capitán, le invito a la Sala de Hidropónicos, para enseñarle algo." -"Vayamos allá."- Sonrió Marbundo, quien algo sabía ya, de oídas. El oficial le mostró una pequeña plantación de tomates y porotos, conseguida aceleradamente gracias a los sistemas de que disponía su laboratorio. -"¡Crecimiento acelerado! Y verá Ud. qué sanas se ven estas matas; de seguro son las mejores obtenidas en laboratorios experimentales con terrenos no terrestres."- Se vanaglorió Samuel Leferte/434. Marbundo le dio la mano, felicitándole, e instándole a producir más especímenes:-"¡ Le felicito, Oficial! Anotaré este logro en la Bitácora de a Bordo, ya que es una buena noticia para los posibles colonos que deseen instalarse en este planeta." Marbundo salió al corredor, tropezándose con Olega, quien enrojeció, saludándole:-" ¡Buenas tardes, capitán!" -"¡Buenas tardes, Olega! Por fin habrá comida natural en el plato."- Comentó. -"¿ Viene de Hidropónicos? He sabido que hay plantas de tomates en crecimiento."- Sonrió ella, más repuesta de la sorpresa. Marbundo la tomó de la mano, diciéndole:-" La amo a Ud., Olega. Lo que pasó entre nosotros fue muy hermoso...y me gustaría que me considerara para ser su pareja." -"¡Oh! ¡Y yo que pensé en que se avergonzaría de lo hecho conmigo!"- Musitó ella.-"¡ Sí, me gustaría ser su pareja pero...Ud. es el Capitán!" -"¿Acaso los Capitanes no somos hombres, como todos los demás? ¡Vaya, Olega, dígame que sí!"- Rogó Marbundo, quien estaba a cada momento más fuera de sí, al tener de la mano a la escultural mujer. -"Sí."- Rió ella, dulcemente. Se besaron en medio del corredor, provocando aplausos de quienes pasaban por allí... El Capitán puso al tanto al primer Oficial, encargándole se hiciese cargo de la misión por algunos días, mientras él pasaba su período matrimonial en paz. -"¡Le deseo suerte, capitán!"- Sonrió Ryeda/838, dándole la mano. Marbundo cogió a Olega y se encerró en su camarote por trece días, sirviéndose las comidas allí, gracias al dispensador de alimentos de que estaba provisto el alojamiento. Fue así que Olega quedó preñada por Marbundo, el capitán de la AS- 1, en el planeta que exploraban para la lejana Marte. Fruto de tanta pasión fue Aldo, quien nació el primero del mes de Chesvan, a la una de la madrugada, nueve meses después, entre cánticos de la computadora, programada para este fin. Hubieron muchos que se alegraron sobremanera de se nacimiento, porque el capitán y su mujer Olega eran gentiles en el mando y en el trato, permitiéndoles servir sin ser esclavizados por el trabajo. -"Es un hijo del amor."- Gritó el capitán Marbundo, y todos los tripulantes de la "AS- l" levantaron sus copas con vino , en un gran canto de alegría. Aún estaban sobre el planeta Séptimo, en el único continente. Habían armado un helicóptero, y en él viajaron Marbundo, Olega y el piloto Sulgobio. El radar del aparato indicó pronto montañas de 4.000 metros en promedio. En muchos lugares las montañas daban paso a las llanuras de pastos. Por sobre una de ellas se vieron dos motas metálicas. -"¡Allí están!"- Exclamó Olega. Fueron bajando paulatinamente. Por mientras tanto, los vehículos se detuvieron, al verles. El helicóptero detuvo el rotor, tras posarse sobre sus tres ruedas. Los tripulantes de los vehículos terrestres enviados semanas antes les miraban, sonrientes. Se saludaron efusivamente. Llevaban treinta y dos días en viaje por la superficie, habiendo recopilado observaciones sobre 823 formas de vida vegetal, y 29 clases de insectos. Habían matado varios animales menores, parecidos al conejo, que habían asado y consumido. -"Son comestibles, pero sentimos mareos al cabo de un rato."- Explicó Hugo Juvian/86, sonriente.-"Parece que la carne tiene elementos extraños." -"Al alimentarse respirando gases extraños su carne puede contener venenosos componentes."- Opinó Olega , abrazando a Marbundo. -"Es probable. Hay que hacer análisis, en la "AS-1."- Comentó Hugo Juvian/86. -"Se han hecho, someramente. Hay trazas del doble de silicato."- Repuso Sulgobio. Marbundo contempló asombrado el estrago que el terreno escabroso había hecho a las carrocerías y los forros de las ruedas del camión todo terreno de los exploradores. -"¿Les quedan suficientes vituallas?"- Inquirió Marbundo a Cambos, el segundo oficial a cargo de la expedición terrestre. -"Positivo. Pero nos escasea el agua, sobre todo para el vehículo. Si fuera posible que nos trajeran algunos bidones con agua, se los agradeceríamos."- Habló el oficial. Olega caminó por sobre el pasto, tarareando alegre, pero pronto dió un grito. Todos corrieron hacia ella, que estaba inmóvil, mirando una culebra amarilla, que agitaba su cola, a dos metros de ella. Hugo Juvian/86 disparó un par de veces en contra del ofidio, con su arma de servicio, volándole la cabeza, con lo que el animal comenzó a dar violentos coletazos. Se alejaron del lugar, mientras Hugo comentaba:-"¡ Son peligrosas! He tenido a dos hombres de la expedición al borde de la muerte, por culpa de esas culebras amarillas... Son venenosas, y atacan siempre." Olega dijo en el oído de Marbundo:-"¡ Oí hablar a esa culebra! Me decía que un peligro se nos avecindaba" -"No le hagas caso; son tus nervios."- Se preocupó Marbundo, pensando en que a su mujer le afectaba de mala manera el planeta en que habitaban. Antes del anochecer volvieron a la Base, que se componía del navío "AS- 1" y un domo plástico, levantado a cien metros del navío, en donde podían estar sin usar los engorrosos cascos, ya que se mantenía dentro una atmósfera tipo Tierra. Dejaron el helicóptero a un costado del domo, e ingresaron a éste a través de una esclusa. Olega aún temblaba de miedo, debido a lo que le escuchara decir a la serpiente... A medianoche, un terremoto despertó a todos. La superficie se agitaba, y se sentían ruidos subterráneos. A pocos kilómetros brotó un volcán, arrojando lava a cientos de metros de altura. -"¡Debemos salir de aquí!"- Se asustó Olega, y Marbundo embarcó a todos en la nave, bajo una nube de ceniza, que comenzaba a caer cual un pesado manto del cielo. El domo se dobló con el peso, colapsando a los pocos minutos.y perdièndose todo cuanto se había alojado allí: equipos electrónicos, tiendas de campaña con mantas y utensilios varios. La nave "AS- 1" se elevó torpemente, resistiendo a duras penas el embate de los cientos de kilos de materiales ígneos y cenizas del volcán naciente. Terminó por salir fuera del radio de acción del volcán, y pudieron observar, empavorecidos, la columna de diez kilómetros de alto que arrojaba aquel cráter. -"¡Qué susto he pasado! Parecía la erupción de Pompeya!"- Comentó Olega, quien tenía al pequeño Aldo en sus brazos, mamando. La nave viajó varios kilómetros, buscando un nuevo lugar de descenso. Lo hallaron cerca del mar, sobre una llanura de pastos y árboles. Las playas allí eran de arena y rocas, adentrándose en un mar de oleaje bravío, cuyas grandes olas reventaban con estruendo, levantando nubes de llovizna y espuma salina en aquella aurora de cataclismos. Algunos de los tripulantes de la nave bajaron, y caminaron hacia la playa, queriendo así limpiar sus mentes de los tenebrosos recuerdos recién pasados... -"¡Qué hermoso paisaje!"- Exclamó Olega, abrazando a Marbundo, de pie en la playa. El viento y el frío no eran sentidos por ellos, debido a que estaban usando traje y escafandras, para respirar oxigeno . Las voces se transmitían por ondas radiales de corto alcance, con lo cual las conversaciones eran compartidas por todos los que usaran trajes. -"¡Conchas!"- Exclamó Marbundo, indicado algunas marfileñas valvas de moluscos esparcidas en la arena. Las sacaron de allí, excavando con los dedos. Medían entre 50 y 65 cm. de largo, por 22 cm. de ancho, siendo de color rosado. Sus bordes estaban dentados, algunos con proyecciones de hasta diez centímetros de longitud. -"¡Son hermosas!"- Se sonrojaba Olega, emocionada por hallar tales bellezas naturales. -" Estos moluscos pregonan que hay vida en el mar."- Hizo notar Marbundo. -"¿Y no es de allí de adonde provienen los seres vivos?"- Preguntó Olega, teniendo en cada una de sus manos un ejemplar de aquellas caracolas que tanto le habían impresionado. -"Los evolucionistas, cuya bandera de lucha enarbola Darwin, dicen eso. Que Dios no hizo al hombre con sus propias manos, sino que los seres vivos nacieron solos, una tarde cualquiera, en una poza de agua caliente."- Recordó Marbundo. -"¿Y es verdad?" -"Ciertamente que los científicos así lo creen: no por nada se les enseña a los niños la Teoría de la Evolución de las Especies. Lástima que se olvidan de la clave genética, encerrada en la cadena del D.N.A., cuyo existir indica que las especies tienen un código genético que les hace nacer siempre iguales. De una perra nace un perro y no un camello ni una jirafa; tampoco un perro con siete patas o un perro cantor. Eso indica, creo yo, que Alguien muy sabio creó, en un Comienzo, a todas las especies existentes en forma inmodificables en sus sistemas importantes."- Declaró Marbundo. Tras pasear un rato más, entraron a la nave y a la hora del almuerzo, admiraron con el resto de la tripulación las caracolas traídas desde la cercana playa. -"Clase moluscos, conchas univalvas."- Comentaba el ecólogo de la expedición, Obomdo... -"¿Me dan una?"- Pidió Dulia, de la Sección Motores. -"¡Tu siempre pidiendo de todo!"- Se enfadó Maema, de Radares. -"¿Todo?"- Rió Dugaria, de Hidropónicos. -"Es malo quererlo todo: se sufre con la mitad."- Opinó Sulgobio. -"Iré a buscar mis propios ejemplares."- Opinó Dulia, molesta. -"Yo la acompañaré."- Dijo el bondadoso Doctor Kirk. -"¡Veo que nuestras conchas han tenido una buena acogida!"- Sonrió Marbundo. Al día siguiente, la mayoría de los tripulantes de la "AS- 1" recorría los diferentes y pintorescos lugares de la costa cercana; el mar, ya más calmado que el día anterior, otorgaba su rumor constante, mientras el astro iluminaba las gotas cristalinas que volaban con la esporádica brisa. Volaban ahora grandes pájaros semejantes al albatros, que orillaron la costa, perdièndose hacia el Oeste. Hallaron seis conchas de veinte centímetros, azules e irisadas. Olega se quedó sin respiración al verlas. -"¡Son maravillosas!"- Exclamó, apretándolas contra su pecho. Esa noche, a bordo de la nave, se compararon las conchas sobre la mesa del comedor general. Relucían bajo la luz de los fluorescentes. -"¡Es un verdadero tesoro!"- Comentaba Dulia, quien era propietaria de tres ejemplares de gran tamaño. -"Si hubieran humanos en esta comarca, de seguro podríamos comerciar con ellos, usando estas caracolas como mercancía."- Se imaginó Sulgobio. El doctor Kirk tomó una de las caracolas azules y pasando sus blancos dedos por sobre la muy pulida superficie , expresó:-" La Naturaleza nos ha dado uno de sus frutos geométricos más bellos. No hagamos de mercachifles con ellos, sino que seamos como poetas de las estrellas, atesorándolos sólo para nuestros ojos." Nadie osó contradecirle... Al amanecer del día siguiente, viajaron hasta llegar a la llanura en que estaba el resto de los expedicionarios, avanzando en su camión todo terreno. Al ver llegar la gran nave, y no el pequeño helicóptero, se alarmaron, y con justa razón, porque a poco de descender se enteraron del nacimiento del volcán y la lamentable pérdida de la cúpula y del helicóptero. -"¡Al menos salieron con vida! Imagínense qué habría sido de nosotros, si Uds. no logran partir de allí...Unos nómades por el resto de nuestras naturales vidas..."- Comentó Hugo Juvian/86. Más tarde se le acercó al Doctor Kirk el joven Sulgobio, diciéndole:-" Doctor, quiero consultarle profesionalmente." -"Dime, hombre, qué te pasa."- Se sentó en una roca el doctor, mirando hacia el distante horizonte. -"Resulta que, por las mañanas, me cuesta muchísimo levantarme." -"¡ A ver, a ver! ¿Qué edad tiene Ud. Joven?" -"Cuarenta y siete años de edad." -"Más de la mitad útil. Doce años pasados, le quedan veintitrés años útiles. No puede pedirle mucho a su cuerpo. Sus tejidos ya no son tan jóvenes. Lleva cuarenta y siete años renovándose a sí mismo, refregándose contra los mismos huesos." -"¿Yo, refregándome contra qué huesos?" -"¡Ud. no, hombre! Las células de su cuerpo...,bien. ¿Después de que se levanta, le cuesta moverse? ¿Siente pesadez , ganas de no hacer nada?" -"¡Al contrario, Doctor Kirk! Quiero hacerlo todo: resarcirme del tiempo de atraso." -"Y qué le impide levantarse, entonces?" -"Algo del cuerpo, como si pesara el doble, como si en él hubieran partes que no quisieran moverse." -"¿Parálisis?" -"¡No! Era una manera de explicarlo." -"¡Ah! Un despertar de marmota: su mente está despierta, pero su cuerpo no." -"¡Exacto! Pienso en esto y lo otro, pero no me decido a levantarme." -"¿Duerme Ud. con una mujer?" -"Con Dulia, de la Sección Motores...ya sabe, la alta..." -"Ah, sí la ubico! Pues es muy fácil la solución a su problema, joven: dígale a ella que le pegue una patada en el trasero, cuando no consiga levantarse." -"Gracias, doctor, por el consejo. ¡Me ha quitado un problema de mi vida!" -"De nada, joven. ¡Para eso estudié!" Se alejó riendo Sulgobio, ya que el doctor estaba de guasa ese día... Al día siguiente, y embarcado el vehículo terrestre en la bodega de la nave "AS. l", se dirigieron hacia la costa, ubicando un sector de suaves arenas y arboles frondosos casi llegando a la misma playa. Bajaron algunos a bañarse, mientras el Capitán se dedicaba, junto a la primer oficial, a revisar los sistemas de abordo. Cerca de tres horas después, Olega llegó a la nave a toda carrera. -¡"Cientos de seres salen del mar! ¡Vienen por miles!"- Avisó a Marbundo, arrojándose en sus brazos. Palideció Marbundo, aterrado. Corrió hacia la salida del vehículo, y vio la nave siendo rodeada por soldados y maquinarias diversas, mientras eran arrastrados los tripulantes de la nave que salieran a la playa, amarradas sus manos por aquellos invasores. Los seres eran gelatinosos, con ojos de pez. Gritaban ordenes algunos de ellos, mostrando entonces sus afilados dientes. Una lanza le atravesó el muslo, y cayó hacia atrás. Un grupo de extraterrestres se abalanzaba hacia la esclusa abierta, pero ésta fue cerrada por Olega, quien lloraba de terror. -"¡Llama al doctor Kirk! ¡Me duele condenada mente!"- Habló Marbundo, sintiendo un dolor imposible de soportar. Algunos golpes comenzaron a ser dados contra el mamparo, resonando huecamente en el interior de la nave "AS- 1"... Un zumbido suave, y Marbundo supo que alguien movilizaba a la "AS- 1", usando el campo deflector del Desfasador Dimensional... Poco después regresó Olega zr03- 3 con el doctor Kirk, pero Marbundo ya estaba desmayado de dolor. -"¡Le arrancaré esa lanza!"- Avisó el doctor, mientras le inyectaba un analgésico en el muslo derecho al herido. Olega se abrazaba a su pareja, sollozando. Llevaron a Marbundo a la Enfermería, en donde el doctor terminó por extraerle la lanza, inyectándole un anti virus universal, en precaución de posibles infecciones. -"Doctor, le aviso que hay reunión de emergencia en la Sala de Mandos."- Comunicó Obomdo al médico. -"Vamos allá."- Dijo éste, secándose las manos con un paño. En la Sala estaban Deyanira go- 0034, Olega zr03- 3, el bebé de Olega, Aldo, Sulgobio; con la llegada del doctor y de Obomdo hacían tres hombres, dos mujeres y un bebé... -"¡Estamos mal!"- Avisó de inmediato la bella Deyanira.-"¡ Han sido atrapados todos los demás integrantes de la expedición! Volamos en círculos sobre ellos desde hace quince minutos: hemos visto descuartizar a nuestros compañeros, devorados por aquellos salvajes..." Un silencio helado se hizo en todos los corazones. -"¡ Venganza!"- Pidió Sulgobio. -"¡Sea! Les freiremos con un misil nuclear; no quedará nadie allí."- Rió salvajemente Olega, pensando en su herido esposo. -"¡Está bien, habrá venganza! Pero que sea por votación unánime: no quiero tener que dar cuentas a un Consejo de Guerra, al regresar."- Pidió la piloto Deyanira. Tras la votación unánime, picó sobre los nativos, arrojando un proyectil termonuclear de 20 kilotones, que voló de la faz del planeta todo vestigio de los atacantes... Tres días más tarde se recuperó Marbundo de la fiebre que le había sobrevenido tras la extracción del arma , y se pudo enterar a cabalidad de lo efectuado por la Primera Oficial Deyanira. -"¡ Fue hecho en el arranque emotivo!"- Disculpó el doctor aquella actuación.-"¡ Vieron morir a los nuestros ante sus propios ojos!" -"Lo hecho, hecho está."- Terminó diciendo Marbundo.-" Pero ya estamos en precarias condiciones, en lo relativo a personal. Regresaremos a la nave con los logros que ya tenemos: un planeta ideal, aunque con escasez de oxígeno. ¡Capaz que sea solucionable, con los últimos adelantos ! Llame Ud. a la Primera Oficial, Doctor."- Pidió Marbundo. Entró, más tarde, la bella Deyanira a la sala de la Enfermería, en que se recuperaba el Capitán Marbundo. -"¡ Arriba ese ánimo. Oficial Deyanira! Ha hecho Ud. lo mismo que habría hecho yo, si hubiera estado en su lugar...¡Callaremos esta venganza! Pero regresaremos a dar cuenta de nuestra misión, ya que estamos cortos de personal."- Le dijo Marbundo a la joven. Ésta alegró su semblante de inmediato, y sonriendo, dijo:-"¡ Gracias, capitán! Pondré rumbo al Sistema Solar de inmediato...y le deseo se recupere pronto, para que trate de ser Ud. quien lidere la venida a Séptimo de Alfa de la Lira de aquellos colonos que deseen venir a trabajar." Olega y Aldo entraron a la sala, sonrientes, y abrazaron al Capitán, quien cerró los ojos, feliz de poder terminar su misión sin más problemas... &&&&&&&&&&& FIN. Alfredo Francisco Humberto Juillet Frascara. Pasado al limpio al martes 17 de Octubre de 1995. 40 páginas.15.300 palabras.

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