Más cuentos del mismo autor:

:: Tiempos malos
:: IRC

(Segunda parte)

ENSAYO NÚMERO 27,494 SOBRE DON JUAN
(Acompañado de una ojeada al paraíso terrenal)  
por CliCk^HeRe

2.- Don Juan desde nuestro punto de vista

Lo primero que necesitamos para ver a Don Juan desde nuestro punto de vista, es tener un punto de vista nuestro.

Y ahora, colocados en nuestro punto de vista, veamos qué es y que no es Don Juan.

Don Juan no es un hombre espiritual; ni un ensalzador de las buenas cualidades de la mujer; ni un aventurero; ni un idealista; ni un inadaptado; ni un alma sin par; ni un hedonista; ni un tipo feminoide o viriloide; ni un selecto; ni un fauno; ni un enamoradizo; ni un coleccionista; ni un sultán; ni un triunfador; ni un tirano sexual; ni un captador de voluntades; ni un hambriento de amor; ni un malvado; ni un artista; ni un caso clínico.

DEMOSTRACIÓN

Don Juan,,,

,,, no es un hombre espiritual, porque no utiliza para nada el espíritu;

,,, no es un ensalzador de las buenas cualidades de las mujeres porque las cualidades de las mujeres que él encuentra buenas – o explotables – son precisamente las cualidades malas;

,,, no es un aventurero, porque su anhelo estriba en provocar siempre el mismo desenlace;

,,, no es un idealista, porque carece en absoluto de ideales;

,,, no es un inadaptado, porque vive perfectamente a gusto en la esfera de su actividad;

,,, no es un alma sin par, puesto que vive rodeado de almas semejantes a la suya: sus mujeres;

,,, no es un hedonista porque soportar cada día a una mujer distinta es lo que menos se parece al placer;

,,, no es un tipo feminoide, porque sabe mover las manos y accionar sus discursos; ni lo es viriloide, porque disfruta de abundante cabellera;

,,, no es un selecto, porque su acción amorosa comprende a cuantas mujeres ve, con tal de que sean jóvenes y hermosas, y nadie ignora que hay mujeres hermosas y jóvenes  totalmente irresistibles;

,,, no es un fauno, porque tiene pies y piernas iguales a las de los demás hombres;

,,, no es un enamoradizo, porque no se enamora de las mujeres que persigue;

,,, no es un coleccionista, puesto que nunca conserva las mujeres conquistadas;

,,, no es un sultán, porque carece de harem;

,,, no es un triunfador, porque no sojuzga a la humanidad, sino a una sola parte de ella, la más impresionable e irreflexiva;

,,, no es un tirano sexual, porque después de llegar a la posesión se marcha;

,,, no es un captador de voluntades, porque los hombres le odian;

,,, no es un hambriento de amor, porque se halla continuamente sentado a la mesa de Eros;

,,, no es un malvado, porque para él, el mal es un medio y nunca un fin;

,,, no es un artista, porque subsiste apartado del arte;

,,, no es un caso clínico, porque está siempre en equilibrio con su propia naturaleza.

CONSECUENCIA

Luego, si Don Juan no es nada de eso, como hasta ahora ha venido diciéndose, que es verdaderamente Don Juan?

Desde nuestro punto de vista, se advierte clarísimo:

Don Juan es un idiota.

*          *          *

“Hace falta ser un idiota completo para vivir pendiente exclusivamente de las mujeres”. PAULINO UZCUDUN

3.- Diferencia principal entre el hombre normal y el idiota

El hombre normal tiene un fin: crear; crear, ya en colaboración con la mujer, ya sea por si solo.

Cuando lo hace en colaboración con una mujer, entonces lo creado son niñas y niños.

Cuando lo hace por si solo, entonces crea maquinarias útiles, formulas matemáticas y políticas, leyes científicas y sociales, obras de arte, sustancias y objetos e ideas necesarios para la vida, refinamientos, distracciones, etc. (por supuesto que podrían añadir a este último párrafo que también ha creado maquinarias de destrucción masiva, pero hey!, nadie es perfecto! =P

Hay hombres que teniendo – como todos – el fin de crear, no crean nada, es cierto.

Pero esos hombres deben de tener otro fin: la horca.

En cuanto a la mujer, también crea. Ya sea en colaboración con el hombre, lo cual ya hemos visto, o por si solas. Cuando lo creado son niñas y niños entonces se reserva la parte más delicada y minuciosa de tal función.

En cuanto lo creado no sean niños o niñas, crean también  maquinarias, leyes, ciencia, hasta complejo software, e incluso, si me permiten añadir, crean dolores de cabeza.

Así mismo, hay mujeres que no colaboran en el complejo proceso de la creación, ni de repuestos para la humanidad, ni de artículos o bienes y servicios. Es verdad.

Pero esas mujeres deben tener otro fin: tranquilizar al hombre.

(No hay que escandalizarse, ni hacer demasiados aspavientos. Es, dígase lo que se quiera, axiomático que cuando la mujer prescinde de servir a la especie – ya de modo involuntario, ya voluntariamente – queda convertida en un chisme bonito sin más utilidad que la de tranquilizar al hombre.)

Por lo demás, el hombre- agobiado por la ruda tarea de crear algo continuamente -, pierde la tranquilidad de infinidad de formas y por infinidad de causas.

Y existen tantos medios para tranquilizarle de nuevo y ponerle en condiciones de que pueda seguir creando,,,

Por ejemplo:

Cuando el hombre pierde la tranquilidad porque le asalta ,

el romanticismo,

La mujer puede volverle a la tranquilidad de nuevo por medio de:

Las noches de luna, una cena romántica, los suspiros, el olor de su perfume, los besos lánguidos, la contemplación de las estrellas y la entrega de su organismo.

Si el hombre pierde la tranquilidad de nuevo porque cae en las garras de ese monstruo que es,

El tedio,

La mujer dispone para equilibrarle nuevamente, de

Su grata compañía durante la tarde, en una excursión, una ida al cine desde las últimas butacas, las risas, los besos apasionados y la entrega de su organismo.

Cuando lo que ha intranquilizado al hombre es, precisamente,

El desvío o la traición de otra,

A la mujer le queda el recurso infalible de

Convertirse en otro “otra” para él, haciéndole entrega inmediata de su organismo.

Si él ha perdido la tranquilidad de su espíritu por

Falta de dinero,

Ella puede calmarle disponiendo, en cuanto lo sepa,

La apertura de una cuenta corriente en cualquier banco y la entrega del talonario de cheques (y de su organismo).

Si la intranquilidad del hombre obedece, por desgracia, a que

Ha perdido a un ser amado,

La mujer tiene para volverle la paz al alma

La oración, la lágrima sobre la tumba, el encargo de misas y la entrega de su organismo.

Y si el desequilibrio por el que atraviesa el hombre tiene, simplemente, como causa el recrudecimiento del

Deseo insatisfecho

La mujer dispone, para apaciguarle, de este recurso supremo, originalísimo e inédito:

La entrega de u organismo.

Un poco monótono, verdad? Si; quizá resulte monótono enumerar los recursos de que dispone la mujer para tranquilizar al hombre; pero también es monótono el recurso de echar agua para apagar el fuego y, sin embargo, viene aplicándose desde que a Job se le quemó la casa, incluido el termosifón.*

* Sodninchger: Jahresbericht über  christianous pacienciomen, de Job patriarchatumgensser. Vol. II, 4º Auf, Leipzig, 1903 -   (la verdad es que las líneas anteriores son pura piña, pero si de vez en cuando no incluyera citas a autores alemanes, nadie creería que esto es un ensayo, y me conviene que se crea.)

(los apóstoles del feminismo se revolverán airados, afirmando que la mujer tiene otros fines que multiplicarse y tranquilizar al hombre,,, de eso no hay duda. No lo niego absolutamente, sin embargo, también afirmo que fuera de sus funciones sociales y políticas, la mujer normal tiene como afán principal el dejar descendencia, y si estos señores piensan lo contrario, podrían buscarse algún substituto para la tranquilidad fisiológica, y probablemente les venga bien, porque así no dejarán descendencia, con lo cual se va erradicando la tendencia hereditaria al fanatismo.)

(el hombre se hace feminista cuando no sabe ya como agradar a las mujeres, y la mujer se hace feminista cuando no sabe ya como agradar a los hombres.)

(el feminismo es una crisis menopáusica, que se propaga como los bacilos de Nocard y de Malthus.)

Ha  quedado, pues, dicho lo que busca el hombre normal al aproximarse a la mujer: crear niños y niñas y tranquilizar su ánimo alterado.

El hombre normal busca eso, y cuando ha logrado ambas – o una de ellas – el hombre normal vuelve a sus ocupaciones.

*          *          *

veamos ahora como proceden los idiotas.

Buscan a la mujer con el fin de propagar la especie de los idiotas?

NO.

No señores, no.

Los verdaderos idiotas no buscan a la mujer para propagar la especie, por el contrario. Huyen de multiplicarse (en lo que obran mal, pues también los idiotas son necesarios, aunque solo sea para que resalte el talento de los inteligentes) y justifican su actitud con una larga serie de frases sobadas, tales como:

-        Los hijos le cortan a uno las alas.

-        La vida está carísima.

-        No he conocido ninguna mujer digna de ser madre de mis hijos.

-        Los hijos son nuestros jueces más severos.

-        Ningún hombre de talento tuvo hijos.

-        Para que propagar la especie si está llamada a extinción?

-        Desde que tiene hijos, fulano se ve obligado a trabajar triple turno en la constructora,,,

-        Si no enfermaran, se podría tener hijos.

-        Niños? Nada que ver!!!, con lo que revuelven,,,

-        Me parece una infamia crear un ser que nace ya condenado a muerte.

-        Carezco de vocación de padre.

-        Y si luego resulta que los hijos no son de uno?

-        Un hijo es una responsabilidad enorme.

-        No puedo tener hijos, en la adolescencia sufrí una enfermedad que,,,

-        Los niños me revientan.

Etc., etc.

No, los idiotas no buscan a la mujer para propagar la especie.

Pero – ¡caso curioso! – tampoco la buscan para tranquilizarse,,,

Y si un hombre normal, un hombre que sabe hasta que límites aceptables puede llegarse con una mujer, les dice, por ejemplo.

-        Cuando no se trata de tener hijos, para mi la mujer es como la aspirina. Y de la misma manera que al notar dolor de cabeza me compro una caja, busco una mujer cuando alguna otra me ha hecho una perrada, o cuando estoy aburrido o cuando me siento infectado de romanticismo o cuando me hallo de mal humor por no tener dinero o cuando necesito consolarme de una desgracia o – sencillamente – cuando mi naturaleza me lo exige.

Si un hombre normal les dice todo eso, los idiotas levantará los brazos al cielo y entonan a la mujer un panegírico de otras frases sobadas, que no vienen nunca al caso, porque aquel hombre normal no ha pretendido ni ofenderla ni detractarla en su párrafo.

Véanse algunas otras de esas frases sobadas con que los idiotas replican a las palabras del hombre normal:.

-        La mujer es la razón suprema de la vida.

-        Ofender a una mujer es ofender a la propia madre.

-        La mujer tiene alma, no es otro instrumento.

-        La igualdad de sexos está probada.

Etc., etc.

No, tampoco buscan para eso a la mujer los idiotas.

Pues, y entonces? Si buscarla para tranquilizarse les parece ofensivo y buscarla para tener hijos se les antoja disparatado, para que buscan a la mujer los idiotas?

Es terrible declararlo, pero la buscan para un fin aun mas miserable, mas mezquino:

1. Para ponerle un piso.

2. Para que les arregle y les ponga en orden la ropa.

3. Para presumir de hombres formales.

4. Para ir al fútbol.

5. Para contarle a sus amigos que tienen “un lío”.

6. Para que les quite el calzado y les pongan las zapatillas al llegar a casa.

7. Para decir que les inspira y les apoya en su profesión.

8. Para que les ayude a sostener sus gastos.

9. Para formar una de esas mescolanzas asquerosas que reciben el nombre de matrimonio sin hijos.

10. Para darle un apellido, siempre vulgar.

11. Para tener a alguien con quien hablar siempre en la mesa, y en la cama, y con quien leer los anuncios del intermedio en los cines.

12. Para comentar lo que hacen los vecinos del segundo piso.

13. Para poder decir que las mujeres son todas unas golfas, menos la suya, que es una santa.

14. Para tener a alguien con quien desfogar el mal humor.

15. Para presumir de seductores.

Y con esto queda establecida la principal diferencia existente entre el hombre normal y el idiota.

4.- Por que es un idiota Don Juan?

Ante todo, Don Juan es un idiota, porque no busca a la mujer ni para reproducirse, ni para tranquilizarse.

Y es un idiota también, porque va hacia ella con los ojos puestos en la razón No. 15, por gusto de que le digan que es un seductor. Esto puede demostrarse fácilmente,,, pongan a Don Juan en una isla desierta – en una absoluta soledad – y jamás le verán entregarse al donjuanismo. Por que? Porque nadie puede comentar sus dotes de seducción. Y tal vez, además, porque hallándose en una soledad absoluta, carecería de mujeres a las que seducir. Pero principalmente por lo primero.

Pero que dirían del hombre que, desde el instante de despertar hasta el momento de dormirse, durante todo el día, a todas horas, sin más descanso que el imprescindible para comer y almorzar, se dedicase a apagar y encender un mechero automático suizo?

Dirían que es un idiota, no lo nieguen!

Pues lo que haría ese hombre hipotético con el mechero suizo hace Don Juan con la mujer. Y a causa de ello es esa una de las verdades en que me apoyo para decir que es un idiota Don Juan.

*          *          *

¡Oh!, y quedan más razones todavía!

Don Juan es también un idiota, porque no está al lado de cada mujer más que un día: el de la seducción.

Como si las mujeres no tuvieran todas y cada una su tiempo,,,

Las hay quienes en una semana nos han dado cuanto son capaces de dar en sensaciones, anécdotas, alegría, sugerencias,,,

Otras merecen que se las ame más largamente. Las extraordinarias en belleza, elegancia y espiritualidad, pueden resistirse hasta un año.

(y más de un año – dolorosa confesión! – no pueden aguantarse a ninguna, ciertamente.)

Pero en el plazo en que se limita a amarlas Don Juan, en veinticuatro horas, no ha sobrado tiempo para enterarse de todo, no hay tiempo material para enterarse de nada.

Y así mismo es un idiota Don Juan, porque les dice a todas idénticas palabras.

Y porque muchas veces conquista a fuerza de dinero.

Y porque está persuadido de que es un Don Juan.

Y porque los éxitos que mas le envanecen son los logrados sobre la inocencia. Siendo así que lo que debe enorgullecerle al hombre de talento es dominar a esas mujeres experimentadas, que llegan de vuelta ya de todo y hartas de ejecutar virajes certeros para no meterse en los baches de la seducción masculina.

Y es un idiota Don Juan, porque lleva bigote de largas guías.

Y porque en ocasiones, se vale de las criadas para conquistar.

Y porque hace de su corazón un fichero.

Y porque no sabe abandonar a tiempo la profesión.

Y porque viaja continuamente sin enterarse de lo que ve, como los baúles y los cómicos.

Y porque se deja llevar del tópico del Baedecker. Por lo cual confía en que lo mejor de Italia es Venecia; y lo mejor de España, Sevilla; y lo mejor de los Estados Unidos, las Cataratas del Niágara; y lo mejor de Inglaterra, París; Etcétera, etcétera.

(El que quiera, puede rectificar diciendo que París no está en Inglaterra)

Y es un idiota Don Juan porque no le falla ninguna conquista, pues el hombre inteligente de veras acaba por toparse con una mujer lo suficientemente normal para no hallar seducciones en él.

Y Don Juan es un idiota también porque si pudiera, usaría uniforme.

Y porque no lleva nunca en sus viajes una cámara “Kodak” (recordar es volver a vivir.)

Y porque aborrece operar en el camino.

Y porque tiene en su casa un saloncito Árabe o Turco.

Y porque le dan igual las morenas que las rubias.

Finalmente, Don Juan es un idiota, porque los hombres le creen listo, las mujeres le creen guapo, los homosexuales le creen hábil, y él se cree hábil, guapo y listo.

Veamos ahora la razón del éxito de Don Juan.

5.- Razón del éxito de Don Juan

Infinidad de autores han dejado escritas sendas razones que justifican el éxito de Don Juan con las mujeres. *

*(Krafft Ebing  Bemerkiungen veßer geschlechtliche Hoerigkeit und Masochismus. 1892. Crawley. The mysticrose. 1902. Sterinach. Verjüngung. 1220. Kraepeling afirma que Don Juan vivió en una casa de huéspedes, y Kronfel, que era bizco. Weil, por el contrario, se queja de lo mal pavimentado que está Nuremberg. (mas datos para elevar el tono del ensayo.)

Pero se hace preciso declarar que ninguno, hasta ahora, ha dado con la verdadera razón.

Y es hora de divulgar esa razón verdadera.

El éxito de Don Juan obedece a la idéntica causa del éxito de la coca cola, la máquina de cortar pestañas “cloral”, las toallas femeninas care free, el fascismo, las papas sabritas, los televisores SONY, y las paginas porno: esa causa es:

Sencillamente:

El anuncio, el bluff, el engaño.

Sin anunciarse, sin que su fama corra de boca en boca, sin que todo el mundo no se haga lenguas de lo seductor que es, Don Juan no conquistaría más que alguna que otra de esas muchachas de la clase media que gimen sofocadas por el hervor de casarse.

Pero Don Juan se anuncia: camina precedido de una nombradía extraordinaria, y las mujeres se lo rifan. Y Don Juan se deja rifar por las mujeres. Y todas se lo ganan; cosa que no ocurre con ningún otro tipo de rifa en el mundo.

6.- Progresión geométrica de la seducción

Han tenido tiempo de sobra en sus vidas?

Si ese es el caso, seguramente lo han perdido estudiando lo que es la progresión geométrica.

Pero para aquellos de ustedes que solo han estudiado cosas útiles, lo advertiré aquí:

Es el resultado de la suma de las instancias dentro de un conteo numérico.

Ejemplo de progresión geométrica:

1 – 2 – 4 – 8 – 16 – 32 – 64 – 128 – etc.

y ahora me apresuraré a demostrarles que la seducción de la mujer también es una progresión geométrica.

Prueben, si no, a enamorar a una mujer, y así que la tengan enamorada, hagan que lo sepan dos de sus amigas. Inmediatamente las amigas se enamorarán de ustedes, y si las amigas de estas amigas se enteran de que sus amigas están enamoradas de ustedes, no tardarán veinticuatro horas en enamorarse también de ustedes, y las amigas de las amigas,,, y así sucesivamente.

De suerte que incluso podemos escribir la progresión geométrica de la seducción femenina. Hela aquí:

Una querida, tres queridas, siete queridas, quince queridas, etc.

Lo han visto bien? Pues en la verdad de esta fórmula reside de igual modo, la razón del éxito de Don Juan.

7.- La testarudez de Don Juan

Pero aun queda, para final, la razón suprema del éxito de Don Juan con las mujeres.

La testarudez.

No todos los idiotas son testarudos, pero siendo idiota, puede llegar a ser un testarudo estupendo.

(tal el caso de Don Juan, a quien ya hemos presentado como el idiota-tipo, el más rico tipo de idiota que puede imaginarse.)

Porque,,, que es la testarudez, mas que la escasez de ideas?

Un hombre rico en ideas, habituado al tráfago de estas, a la bajamar y pleamar de las ideas, raramente será testarudo, sino que siempre estará dispuesto a admitir las ideas que se le brinden, y por lo tanto, a dejarse convencer.

Por el contrario, cuantas menos ideas albergue un hombre en el interior de su cráneo, más sostendrá y defenderá las pocas que posea.

La testarudez es el puente gracias al cual los idiotas pasan a la historia transformados en héroes, en símbolos o en genios.

Cristóbal Colón, mascullando continuamente dentro de sí una sola idea (la de llegar a las Indias por el Oeste) resulta un idiota, pero colgadle de los hombros la dalmática de la testarudez y le verán empujar a través del atlántico las tres carabelas y descubrir, al cabo, América, convirtiéndose en uno de los grandes héroes de la historia.

Dante Alighieri, agotando su existencia en escribir tercetos tras tercetos, es indudablemente un idiota. Pero si, gracias a su testarudez lo miran  ya autor de la Divina Comedia, lo encontrarán convertido en un genio universal.

Y así, mil casos diversos.

Don Juan, el idiota típico, alimenta una sola y única idea: lograr mujeres.

Y como es testarudo, como es formidablemente testarudo,, lo logra; y a fuerza de lograrlas a todas, absolutamente a todas, Don Juan pasa a la historia con el carácter simbólico del seductor.

Por otra parte, quien sea testarudo no conseguirá cuanto se proponga? No hay un dicho que precisamente dice: el que persevera alcanza?

Ante el ariete de la testarudez los obstáculos se quebrantan y ceden. En el agua caliente de la testarudez lo más sólido se disuelve y deshace.

Un general testarudo nunca se rendirá en sus posiciones ni dejará de tomar las posiciones del enemigo.

Un bebedor testarudo acabará por echarse el barril de cerveza que tiene delante.

Un opositor de hacienda testarudo acabará siempre en la cárcel.

Un domador de erizos testarudo logrará que canten el “Ave María” sus erizos.

Un artista testarudo, que se obstine en hacer arte poco popular conseguirá al cabo morirse de hambre.

Un orador testarudo que se obstine en explicar a su auditorio los misterios de la ley hipotecaria, concluirá por quedarse solo en el salón.

Cuanto un hombre se proponga, lo conseguirá siempre gracias a la testarudez.

Y que? Por ventura conquistar mujeres es más difícil que tomar una posición del enemigo, beberse un barril de cerveza, ir a la cárcel, amaestrar erizos, morirse de hambre o quedarse solo en un salón disertando sobre la ley hipotecaria?

No. Conquistar mujeres es tan fácil de hacer como cualquiera de esas cosas.

Y desde luego, mucho más rápido.

*          *          *

Nos consta ya por qué el tema de Don Juan interesa universalmente.

Y hemos observado a Don Juan desde nuestro punto de vista.

Y conocemos la principal diferencia entre el hombre normal y el hombre idiota.

Y sabemos que Don Juan es un idiota.

Y por qué lo es.

Y no ignoramos que la seducción femenina es una progresión geométrica.

Y conocemos las razones del éxito de Don Juan.

Que punto nos falta para concluir nuestro ensayo?

Solo uno: el más discutido; el que más ha apasionado en los últimos tiempos: la biología de Don Juan.

8.- Antigua, moderna y evidente biología de Don Juan.

Vaya que se ha escrito sobre esto, Dios mío, se han lanzado teorías, ensayos, especulaciones y demás textos intentando sostener, o explicar la biología de Don Juan, teorías nuevas, opiniones modernas,,,

Pero a menudo sucede que lo más moderno resulta ser ya antiguo, y lo más nuevo resulta viejo.

Un pintor de la época del Cro-Magnon, decorador de cuevas y cavernas sería hoy la primera medalla en cualquier salón de arte contemporáneo.

Ícaro, ingresando hoy en la aviación, ascendería inmediatamente a jefe de escuadrilla por méritos propios.

Phta-Ra, embalsamador del antiguo Egipto sería hoy la sensación dentro del círculo de científicos que estudian la forma de preservación criogénica del cuerpo humano.

Así, lo más antiguo del universo resultaría nuevo; lo más ajado flamante; lo más viejo y caduco, joven.

De acuerdo con esta ley, hasta el primer pecado del hombre, aquel pecado marchito, repetido millones de veces, desprovisto de toda originalidad, es conocido aún con el nombre de “pecado original”.

Por eso, se hace necesario recurrir a la antigüedad para hallar teorías nuevas.

Y por eso, cuando nosotros nos vemos obligados a idear una nueva biología de Don Juan, recurrimos a la que, hace veintisiete siglos idearon los griegos: con la seguridad absoluta de que esta biología va a parecernos el colmo de la novedad y de la audacia.

Porque, en efecto, hace hoy justamente 2,246 años, que en su plácido retiro de Egea, el Gran Jenócrates a propósito del donjuanismo escribió esto:

Afcuito smide dasdi dwm paelitapera Tfoperep tragalopolws oinidapoc tansi cuperorop preopalis C Excith millerp tomonpor opis scuata aerpolap paero

papanicolaw x pita spunaà etxso  Pnaudv Xcepou axoycf y puo icofle blnive eiparapetarip copr afendulis.

No es esto magnífico? No asombra lo nuevo que resulta un texto tan antiguo?

Que palabras! Que palabras tan llenas de sabiduría y humanidad! Que sabias, que terminantes!,,, después de copiarlas, no creemos que sea necesario añadir otras más al asunto.

En estos párrafos anteriores citados, Jenócrates nos diseca a Don Juan para siempre.

Y deja la mariposa experimental del donjuanismo clavada en el corcho disectivo de la eternidad.

Bello remate, oh sí!,,,