Existen dos planos en busca de una verdad, tal vez encontrándose en conflicto entre sí, por el tiempo en que se formulan y el espacio en que se realizan.

    Las teorías matemáticas, en nuevas versiones en que otras teorías se pueden conjugar, tratan de buscar respuestas más positivas; tal vez algo que pueda definir no lo que se genera del cosmos en dirección a nuestro mundo y a nuestro estado de conciencia, y sí lo que se puede producir de lo que se ha conseguido, a través del tiempo y del espacio, analizar, que también tenga una ecuación de realidad expresada en el universo.

    Lo hipotético continúa mientras el hombre no viaje por el espacio, pero no puede viajar por el espacio si no concretiza las teorías, y tras algunas respuestas satelitales que son el inicio del ABC de la teoría espacial, comienza a conjugar propuestas que le indican un camino que el universo le permite abrir para desplazarse, no sólo en total teoría y sí en confrontación con realidades físicas que él puede ejecutar.

    Observamos la lectura en que dice:
 

    Albert Einstein da una serie de respuestas en ese sentido. Pero a su vez muchos de los físicos, considerándolo un padre inviolable o incapaz de cometer errores, continúan pesquisando para llegar a ecuaciones matemáticas comprobables, pudiendo estas no ser reales.
    La dificultad no está en comprobar si son o no son; la dificultad está en comprobar cuál será el confronto de una realidad aparente, y cómo será el efecto que hará dirimir una teoría que parece inquebrantable.
    Otras teorías que se basaron en conceptos geométricos, físicos, matemáticos, que aparentaron mover el mundo en una dirección invariable (ley de gravedad de Newton y otras), llégase a la conclusión que no son tan afirmativas o definitivas.
    Hay un estado de conciencia que mueve al Universo. El problema que enfrentamos ante la propuesta de un análisis universal, cuando es medido el universo hasta el estado de conciencia primigenio, sería descubrir que el espacio es finito ante un tiempo infinito.
    Si el tiempo infinito es el de acción, debe haber un momento en que el espacio no tiene condiciones de accionar porque el tiempo infinito generará una acción continua de la conciencia infinita; y la conciencia infinita puede llegar a superar la acción del espacio.
    Es imposible que el espacio tenga la probabilidad de plasmación o de aceptación de cualquier agente físico.
    Si tú piensas y analizas, verás que el espacio no puede ser ocupado, dentro de las tres dimensiones, por dos elementos simultáneamente, a no ser que colapsen. Pero para colapsar en el campo físico tienen que haber existido anteriormente dinámicas opuestas que puedan generar, sobre un centro de concentración, la aproximación de algunos cuerpos con ciertas velocidades en un tiempo establecido.
    La acción de ese tiempo origina conciencias de acción de tiempo paralelas y tal vez independientes unas de otras. Pero cuando existe un punto de confrontación en el espacio, significa que el espacio no permite la acción de dos estados de conciencia o el surgimiento de un mismo tiempo, porque si el mismo tiempo origina acciones físicas que determinan desplazamiento en el espacio, y encuentran una convergente en que harán explosión o desintegración de las acciones generadas anteriormente, un núcleo, un planeta, una luna, un asteroide, una masa que encierra hielos y gases o ignición permanente, un concepto cualquiera que esté universalmente englobado como conformación existencial, esas dinámicas tienen una acción de pensamiento inmensurables, continuas, desplázandose por el espacio.
    Si ese espacio no fuera cubierto por ningún otro componente, estaría libre para recibir y aceptar como primigenia, única y más importante creación a aquel producto de tres dimensiones que se desplaza por él. Pero cuando tres o cuatro productos de tres dimensiones convergen sobre un mismo punto, son fuerzas disidentes aunque sean creadoras; son pensamientos antagónicos.
     Entonces el pensamiento sí puede ser finito como puede ser el espacio, y el espacio puede ser finito como puede ser infinito el pensamiento.
    Ahora, si el infinito pensamiento supera el espacio, es señal que el espacio es fruto de otro estado de conciencia y que al ser superado puede permitir la salida de él en busca de un espacio nuevo.
    Si consideramos que hay varios espacios con centros gravitacionales o centros de existencia predeterminados, tenemos que considerar que hubo alguna conciencia que los conformó.
    No se puede decir "en el espacio", porque sí. El espacio tiene que haber sido creado.
    Si el espacio fue creado ¿qué fuerza lo creó, que a su vez tiene las limitaciones de permitir, en este caso y en este tipo de expresiones, las proyecciones tridimensionales?, donde las proyecciones que no sean tridimensionales accionan en dinámica que el espacio no detecta, no perjudica, pero tampoco beneficia.
    La dimensión del espacio predetermina las condiciones. Por lo tanto el tiempo se mueve en una fracción en que la conciencia tiene que quedar determinada.
    Cuando la conciencia queda determinada, puede accionar en ese espacio. Pero ¿qué estipula que la conciencia sea delimitada y no infinita?
    Si la conciencia no puede ser infinita, no es una teoría válida para la realidad o la verdad; es una teoría que permite ubicar el accionar de un espacio donde se mueve un determinado tiempo, pero ninguno de los dos está en el estado de tiempo-conciencia o espacio-conciencia.
    Un espacio-tiempo donde no accione la conciencia libremente no es un espacio real, y no es un tiempo universal.
Puede ser a veces un microtiempo, un microcosmos dentro del macrocosmos, pero no hay forma de definirlo.
    Ese macrocosmos que se divisa, se calcula, se acciona, es ilimitado, es una puerta a otras dimensiones donde realmente existe el macrocosmos. Esa puerta está vedada por la falta de conciencia, de creatividad, o de evolución.
    ¿Qué define la evolución?
    La conciencia.
    ¿Qué permite que ella se proyecte infinitamente, sin autodestruirse?
    Si todo lo que estamos viendo es ante la puerta, nada será válido después de la puerta.
    ¿Cuál es la finalidad de derrumbar la puerta o alguien haberla colocado para que no puedas penetrar con tus estados de conciencia a las verdades cosmológicas reales?
    Es como una trampa.
    Es una trampa dada a todas las especies.
    De haber existido o existir, lo hace en una dinámica junto con una conciencia superior que lo observa, que en este caso sería la humana.
    El humano se definió.
    ¿Cómo se acaba con el tiempo de esa conciencia primaria?
    La conciencia primaria sabe que la conciencia observadora, (conciencia que es superior, por eso está en la posición de observadora), puede eliminar su acción cuando bien le plazca.
    La conciencia primaria tal vez tendrá que usar un subterfugio para escapar de la acción de la conciencia pensadora, y a veces de forma tal que le sea posible crear su propio espacio-tiempo.
    La conciencia pensadora, como no pudo ser de una dinámica cósmica y sí primaria debido a las tres dimensiones, se vio obligada, para existir, a multiplicarse.
    Entonces, cuando el primario piensa que está a salvo o distante de la conciencia pensadora, hay otra proyección de la misma a su espera, para aniquilarlo.
    Es como una demostración práctica y documental, de que la conciencia no tiene barreras dentro de las tres dimensiones. Lo que puede tener es dificultad para proyectarse y para hacer que su campo de acción sea continuo y no interrumpido.
    Por eso, al conformarse la conciencia pensadora en una sociedad, ella es victoriosa en proporción a la forma en que se pueda comunicar o transferir a sus semejantes rápidamente las ecuaciones de conciencia alcanzada.
    Cuanto más rápida es asimilada por las otras partículas de la conciencia, mayor es la acción del pensador.

    El observador no es más que un individuo que no puede comprobar sus teorías.

    ... no hay uno que piense igual a otro.
    La ciencia actual está en debatirse total, un desequilibrio que no tiene lógica. Aunque realmente tiene lógica.
    No tenía lógica cuando todos pensaban estar de acuerdo, porque a veces estaban todos de acuerdo y era lo más ilógico. Era señal que la ignorancia vagaba y campeaba en todos los horizontes.
    Una vez que comenzaron las discordias empezaron a crecer.
    Ahora están propiamente en la explosión universal: cada uno se atreve a exponer su teoría porque no quiere quedarse atrás. Cuando encuentra a alguien que está equivocado se vuelve loco de rabia, no puede soportar en sus orgullos desmedidos que le estén rebatiendo sus teorías.
    En el fondo todas las teorías son teorías; el asunto está en poder esquematizar las verdades, y yo creo que no hay posibilidades de esquematizar las verdades porque no son definitivas.
    Es como si el espacio crease condiciones múltiples de reflexión de un concepto.
    Cuando el concepto alcanza el espacio, sea en la forma que fuere, el espacio se modifica como una conciencia a la que le disgusta ser indagada o descubierta. Crea propuestas diferentes, ninguna similar a la anterior ni aproximadamente, y exige nuevos estados de conciencia.
    Los nuevos estados de conciencia lanzan al espacio las variantes múltiples, y esas variantes múltiples prolongan el mismo juguete creando ondas en el espacio, como diciendo:
    - "Sí, puede ser. Pero no es"
    Pero no es, porque creo que hasta el espacio se va conociendo a sí mismo.
    Es muy simple: Si dijéramos que el espacio se conforma por la acción de una conciencia y esa conciencia tiene delimitación en su creación, la conciencia que se exprese en el espacio será con las limitaciones que se manifestó, pero nada tiene que ver el espacio en eso, el espacio sencillamente bosquejó los estados de conciencia.
    Si para la conciencia las respuestas que llegan no son satisfactorias, va a generar nuevos estados de conciencia. Por lo tanto el espacio va a generar otra expresión de los nuevos estados de conciencia. Así mismo no son finales ni satisfactorios.
    El espacio es como un papel que permite copiar y expresar la propuesta que quiera la conciencia.
    Es bien posible que hasta el propio espacio tenga condiciones de expresar dimensiones no convencionales. Y al expresar dimensiones no convencionales, no vuelven como respuestas convencionales, por lo tanto no son captadas; y al no ser captadas, las conciencias, no pueden tomar resoluciones ni aceptación como respuesta.
     Por ejemplo; fíjense qué cosa elemental:
    La humedad sube, emana de los ríos y mares, llega a ciertas camadas de altitud, se condensa, cae en forma de lluvia, y muchas veces, antes de llegar a la superficie, sube nuevamente gasificada y se condensa. Y otras veces llega a grandes camadas, pierde temperatura, se cristaliza, pudiendo caer como granizo o nieve, pero el viento que se genera, las fluctuaciones calientes y frías las van desplazando, haciendo que caigan distantes o cercanas.
    La pregunta vendría:
    ¿Qué determina que caigan cerca o distante, en ciertas tierras o no? Al punto que por llover muchas veces, o expresarse muchas veces esa temperatura o esos gases en algunos lugares, conforman ríos, cascadas, cataratas, embalses, turbinas, energía.
    ¿Y si cambia? ¿Por qué cambiaría?
    Pero ¿y si cambia y dejase de llover en ciertas áreas?
    Se volverían secas; las represas y los ríos se volverían inútiles.
    Esa humedad tal vez dejaría de ascender o sería llevada por los vientos para otro lugar, cambiando los estados de conciencia y las consecuencias de una colectividad que está manifestándose, viéndose obligada a cambiar estados de sobrevivencia, tal vez mudarse o buscar otros ciclos donde expresar lo que determinó "vida", "individuo".
    Y ¿quién forzó esa modificación de los gases, de la caída o no de lluvias, de ríos existentes o secos?
    Las variantes de la rotación de un núcleo.
    Pero ¿quién genera esas variantes?
    ¿Será que hay una conciencia que define anticipadamente el accionar?
    Por lo tanto, ¿cuáles son las limitaciones de las otras conciencias que surgen? ¿Cuáles son las responsabilidades de esas conciencias?
    ¿Qué es lo que especifica "ahora", "nunca más", o tal vez "mucho más al frente"?
    Uno ve árboles petrificados: 500.000 años, 450.000, un millón, dos, tres.
    ¿Cuánto tiempo tienen?
    ¿Qué bosques eran esos? ¿Qué animales, qué pájaros, qué seres existieron en aquellos lugares que eran selváticos o boscosos?
    ¿En qué posición estaba el núcleo para que el sol incidiese en donde ahora es un desierto o está lleno de nieve, o hielos aparentemente eternos?
    ¿Qué se borró?
    ¿Qué se quería ocultar?
    ¿Cómo pudo quedar todo en el silencio de un pasado que se ignora?
    ¿Cómo se perdió todo eso? ¿Con qué derecho?
    ¿Qué conciencia absorbe el Todo y la Nada, y hace que los humanos piensen que son regentes de destinos?
    Él no es más que un lacayo de una conciencia que dirige sus acciones. Pero se está cansando de los juegos propuestos porque está recibiendo respuestas repetitivas, o porque él está por viajar, irse; por lo tanto se va a llevar las máquinas.
    Al llevarse las máquinas desaparecerán ciertos vientos, ciertas cadenas, ciertas corrientes, ciertas formas de girar.
    Parte se va, desaparece, llevándose respuestas que nunca se conocerán.
    Un nuevo diluvio desintegrador, un "acabóse" se repite.
    Otra vez el silencio de la conciencia constructiva, donde deberán pasar milenios, a veces decenas de milenios, para que todo el acaso, como un laboratorio portátil, en una extensa experiencia para este tiempo y espacio fraccionado para que otro estado de conciencia emerja, comience a ver las consecuencias de ciertas ecuaciones que ellos van a generar.
    ¡Cuántos absurdos crea la conciencia delimitada!
    El maravilloso absurdo fue considerarse una excepción de las creaciones, un preferido, un dilecto, un inolvidable ser.
    Y ¡qué difícil es comprender por veces, que es tan insignificante como si estuviera transcripto en una hoja etérea, borrada por el propio impulso de la conciencia abstracta y tirada al abismo de la nada!
 
    Vaga conciencia solitaria
en tiempos y espacios perdidos.
    Piensa que guardas en tu interior
el secreto del batir del yunque
de los grandes Creadores.
 
    Y niégate profundamente
a ser un desconsiderado.

    Tal vez en tu persistencia,
en tu desespero por expresarte,
puedas en algún día
que todavía no ha surgido,
mostrar que guardas
en tus memorias pretéritas
el recuerdo anexable e inexorable
de la aventura del existir
de la falta de una conciencia determinante
y el absurdo que sufren los átomos
cuando piensan que están en equilibrio
y un nuevo ordenador universal los acciona.

    Piensa,
estando en el fin de la conciencia,
que tú eres el centro del calentar del amor
y los cariños del Creador.

    Continúa imaginando que él
solidario y con dulzura te contempla,
esperando que algún día
quieras Ser
puedas levantar la cabeza
y lo dimensiones.

    Continúa.
No renuncies.
No dejes el tiempo pasar.

    Cada vez que te motive
trata de ser el mejor exponente
como diciéndole a aquel que ignoras
qué fue lo que hizo.

    No debe dejarte
porque tú en realidad
eres la partícula energética que él buscaba,
para poder expresar todos sus absurdos
y necesidades del saber.

    Y cuando te deje
como una marioneta abandonada,
y por más que te esfuerces
en colocar tus estructuras
en una posición de lógica consecuencia
y no haya dinámica de donde asirse,
entonces verás
que no eres más que un simple muñeco
compuesto de variantes obtusas.

    Y adormeces tirado
en las profundidades de algún sueño
del tiempo y del espacio que no existe
a espera de la locura del reaccionar
de algún viajero distante
en las curiosidades de su ignorancia.

    Frente a ti sonarán las mágicas
y harás nuevamente danzar las luces,
los sonidos, los acordes y las discrepancias,
y volverás a idealizar, a jugar,
que existes.

    Como un rayo cruzó el espacio.
Así, llegó hasta la materia.
Cuando estuvo con sus neuronas participando del nuevo impulso de expresión de conciencia, perdió el sentido de lo que Era y por qué venía.