OCT-99 Nº 207 |
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Es natural esta reacción, pues por un lado significa un cambio profundo en muchas de nuestras bases ideológicas ancladas en nuestro interior durante muchos años, e incluso existencias; y por otro, esforzarse y trabajar internamente en un mejoramiento moral y espiritual. La comodidad y nuestros propios egoísmos se anteponen a la necesidad que todos tenemos de motivar nuestras vidas. Es un hecho más que evidente que somos presa de nuestros propios defectos que son más fuertes que nosotros y nos impiden ver más allá de los aspectos de la materia.
Sin embargo, si seguimos analizando el gran ejemplo que estos hermanos nos están dando, todavía podremos entresacar valiosísimos argumentos que nos deben hacer pensar más, si cabe, acerca de la importancia que tiene seguir su camino.
En la actualidad los adelantos científicos alcanzados por el hombre son muy importantes. Hace apenas cincuenta años eran ni siquiera imaginables los logros que tenemos en estos momentos. Grandes enfermedades que causaban la muerte a miles de personas hoy en día apenas tienen repercusión en la sociedad occidental. El nivel de vida alcanzado permite al hombre dedicarse a aspectos culturales, morales, religiosos, ocio, etc., que antes la vida esclavizada de trabajo continuado para ganarse la vida no dejaba tiempo. El concepto de aldea global en la cual cualquier persona pueda estar interconectada con cualquier parte del planeta está tomando cada vez más forma. Las investigaciones en todos los campos de la ciencia han dejado de ser hechos aislados de grupos de personas para pasar a ser trabajos en conjunto en los que intervienen infinidad de científicos de todo el mundo a la vez, con una mejora sustancial de los logros obtenidos, tanto en calidad como en cantidad. Podríamos estar así detallando todos y cada uno de los avances que han llevado a esta sociedad a alcanzar los niveles que ahora tiene y las perspectivas de futuro que se le avecinan.
Pero a pesar de ello, hay aspectos en esta humanidad que llevan millones de años sin cambiar y que, desde mi punto de vista, son los más importantes a la hora de valorarla. Por un lado, los avances anteriormente descritos apenas afectan al mundo occidental y desarrollado, grandes masas humanas siguen, a pesar de todo, careciendo del más mínimo de los sustentos vitales para vivir. El hambre azota a gran parte del planeta y la miseria afecta a mucha más gente que la acomodada. El reparto de la riqueza es desigual y cada vez se acrecienta más. Y esto sin detallar los innumerables puntos calientes del globo en los que diariamente son sacrificados miles de seres en honor de los más diversos intereses particulares de unos pocos. ¿Qué es lo que hemos ganado? ¿Hasta dónde hemos llegado?
Los hermanos extraterrestres, con su ejemplo callado y espiritual, con su presencia pacífica a lo largo de la historia y con el trabajo que desarrollan a nivel espiritual y material, nos están indicando el camino que hemos de seguir, pero a la vez que existe un fin para todo esto que nos está ocurriendo: que hay ESPERANZA.
Sí, existe una esperanza para el cambio de todo lo que está ocurriendo hoy en día en nuestra humanidad, que los acontecimientos a los que ya, porque los hemos vivido desde que nacimos, estamos acostumbrados y apenas nos escandalizamos cuando los vemos por los diversos medios de comunicación, tienen fin y se puede lograr una humanidad distinta completamente a la que estamos habitando.
Estos hermanos extraterrestres nos lo están indicando por todos los medios que la Justicia Divina les permite. Mediante su presencia demostrando el avanzado nivel tecnológico que poseen y que en ningún momento utilizan en contra de nosotros. Con los mensajes y enseñanzas que a muchos grupos espirituales están dando a través de las mediumnidades. Con los trabajos de desarrollo de facultades y de orientación de las mismas. En definitiva, nos indican que con el Amor, el trabajo en beneficio del prójimo, y la superación de nuestras propias imperfecciones internas lograremos alcanzar el nivel espiritual y material que ellos ya han alcanzado y que está aquí para que nosotros podamos hacerlo también.
Son muchos los entorpecimientos existentes todavía en
esta sociedad, muchos los escollos que debemos salvar, pero debemos tener
en todo momento en nuestras mentes el ejemplo de estos hermanos y la esperanza
de que con el trabajo y el esfuerzo sin lugar a dudas, un día más
o menos cercano alcanzaremos aquello que estos hermanos ya han alcanzado.
Que esta sociedad en la que vivimos tiene solución y las diferencias
existentes entre los humanos pueden desaparecer.