"Mi Dios y mi Todo" (V187).

"Llevar mi enfermedad con alegría y consumir mi existencia en el fuego de tu amor" (V, 187).

Guiar a las personas con dulzura (cfr. V, 188).

Sí Señor…lo acepto todo…ver o no ver…escribir o no escribir…" (cfr. V 188).

Somos instrumentos débiles en las manos de Dios (cfr. V 199).

"¡Qué hermoso es arrojarse en los brazos de Dios! ¡Cómo prepara El solo los caminos a sus criaturas, sin saber éstas adónde van a ser conducidas…!" (V, 203).

La Santísima Virgen es nuestra Superiora, Madre y Maestra (cfr. V,203).

La Madre de Dios fue "la primera Catequista del mundo nombrada al pie de la Cruz para conducir al género humano a la Jerusalén celestial". (V, 203).

Que María Santísima sea el modelo para catequizar el mundo entero (cfr. V, 203).

Deseo cada vez más, hermanar la vida activa con la contemplativa (cfr. V, 204).

"Sean santas, muy santas, y sobre tod tengan una confianza plena en Nuestro Señor. Yo no he tenido absolutamente nada, ni virtudes, ni méritos, ni cosas heroicas, sólo la confianza sin límites" (V, 205).

"Yo no me aferro a nada" (P, 34).

"El amor debe ser páctico, con obras" (P, 28).

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Fuentes:V: FERNÁNDEZ POMBO, Alejandro y F. DEL VADO, Santiago, Vida y Obra de Dolores Sopeña, Madrid 1995 (BAC Popular 109); P: Pastoral Sopeña, Loyola 1997.