SE HABLARA DE EL

En el seminario de Aire los aspirantes al sacerdocio viven en un ambiente de recogimiento, piedad y estudio. Primero la vida interior: meditaciones exámenes de con ciencia, visitas al Santísimo Sacramento. Con estos medios el seminarista debe formarse y realizar el ideal sacerdotal hecho de amor total por Dios, de abnegación de sí mismo, de celo por las almas. Tiene que conocer y mejorar su propio carácter, confrontarse con Cristo, entregarse. Trabajo fatigoso como una ardua ascensión. Los conceptos abstractos, los razonamientos sutiles, las matemáticas no son propiamente pan para dientes de un montañés. Miguel pone todo su empeño, y en poco tiempo se pone a la par de los otros.

En este ambiente, con la ayuda de sus superiores y su director espiritual, Miguel se forma en la piedad y el estudio. Entrelaza una profunda amistad con Eduardo Cestac. Es un joven voluntarioso y virtuoso. Su ejemplo de piedad y empeño en el estudio lo contagian muchísimo.

Para el estudio de la teología, Miguel se dirige al seminario mayor de Dax. También aquí Miguel dará de qué hablar. Se destaca en el estudio de las cosas de Dios; pone a punto su sensibilidad de corazón y de mente al contacto con las verdades de la fe, la Palabra de Dios, la gracia y los sacramentos. En clase Miguel asombra a los profesores por la exactitud y profundidad de sus respuestas. El P. Dupoy, su profesor, más de una vez exclama: "O yo me equivoco por lejos, o este joven un día dará que hablar de él".

 

 

Reflexión

 

El evangelio nos enseña como crecer interiormente, en la fe y en las cosas humanas. Si lees a Mateo (15, 14-30) o Lucas (6, 46-49), comprenderás que los dones recibidos de Dios son para el bien de todos y para construir el Reino.

Miguel sabe escuchar a Dios a través de sus superiores, de sus profesores y de sus amigos. Obedeciéndoles, atempera su carácter, amplia sus relaciones, profundiza su comunión con Dios. Los grandes sacrificios lo llevaron a grandes alegrías.

¿Qué sacrificios estás dispuesto a aceptar para crecer como persona? ¿Te preocupas por ser cada día mejor, cada vez mas semejante a Miguel, a Cristo?

 

  

 

 Oración

 

Señor mi Dios,

quisiera ser capaz

de ofrecerte mi corazón.

Yo se que no te ofrezco

grandes cosas,

pero te doy todo lo que tengo,

todo lo que soy.

 

 

  Propósito

 

Haz con diligencia tus deberes cotidianos y busca siempre dar lo mejor de ti mismo, desplegando al máximo los dones que has recibido.

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