IX. ORACIONES POR LAS VOCACIONES
39 - ORACION DE PAULO VI
Jesús, buen Pastor,
Tú que has venido
para buscar y salvar
lo que se había perdido;
Tú que has instituido
el sacerdocio de la Iglesia,
que ha de proseguir tu obra
por todos los tiempos,
te rogamos insistentemente:
envía operarios a tu mies!
Envía sacerdotes dignos a tu Iglesia!
Envía religiosos y religiosas!
Haz que sigan tu llamado
todos los que desde la eternidad
elegiste para tu santo servicio,
pero que ninguno se atreva a penetrar
en tu Santuario sin haber recibido ese llamado.
Fortalece, Señor,
a todos tus sacerdotes y religiosos
en su difícil vocación
y bendice sus esfuerzos y trabajos.
Que sean la sal de la tierra
que evita la corrupción;
que sean luz del mundo
que a todos iluminen con su palabra
y con su ejemplo.
Concédeles sabidurías paciencia y fortaleza
para que busquen tu gloria,
extiendan tu reino en los corazones de los hombres
y lleven las almas a ellos confiadas
hasta la Vida eterna. Amén.
María, Reina de los Apóstoles
ruega por nosotros.
40 - ORACION DE JUAN PABLO II
Señor Jesús,
Como llamaste un día a los primeros discípulos
para hacerlos pescadores de hombres,
continúa también haciendo resonar hoy
tu dulce invitación: ¡Ven y Sígueme!
Da a los jóvenes y a las jóvenes la gracia
de responder prontamente a Tu voz.
Sostén en sus fatigas apostólicas
a nuestros obispos, sacerdotes
y personas consagradas.
Da perseverancia a nuestros seminaristas
y a todos los que están realizando
un ideal de vida
totalmente consagrado a tu servicio.
Despierta en nuestra comunidad
el empeño misionero.
Manda, Señor, operarios a tu mies
y no permitas que la humanidad se pierda
por la falta de pastores, misioneros,
y de personas consagradas a la causa del Evangelio.
María, Madre de la Iglesia,
modelo de toda vocación,
ayúdanos a decir "SI" al Señor
que nos llama a colaborar
en el designio divino de Salvación. Amén.
41 - SEÑOR DE LA MIES
Señor de la mies y Pastor del rebaño,
haz resonar en nuestro oídos
tu fuerte y suave invitación: "Ven y sígueme".
Derrama sobre nosotros tu Espíritu,
que él nos dé sabiduría para ver el camino
y generosidad para seguir tu voz.
Señor, que la mies no se pierda
por falta de obreros.
Despierta nuestras comunidades para la misión.
Enséñanos para que nuestra vida sea servicio.
Fortalece a los que quieren dedicarse al Reino,
en la vida consagrada y religiosa.
Señor, que el rebaño no se pierda por falta de Pastores.
Sustenta la fidelidad de nuestros obispos,
sacerdotes y ministros.
Da perseverancia a nuestros seminaristas.
Despierta el corazón de nuestros jóvenes
para el ministerio pastoral en tu Iglesia.
Señor de la mies y Pastor del rebaño,
llámanos para el servicio de tu pueblo.
María, Madre de la Iglesia,
modelo de los servidores del Evangelio,
ayúdanos a responder "si". Amén.
42 - PLEGARIA PARA PEDIR AL PADRE CELESTIAL
SACERDOTES SANTOS
¡Oh Dios Omnipotente!
A Ti recurrimos en nuestras necesidades,
En Ti buscamos la paz
en nuestras tribulaciones,
Para nuestra Santa Iglesia
con tu infinita bondad:
¡DANOS SACERDOTES SANTOS, SEÑOR!
Para mantener la Doctrina
que Cristo dejó a su pueblo
para salvara la humanidad:
¡DANOS SACERDOTES SANTOS, SEÑOR!
Para conducir a tu pueblo hacia Ti,
para glorificar y adorar a Cristo
en la Eucaristía:
¡DANOS SACERDOTES SANTOS, SEÑOR!
Para enseñar y guiar a tu pueblo
hacia el Reino de Cristo:
¡DANOS SACERDOTES SANTOS, SEÑOR!
¡Oh Padre Celestial!
En tu divino poder,
confiamos nuestra Santa Iglesia,
para que siempre en ella resplandezca
la LUZ del Espíritu Santo.
¡María, Reina y Madre de la Iglesia!
Bajo tu mano ampáranos.
Y con tu cariño Maternal,
protege a tus Hijos Predilectos,
los Sacerdotes. Amén.