NUESTROS NÚMEROS PERSONALES
Cada persona es
única, con sus características propias, con sus ambivalencias. La
numerología lo sabe, por eso siempre toma en cuenta todos los
factores numéricos que influyen en el individuo para ser lo más
preciso posible a la hora de describir a alguien.
Es por eso que
una persona no puede ser representada tan sólo por un número. Más
bien estamos conformados por varias vibraciones numéricas, tenemos
varios números que al juntarlos expresan nuestro carácter, nuestra
personalidad.
Se le llama del
Destino, porque este es el que nosotros elegimos antes de nacer para
hacer nuestra aparición aquí en la Tierra. Incluso en aquellos casos
en los que se hace cesárea programada. Parecerá tal vez extraño,
pero estas cosas también se tenían ya previstas como parte de tu
destino.
Este número nos
describe la naturaleza de nuestro viaje a través de la vida. Las
características de nuestro espíritu. Lo que hemos venido hacer y lo
que queremos lograr a través de la vibración de este número.
Se saca con la
suma del día, mes y año de nacimiento.
Este lo
conseguimos a través de todas las letras del nombre que nos dieron
al nacer. Esto es, el nombre que figura en nuestra acta de
nacimiento.
Cada letra tiene
un numero que le corresponde y la suma de todas las letras de
nuestro nombre y apellidos nos dará como resultado el número de
nuestra expresión personal con el cual veremos cuales son nuestros
talentos, aquellas potencialidades que podemos desarrollar si
queremos.
Se le considera
también como el que describe nuestra personalidad exterior. La que
hemos formado a través de la interacción con nuestro ambiente y con
las personas que nos rodean. El mismo nombre se nos viene dando en
función de las características de la situación en que nacemos.
Nos expresamos a
través de este número.
Aparte de estos
dos números hay también otros análisis numerológicos que nos
muestran otros matices de nuestra personalidad y que son esenciales
para definir de una manera más profunda, la singularidad del
individuo.
-
El deseo del
alma que se obtiene sumando las vocales del nombre completo y
que describe la motivación interna de la persona, también nos
informa de los posibles obstáculos que podemos encontrarnos en el
camino.
-
El día del
cumpleaños, dejando de lado esta vez el mes y el año, nos
muestra características básicas de nuestra personalidad, la imagen
que tenemos de nosotros mismos.
También cuando
un número se repite mucho o simplemente no aparece se toma en cuenta
en una lectura numerológica, pues nos muestra nuestros puntos
débiles y situaciones que nos hace falta aprender. Muchos
numerólogos llaman a estos números las deudas y las lecciones
kármicas.
Finalmente
nos encontramos con los pináculos que son periodos de años,
ciclos que describen nuestra evolución y los años personales
que nos describen las situaciones en que nos enfrentaremos durante
todo el año. Los años personales empiezan desde el día del
cumpleaños hasta el siguiente cumpleaños.
por Melbis
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