-¡AGGGPPT!-
I
- Esta es la historia de mi vida...-¡SNIF!-.., sí, sí, estoy llorando...solamente con recordar cómo he podido cambiar tanto...-¡SNIF...MOC, MOC!-...me pongo a llorar como una desconsolada...¡y todo por mi maldita suegra!.
- ¿Tiene un pañuelo?...gracias.
- Yo era guapa, muy guapa, guapísima; alta; 1'78 m. y con 60 kilos; rubia, bueno, tan sólo con decirle que antes de casarme con Manolito, mi primer marido, yo era una top-model como se llaman ahora...-¡SNIF SNIF!-.
- ...Desfilaba por las mejores pasarelas del mundo y del extranjero; París, Roma, Cuenca, Londres, New York, Albacete, Tokio, Valencia...¡Ay! -¡SNIF...MOC, MOC!-...¡qué tiempos aquellos!...¿y ahora?..., ahora soy una mierda, un cero a la izquierda, un monstruo de 255 kilos, medio calva, histérica perdida,vizca, granulada...¡ah, y éso no es todo, no!,... lo peor, eh...lo peor es que...
- ¿Tiene otro pañuelo?...gracias.
- ¿Por dónde íba?...¡aaah..., ya!, ...y lo peor de todo es el lugar donde me encuentro...¡¡en la casa de los locos!!. Yo tenía dinero, fincas, un buen trabajo y un gran marido, y todo, todo todo...¡a la mierda!.
- La suegra, mi maldita suegra,...ahora que...¡me alegro!...sí, sí, me alegro de que la palmase de ésa forma,...¡se lo merecía! ...era una bruja la muy desgraciada... -¡MOC MOC...AGGGGPPTT!- ...mira, bruja asquerosa, ésto verde que acabo de escupir, es para tí...¡bruja, guarra!
- Cuando me casé con Manolito, mi primer marido, el hijo de la bruja...-¡AGGGGPPTT!-..., dejé de desfilar para así tener más tiempo para la familia, bueno, para mi Manolito, pero me aburría en casa, sola, sin nada que hacer..., y me decidí a buscar un trabajito para pasar un poco aquel tiempo inútil, pero me dije...¿con el desempleo que hay voy a emcontrar yo uno?
- ¡¡ey, lo encontré!!, sí, sí, lo encontré.
- Yo simplemente buscaba un trabajito pero no esperaba éso; algo tan bueno, tan interesante, tan fácil y...¡tan bíen pagado!,... cientos de billetitos de mil al mes. Parecía hecho a mi medida: "Relaciones públicas personalizadas", así me dijo el jefe que se llamaba mi trabajo.
- Aunque...en el primer día de trabajo me di cuenta que eran unas "Relaciones públicas" un tanto extrañas puesto que apenas salía del despacho de mi jefe, ...¿por qué sería...?. Bueno, pero...al final del mes, ponía la mano y...¡traca, billetitos para la nena!...¿lo demás?...¡psst, mientras no se enterase mi marido, a mí no me importaba!
- Pero...todo ésto y todo lo que tenía, todos mis ahorros, mis joyas, todo lo he perdido...¡todo!...mi casa, mi otra casa, la otra...¡mi cuerpo!...todo...-¡SNIF SNIF!-...no puedo, no..., lo siento por usted pero no..., no puedo continuar, ... se acabó...
- ¿Tiene otro pañuelo?...., gracias ...-¡MOC MOC!-.
II
- Bueno, vale, continuareeeeeeeeeeé.......
- El día de mi boda, mi...-!AAGGGPPTT¡-...suegra, la bruja, muy amable ella, disumulando el diablo que tenía escondido dentro, pero un diablo diablo; con cuernos, orejas puntiagudas, rabo, etc...pues, como decía, en el día de mi boda me dió como único regalo de bodas...¡un consejo!, y es que, encima, era un tacaña de mil pares de narices, pues el consejo que me dió era que no intentara engañarar a Manolito porque ella se enteraría y se vengaría. Yo, inocente de mí, intentando llevarme bién con ella desde un principio y limar asperezas futuras....le dí un beso...-¡JE JE!-...me hace gracia ahora pero...¡ay si lo hubiese sabido!...¿un beso?...¡una patada en los cataplines le hubiese dado!...porque seguro que los tenía...¡ era más rara que un perro verde!...
- ...Vieja, gorda, calvorota, con berrugas hasta en el sujetador...¿eh?......¿tiene un espejo?...-¡AHHHHHHHH!-...¡si me parezco a ella!...no puede ser, no, no y no, es imposible, aunque...¿y si la maldición que...? ¡ay, ay, ayyyyy...,qué malaaaa...!
- Ahora recuerdo que... mi difunto primer marido...¿eh?...¿que no se lo había dicho?, pues sí,....soy viuda de mi primer marido, pobrecito, depués de haber sido el blanco de mis iras,...se fué, sí, así como quien no quiere la cosa, se fué, bueno, mejor dicho...se me escapó de las manos, allá arriba, en la azotea, cuando yo intentaba consumar mi vigésimo tercer intento de suicidio. Aún recuerdo sus últimas palabras mientras caía al vacío desde la décima planta, parece como si lo estuviese viendo ahorita mismo...., me dijo...-¡HIJA DE PUUU.....!- y ...-¡PLASSST!-, lo del -¡PLASST!- lo dijo el asfalto de la calle según me comentaron algunos vecinos.
- CONTINUARÁ.............................................................