DIARIO DE CADIZ

LAS HORAS TENDIDAS

Los abducidos del PSOE

Un señor de Barbate nos dice ahora que hay pinturas rupestres en la provincia que reproducen células, mitosis y elegantes extraterrestres con aletas. A uno lo que le extraña no es que vengan por aquí los extraterrestres, que Cádiz tiene belleza cosmopolita e indiana, sino que, para dejar constancia de su paso, pinten la danza de una división celular o el ramaje del tejido cartilaginoso, con lo fácil e incontestable que hubiera sido una curva senoidal, o una hipérbola, o los cinco sólidos pitagóricos. A este señor de Barbate se le olvida que el primer lenguaje de la inteligencia es la matemática, y que un alienígena lo que haría sería dejarnos escrito en binario la frecuencia del hidrógeno, y no el hormigueo de un Miró interplanetario, arabesco y florido. Pero el ser humano sigue empecinado en lo que le emociona, aunque sea irracional (la religión o los ovnis) y desdeña lo sensato por feo y poco poético.

Se ve que hay por aquí mucha tropa de abducidos relatando sus insolaciones, e incluso manejando partidos. Fíjense si no en el PSOE. Los socialistas vieron la luz de la progresía en el cielo, les atontó el garrotazo láser de la mayoría, mentes no humanas experimentaron en sus vísceras los jugos del marxismo y el social-liberalismo y, por fin, los dejaron, mareados y algo amnésicos, contando su rapto por las tabernas como un granjero de Arkansas. Ahora los del PSOE gaditano porfían si el marciano que los miraba en la mesa de disección tenía los ojillos tristes de Román o el cabezón de Chaves, o si venían del planeta Alcalá, o si a uno le dieron el poder de levitar en los despachos o a otro le encargaron la misión de la renovación, que interesa mucho en la Galaxia. Hay quien ve extraterrestres por todos lados, como hay quien ve candidatos, y así me parece a mí que lo que hay en el Tajo de las Figuras no son marcianos, sino las siluetas de González y Guerra, con escafandra y tortilla.