Resumen
del estudio sobre el movimiento
Iglesia
de Cristo de Boston
Originalmente en: AIS
En 1994 fui premiado con el galardón "Albert V. Danielsen
1995" del Instituto Danielsen de la Universidad de Boston. En mi solicitud
al Instituto Danielsen indiqué que deseaba hacer un estudio de investigación
sobre miembros del movimiento Iglesia de Cristo de Boston (1),
que ha sido muy controvertida en la Universidad de Boston y otros campuses,
y a menudo se considera uno de los grupos de más rápido crecimiento
del mundo. Recientemente mandé al Instituto Danielsen un informe
largo y técnico sobre este estudio.
En este breve ensayo intentaré ofrecer un resumen no técnico
de los mayores hallazgos del estudio, en parte para beneficio de [las personas]
que requerían un informe de los resultados del estudio. Estoy profundamente
agradecido a [ellas] por el tiempo que dieron a esta investigación.
También quiero agradecer a la gente que asistió a la formulación,
aplicación o presentación del estudio: Doctores Carole Bohn
y Ann Kelley del Instituto Danielsen; doctores Arthur Dole, Paul Martin
y Steven Lynn; los Reverendos Robert Thornburg y Harold Bussell, Jeff Davis;
Leanne Pellegrini; Blair Smith; Melissa Kelley; los miembros del personal
InterVarsity Ming Weu, Colin Tomikawa, Rich Lamb y Rev. Doug Whallon; y
Jodi Aronoff y Natalya Zelikovsky, cuya propia investigación está
próximamente unida a este estudio. Debo una especial gratitud a
Carol Giambalvo por su ayuda en el desarrollo de una de las medidas utilizadas
en este estudio y al Dr. William Chambers y Pete Malinoski por su experto
análisis de datos y escritura del informe. Las presentaciones de
revistas profesionales basadas en este estudio tendrán ciertamente
numerosos autores.
Este estudio, que forma parte de una serie de estudios que mis colegas
y yo estamos dirigiendo, investigó la naturaleza y el nivel de afectación
psicológica de antiguos miembros del movimiento de Boston y sus
evaluaciones del abuso psicológico de ese grupo. El estudio tiene
dos componentes, uno en el que se veía a los sujetos cara a cara
y otro en que los sujetos recibían cuestionarios por correo.
El estudio intentó salvar algunas serias limitaciones metodológicas
de previos trabajos empíricos en este campo a través del
uso de:
-
Una batería estandarizada de afectación psicológica
y medidas sobre antecedentes, compiladas por un equipo investigador en
la Universidad de Ohio y el Centro de Retiro e Investigación Wellspring
(sólo sujetos vistos cara a cara recibieron esta batería
de tests).
-
Una medida objetiva de abuso psicológico (un tipo de escala "sectaria"),
la Escala de Abuso Psicológico Grupal [GPA], que mis colegas
y yo presentamos en el Cultic Studies Journal, Volúmen 11,
Número 1.
-
Una medida que pedía a los sujetos que valorasen su experiencia
personal y opiniones sobre una larga lista de prácticas concretas
por las que el movimiento de Boston ha sido criticado (sólo sujetos
que recibieron cuestionarios por correo completaron esta medida).
-
Dos corrientes principales de grupos comparativos: graduados de la Comunidad
Cristiana InterVarsity (un ministerio del campus) y antiguos católicos
romanos.
Se esperaba que los antiguos sujetos InterVarsity hubieran encontrado su
experiencia grupal favorable, mientras que se esperaba que los antiguos
católicos tuvieran más visiones negativas de su grupo.
Comparando el grupo del movimiento de Boston con los católicos
se prueba la hipótesis de que los antiguos miembros de grupos sectarios
evalúan el grupo de forma negativa simplemente porque están
descontentos. Si esta hipótesis fuera cierta, antiguos católicos
y antiguos miembros del movimiento Boston deberían ser igualmente
críticos con sus grupos. Mi hipótesis era que, aunque la
salida de un grupo puede que influencie la percepción de uno hasta
cierto punto, esta influencia no es tan grande como para prevenir a los
antiguos miembros de grupos abusivos de proveerse de opiniones relativamente
objetivas de esos grupos. También planteé la hipótesis
que los antiguos miembros del movimiento de Boston exhibirían mayores
niveles de afección psicológica y mostrarían considerable
acuerdo sobre haber experimentado muchas de las prácticas concretas
por las que le movimiento de Boston ha sido criticado.
Los resultados, que incluyen análisis estadísticos demasiado
complejos como para desarrollarlos aquí, apoyaron mi hipótesis.
Los sujetos del movimiento de Boston puntuaron más alto ("más
alto" indica que los resultados eran estadísticamente significativos)
que los sujetos InterVarsity en cinco medidas de afección psicológica
(sintomatología general, depresión, ansiedad, disociación,
estrés postraumático) y más alto que los antiguos
católicos romanos en dos medidas de afección psicológica
(depresión y estrés postraumático).
Los antiguos sujetos del movimiento Boston -en ambos componentes- puntuaron
a su grupo mucho más alto en la Escala de Abuso Psicológico
que lo que hicieron los católicos romanos y los graduados InterVarsity.
No es sorprendente que los antiguos católicos romanos puntuaran
a la Iglesia Católica tan poco benignamente como lo hicieron los
graduados InterVarsity con su grupo. Dico "poco benigno" porque la puntuación
media global de antiguos católicos en la escala GPA estaba
todavía por debajo de la puntuación que separa grupos abusivos
de los índices no abusivos. Las puntuaciones medias GPA (promedio)
de los dos grupos del Movimiento Boston eran 105,60 y 108,50. Las medias
de los antiguos católicos y los graduados InterVarsity eran 65,26
y 46,91 respectivamente. El punto medio de la puntuación abusiva
/ no abusiva es 84. Las puntuaciones por encima de 84 indican que el sujeto
está valorando ítems absusivos como caracterizando generalmente
al grupo y por debajo de 84 como generalmente no caracterizando al grupo.
Los antiguos sujetos del movimeinto Boston también indicaban
extensas experiencias personales con prácticas concretas por las
que el grupo ha sido criticado (esta medida incluye 120 valoraciones, así
que sólo un pequeño número se presentan aquí).
En una sección de la medida que investiga engaño en el reclutamiento,
los sujetos dieron unas puntuaciones medias de 1,82, con 1,00 indicando
que los niveles reflejando engaño eran definitivamente ciertos y
2,00 indicando que eran probablemente ciertos. El servilismo de los miembros
a los líderes/discípuladores era especialmente manifiesto.
Por ejemplo,
-
El 92,5% de los sujetos habían dicho que personalmente se les dijo
"confiad en el grupo y en sus líderes por encima de los propios
pensamientos y opiniones de los miembros".
-
El 57,5% dijo que ellos tenían que "obtener permiso de su discípulador
antes de acudir a citas personales al empezar una relación con alguien"
(este 57,5% probablemente no incluye aquellos que no se citaban y a los
que no era aplicable la pregunta).
-
Al 27,5% se les dijo "romper una relación con un no-miembro".
-
El 77,5% dijo que habían sido "amonestados o reprendidos por tomar
una decisión importante sin buscar consejo de sus discípuladores".
-
El 87,5% dijo que se les había dicho que "cuestionar, criticar,
desobedecer o desconfiar de los líderes del grupo es hacer lo mismo
a Dios".
-
Al 87,5% se le dijo que "si una persona no está siendo discípulada,
él o ella no es cristiana".
-
El 82,5% habían sido "castigados porque fracasaron en imitar a su
discípulador u otro líder".
-
Por otro lado, la evaluación negativa del movimiento, aunque fuerte,
mostró alguna variación. Aunque al 45% se le dijo que "estar
especialmente cerca de su familia es sentimental", el 25% dijo que no se
les dijo esto.
-
El 27,5% dijo que "cambiaron las metas de su vida con el fin de someterlas
a las metas del grupo", pero el 32,5% dijo que no.
-
El 55% dijo que "[a los] miembros [que estuviesen] experimentando cualquier
alteración emocional o psicológica, se les dice que no deben
consultar profesionales no miembros", pero el 20% dijo que esta afirmación
no era cierta.
Estas variaciones probablemente reflejaban: la capacidad de antiguos miembros
de discernir juicios en escalas valorativas (muy pocos pintaron un dibujo
estereotípicamente negativo del grupo); y diferencias objetivas
en los ambientes de diferentes centros del movimiento Boston, por ejemplo,
[S.M. Condon] dice:
"Intentamos no repetir ninguno de los abusos que hemos visto en
Boston, en Nashville y creemos que tuvimos éxito... Los artículos
del periódico constantemente hablaban sobre los abusos de Crossroads
y Boston, pero nunca pudieron acusarnos de nada e intentamos mantenerlo
así" (S.M. CONDON, Un Diario: dejar el
Movimiento Boston, 1991).
Este estudio no es ni mucho menos definitivo. No sabemos cuán representativos
son los sujetos voluntarios de una población más amplia de
antiguos miembros del movimiento Boston. No hemos estudiado miembros actuales
del movimiento Boston. No sabemos si estudios similares de otros grupos
controvertidos producirían resultados similares. Los tamaños
muestrales del estudio, aunque adecuados, deberían ser más
grandes. Por lo tanto, advierto a los lectores que no hagan lo que algunos
apologistas de sectas han hecho, esto es, hacer más investigación
de resultados apoyando [más] el punto de vista de uno que lo que
la ciencia garantiza. Este estudio es un ladrillo de un prometedor edificio
de estudios de investigación empírica que están latentes,
planeados o soñados. Espero que en unos pocos años mis colegas
y yo hayamos depositado más ladrillos robustos en ese edificio de
investigación.
Michael Langone
Psicólogo
Director Ejecutivo de la Asociación
American Family Foundation
Notas:
1. Con este nombre se conoce comunmente a la Iglesia
Internacional de Cristo en los E.E.U.U