EDITORIAL Una nueva revista se inscribe en el espacio
Internet. En 1997 comenzamos un trabajo constante de crear opciones para
que el campo de la educación tenga lugares donde discutir
y compartir experiencias y a la vez, brindar un acceso a las novedades
y las posibilidades de la tecnología computacional . Dos de los
miembros del equipo Proyecto de listas INFOEDU y con
la ayuda de amigos educadores encaran esta nueva etapa. La
Puerta. Como editores y directores planteamos
un medio que nos aleje del ajetreo y la aceleración que la tecnología
computacional nos produce y nos permita tener, mensualmente, un espacio
para la reflexión , en torno a los procesos de enseñanza-aprendizaje
con uso de tecnología.
Pensar el futuro
desde el presente, operando sobre él, para que lo que hoy
aparece como confuso, se aclare, para enfrentar el desafío
de combinar las urgencias de una practica diaria, con la reflexión
necesaria para que en los tiempos que se avecinan, no quedemos atrapados
en aquello, que Macluhan congeló en una metáfora histórica
"El futuro es ir en un auto a velocidad, donde desde el parabrisas no se
ve nada y por el retrovisor vemos un caballo atado a un carro"
La Puerta
no es una revista reversible, que puede hacerse en papel o en Web, es una
revista cuyo modelo se sostiene en los recursos de la red. Por eso
cuenta con una lista de discusión asociada, sus artículos
son hipertextuales, conectados a la información disponible. Postularnos
interactivos es una palabra hoy ya trillada, intentaremos generar espacios,
para que la revista, no quede en la revista sola y por medio de discusiones,
en lista y online, avancemos sobre la definición de revista, concepto
que heredamos de cinco siglos de cultura Gutenberiana. Implica postular
un autor que no quede en letra muerta, sino en contacto con los lectores,
si es que aún podemos seguir denominándolos así. No
lo lograremos desde el primer numero, dado que es un proceso en construcción
permanente, entre editores, autores y lectores.
En este primer numero presentamos una
serie de artículos, que nos abren a la reflexión y al desafío.
Graciela Caplan, se pregunta por las Bibliotecas
Digitales y el papel a futuro de estos medios. Carlos Neri, propone visitar
museos virtuales y analiza la combinación de herramientas, para
experiencias grupales de recorridos. Jeannine Krischke,
desde Brasil, propone una lectura de los procesos
de enseñanza-aprendizaje en Internet, jugando con la forma
y el contenido en su articulo,. Fernando Pisani, nos plantea la presión
del mercado a la hora del recambio tecnológico en Argentina. Magalí
Zuniga Céspedes, de Costa Rica, nos trae el entrecruzamiento entre
constructivismo y tecnología, en la primera de sus dos nota, donde
refleja el papel de la Fundación Omar Dengo ,en la utilización
de tecnología en educación Y afuera han quedado otros artículos
de Cuba, España. Canadá, que alimentaran próximos
números.
Las puertas son una metáfora muy
tentadora, hablan del acceso a lugares, de lugares cerrados, de la tentación
de entrar a lugares, de lugares que debemos abrir, de la secreta esperanza
de encontrar aquello que buscamos en cuanto logramos trasponerla.
Las puertas pueden tener muchos nombres,
y por esa ambigüedad de significados, lo elegimos para proyecto de
revista sobre educación y tecnología computacional, abierta
a los lectores, abierta en la concepción, abierta a la integración
de muchas personas de diferentes países, abierta al futuro que deberemos
transitar..
Corría el mes de Mayo y nos embarcábamos
hacia Barcelona, al Primer Congreso de Periodistas Digitales, llevando
en el avión una síntesis de experiencias y un proyecto en
gestación, con la energía tomada en ese magnifico Congreso,
el que dedicamos un comentario en este número, La
Puerta, ya no era un proyecto, sino que tenía notas,
ideas, amigos, y hasta críticos.
Como corresponde a una revista en Internet,
las fronteras fueron abriéndose y un proyecto generado en
Buenos Aires, aúno, amigos del exterior que abrieron La
Puerta, así llegó Brasil, Cuba, Costa Rica, México,
Canadá, España, y muchos otros que siguen pensando
que la educación es una cosa demasiado
seria para que sólo los educadores carguen con tal peso.
La educación en términos absolutos es la transferencia de
saber que una generación le otorga a otra, es la habilitación
a un mundo cada vez más complejo. ¿Es posible pensarla sin
reflexión teórica?.
Y con la puerta
abierta, los editores queremos dedicar este primer número a todas
las personas que en el espacio Internet sueñan, trabajan,
sienten, investigan, producen y sobre todas las cosas encuentran
en el otro un compañero de ruta, en el espacio continuo de lo virtual,
de lo real.
Graciela
Caplan-Carlos Neri
Editores
responsables
La
foto que ilustra esta nota, "Olkar y el salto" es de Carlos Neri y
se requiere su autorización para utilizarla.
