PBRO. JORGE METTON; PÁRROCO DE SURY-LE-COMTAL, LOIRE; 1837-11; PS 161, ch110161.doc; Copia de la minuta, AFM, RCLA 1, p. 16, nº 17

 

INTRODUCCION

 

Según los Anales del H.Avit acerca de Sury, las gestiones para la preparación de la casa que habitarían los Hermanos se iniciaron antes de junio de 1834. El P.Champagnat habría visitado el lugar y dado sus indicaciones. Los Hermanos iniciaron el curso escolar en noviembre de ese mismo año. Muchos requisitos de los Estatutos maristas no se habían cumplido. Tal vez Marcelino hizo mucha confianza a las promesas del Sr. Cura. El caso es que para 1837, fecha de esta carta que estudiamos, el Fundador se ve poco satisfecho con las instalaciones construidas en Sury.

 

TEXTO

 

Quelque soit le désir que nous ayons de vous obliger, nous ne pouvons plus longtemps nous charger de l'école de Sury si les classes ne sont mises en harmonie avec notre méthode. Le bien des enfants qui nous sont confiés le demande, nous ne nous en départiront pas.

 

Por grande que sea nuestro deseo de agradarles, no podemos seguir más tiempo encargándonos de la escuela de Sury si las aulas no se preparan en armonía con nuestro método. El bien de los niños que se nos confían lo exige. No daremos marcha atrás.

 

C'est l'avis de mes confrères et de nos Frères anciens que j'ai encore consultés. C'est aussi la règle des excellents Frères des Ecoles Chrétiennes qui devraient nous servir de règle invariable en tout. Ils s'expriment ainsi dans leur conduite page 187, chapitre IX, de la structure des classes: les classes doivent toujours être consignées, la porte de communication doit être vitrée et on doit ménager des ouvertures dans les murs ou cloisons de séparation afin que es maîtres puissent se voir facilement de leur place.

 

Tal es la opinión de mis Cohermanos y de nuestros Hermanos más antiguos, a quienes también he consultado. Es también la regla de los excelentes Hermanos de las Escuelas Cristianas, que nos sirve de norma invariable en todo. Ellos se expresan así en su "Conduite", página 187, cap. IX, sobre la estructura de las aulas: Las aulas deben estar siempre contiguas; la puerta de comunicación debe tener cristales y se deben practicar aberturas en las paredes o tabiques de separación a fin de que los maestros puedan verse fácilmente desde su asiento.

 

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