11 de agosto de 2001
Autogoles gramaticales No.1
COMENTO: En el texto que he citado, mi amigo Álvaro le dio papaya a Gloria H. y mi parientica Gloria H, también le proporcionó argumentos a Álvaro, para la réplica. Espero que Gloria H. ya ha entrado en razón y admitido que cuando en español, se dice por ejemplo: “visionarios”, “asistentes”, “condiscípulos” etc, se refiere a ambos sexos, hombres y mujeres, sin que con el empleo del masculino, se quiera hacer una demostración de machismo.
No creo que Alvaro, al escribir “le invito ( referido a Gloria H,) lo haya hecho por machismo. ¡ Nada más alejado de mi mente ! Sencillamente se gazapeó. Me explico. El uso correcto de los pronombres: “lo, los, la, las, le, les”, para las funciones de complemento directo o indirecto, se rige por determinadas reglas, cuyo cumplimiento es de imperiosa obligación para no cometer gazapos ortográficos. En el caso de los complementos directos el pronombre ”la”, es de uso exclusivo para el género femenino, por tanto Álvaro debió escribir “la invito”, - a Gloria H-.
En cuanto hace referencia al género masculino, la Academia ha sido más amplia. ¿Preferencia? No me meto a opinar al respecto. La verdad es que hoy el pronombre “lo”, antes asignado al género neutro, se puede emplear también indistintamente con “le” . masculino. Por ejemplo. Si quiero referirme a Álvaro Bejarano, escribiría: “ le (lo) invito a que lea esta observación, Gracias”.
CITO:Mirador. El Tiempo- Cali -06-08-2001Página . 2-12.”Curioso quien nunca ha visitado a Cali es Gabriel García Márquez...García Márquez, con Botero, no quiere a Cali.
COMENTO: Apreciado maestro. Mi comentario se reduce simplemente al aspecto gramatical, No entro en honduras de otra índole, referidas a qué tanto García Márquez como el pintor Botero, no hayan manifestado con hechos sus afectos por Cali.
Mi amigo Pardo Llada pecó por falta de concordancia. Al haber citado a dos sujetos gramaticales, García Márquez, con Botero, debió emplear el verbo en plural: “..no quieren a Cali”. Así de sencillo.
Gracias por leerme, hasta la próxima semana, Dios mediante.