73 

Si el enemigo es uno mismo hay que conocerse perfectamente bien para no dejarse enredar una vez más. Esto es imposible sin la idea de estrategia: vencer a través de la inteligencia aprovechando la fuerza del enemigo. Las artes marciales no proponen otra cosa; la lucha se entabla en tres planos coexistentes y sucesivos. Hay distintas lecturas de ese enfrentamiento. Lo que cada quien obtenga dependerá de la suya y de su entrega al Conocimiento.

 

1