Por Carlos Crismatt Mouthon

Básicamente el scanner funciona bajo los mismos principios del fax, que luego fueron utilizados en las fotocopiadoras. Se trata de un sistema óptico que mediante una célula fotoeléctrica explora el documento, creando una información de tipo analógico que después es convertida en digital cuando se transmite al computador.

Existen scanner de escala de grises y de color. En los primeros, la información analógica de la imagen escaneada se convierte en digital, asignando el valor 0 para el blanco, el 255 para el negro y los valores intermedios para la escala de grises. En los de color, se separa cada color en sus componentes de rojo, verde y azul (sistema RGB, red, green, blue) con lo que se consiguen combinaciones de hasta 16.7 millones de colores (24 bits).

Cada imagen explorada se convierte en un tramado de puntos, parecida a las fotografías de los periódicos, en que cada punto tiene su valor en las escalas de grises o de color. El número de puntos por pulgada (ppp) que tenga ese tramado determina su resolución y entre mayor es esta resolución mejor es la calidad de la imagen. El valor más común de la resolución de las impresoras es de 300 ppp.

Existen dos tipos de modelos de scanner, los de cama plana o sobremesa y los de mano. Los primeros son más costosos pero ofrecen una mayor resolución al explorar las imágenes, mientras que los de mano son más económicos y su resolución es menor.

Actualmente se puede conectar el scanner al computador utilizando el bus SCSI o por intermedio del puerto paralelo. La diferencia radica en la velocidad con que el scanner realiza la exploración del documento. El sistema SCSI utiliza una tarjeta especial y su velocidad es superior a los de puerto paralelo, incluso al sistema IDE de los discos duros, pero su valor es más alto. El puerto paralelo tiene la ventaja de su fácil conexión y de evitarse la compra e instalación de la tarjeta SCSI, por lo que es más económico, pero es significativamente más lento en todo el proceso.

El scanner se comunica con el computador mediante una interfaz conocida como TWAIN, que viene dentro de Windows y cada scanner trae un software que instala a su vez su manejador (driver) TWAIN. Los programas gráficos, como Corel PhotoPaint o Adobe PhotoShop, tienen una opción en el menú Archivo - Adquirir Imagen - Seleccionar Orígen (File - Acquire - Select Source), en el que aparece un listado para escoger el manejador (driver) del scanner que se vaya a utilizar .

Si la información obtenida es una imagen, se puede procesar y almacenar en cualquiera de los formatos gráficos disponibles, como BMP, GIF o JPG. Pero si es texto, se puede utilizar un programa de reconocimiento óptico de caracteres (OCR - Optical Character Recognition) para convertir esta información en texto editable en cualquier procesador.