PARABOLA DE LA EDUCACIÓN
Iba un hombre caminando
por el desierto cuando oyó una voz que le dijo:
"Levanta algunos guijarros, mételos en tu bolsillo
y mañana te sentirás a la vez triste y contento"
Aquel hombre obedeció.
Se inclinó, recogió un puñado de guijarros
y se los metió en el bolsillo.
A la mañana
siguiente, vió que los guijarros se habían convertido
en diamantes, rubíes y esmeraldas. Y se sintió
feliz y triste.
Feliz, por haber cogido
guijarros, triste por no haber cogido más.
Lo mismo ocurre con lo educación.
W. Cunningham
Escritor británico.
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