SUPERACION DEL ESQUEMA DARWINIANO . Como Darwin nos enseñó, las
mutaciones y la selección natural pueden ir mejorando un sistema biológico
a través de la acumulación de variantes sucesivas de escasa importancia,
de la misma manera que probar aleatoriamente diversas posibilidades
mejora las tecnologías. Pero hay situaciones donde esto es un fracaso.
No todos los sistemas tienen la capacidad de adaptarse y mejorar con
esa receta. Un complejo programa de computación dificilmente podría
nacer de una serie de mutaciones aleatorias, a tal punto que un mínimo
cambio en su código introducirá consecuencias catastróficas. Cuanto
más compacto el código, tanto menos puede evolucionar. En cambio construyendo
redes, en el límite entre el orden y el caos disipativo, pueden llegar
a tener la flexibilidad para adaptarse rapidamente y con buen éxito
a la acumulación de variaciones útiles. En estos sistemas especiales,
la mayoría de las mutaciones tienen escasa consecuencia debido a la
naturaleza homeostática de dichos sistemas. Pero unas pocas mutaciones
provocan una importante cascada de cambios. Tenemos dos comportamientos
de estos sistemas especiales: cambian suavemente en forma paulatina
y, ocasionalmente, cambian muy rapidamente, lo mismo que en sistemas
vivientes. Los sistemas ubicados en el límite entre el orden y el
caos pueden ser el objetivo inevitable de la selección natural. La
habilidad para sacarle ventajas adicionales a la selección natural
debiera ser uno de los primeros aspectos seleccionados. La evolución
parece haber sintonizado sistemas de regulación de genes no solamente
en la región de orden, sino en el límite entre el orden y el caos.
Stuart A. Kauffman, Sci Am, august 1991, p. 64.
Colección de lecturas de Biología- Carlos von der Becke.