Definición::La correlación propuesta por Vygotsky entre retardo en tomar decisiones y pasaje a un estado de mayor conciencia es debatible. Este autor expone que la medida del uso acumulativo de un alto nivel de conciencia es el retardo en tomar decisiones. En general parece que la correlación es función de otras variables no consideradas, por ejemplo la presencia de situaciones de fuerte alarma, que evocan la principal utilidad de la conciencia, casi sinónimo de estado de pleno alerta y vigilia. En condiciones de alarma la conciencia adquiere toda su importancia, que fue la que la originó (Walker). Si nos demoramos en una dada toma de decisiones en situaciones no alarmantes (de seudo-alarma) ello es debido al debate entre módulos mentales que analizan y votan por diferentes resoluciones en conflicto frente al problema a resolver. Inciden las indecisiones - "tengo que consultarlo con la almohada" (teoría de las indecisiones). Los mecanismos de "deliberación" nunca son rápidos. El retardo tiene un límite de sentido común, esto es, nadie busca la solución perfecta, sino alguna suficientemente buena entre las experimentadas ("preparación") o imaginadas ("deliberación") que sea apta para los fines prácticos (principio de racionalidad restringida de Herbert Simon).¿Será el retardo en la toma de decisiones una función de lo que ellas nos preocupan? Con las alarmas propiamente dichas, en general, si estamos entrenados, no tenemos dificultad en intentar huída o enfrentamiento y aunque cambiemos de estrategia apenas iniciamos una de ambas, sentimos que estamos adaptados para esta situación preocupante y que nos damos cuenta de una situación de pánico o conflicto. Por otro lado hay caracteres y personalidades no adaptadas al peligro, que se quedan congeladas y tiesas en situaciones de alarma, por herencia biológica no superada por un entrenamiento incompleto, seguramente concientes en forma plena de lo que está ocurriendo. El caso más rescatable es el de quien, en pleno pánico colectivo, decide con afán y con todos sus sentidos alertas, lo que le resulta más conveniente, independientemente de la actitud general. La falta de entrenamiento se muestra en la dificultad de adaptación a una respuesta activa. En concreto, cuanto mayor la alarma y nuestro entrenamiento, más concientes de ella logramos estar y más rápido decidimos qué hacer.
29.jun.1999
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Glosario de Carlos von der Becke.