Aún siendo voluntario y perteneciendo a la guardia nocturna, el día 10 de Enero de 1929, el Capitán de la época, don José Luis Borlaf, lo nombra jefe del grupo, ante la renuncia del voluntario Narciso Casamayor.

Con fecha 16 de Septiembre de 1929 es elegido Teniente Segundo, falleciendo como tal el día 9 de Marzo de 1930.

El Mártir Luis Aixalá Plubins constituye un caso inédito en la historia de los bomberos de Chile, pues perteneciendo al Cuerpo de Bomberos de Santiago, encontró la muerte durante el combate de un incendio en la ciudad de Valparaíso.

El Teniente 2º de la Décima Compañía de Bomberos "BOMBA ESPAÑA" de Santiago, don LUIS AIXALA PLUBINS, había asistido a Valparaíso a participar en el ejercicio que la Séptima Compañía de Valparaíso había organizado para recibir al buque Escuela "Sebastián Elcano" en el que participaron ambas Compañías hispanas el 9 de marzo de 1930.

Una vez en el Cuartel de la Séptima, ya acabados los festejos, y cuando la delegación de la Décima se despedía de sus hermanos porteños, sonó la alarma de incendio, y el teniente Aixalá, sin vacilar, tripuló el carro que lo conduciría al lugar donde hallaría la muerte. Eran las 21:00 horas.

El gran incendio, que afectaba a varias viviendas en el cerro Bellavista, obligó a efectuar una rápida armada, la cual se realizó por la escalerilla de gatos ubicada en medio del ascensor Yungay, (hoy "Espíritu Santo"), luego de ordenar a la empleada del ascensor que por ningún motivo pusiera en marcha los carros. Pero al llegar al sitio siniestrado y disponerse a atacar el incendio, un error de los operarios puso en marcha los carros del ascensor. El voluntario Ibarra de la Séptima, que estaba al pitón, logró asirse del cable del carro, siendo arrastrado por éste resultando solo con lesiones. Pero el Teniente Aixalá, que avanzó tras el pitonero, no alcanzó a reaccionar, siendo arrollado por uno de los carros.

Queda registrado en la historia que los primeros auxilios se los entregó un doctor de apellido Betzhold siendo trasladado inmediatamente a la Clínica Española.

La muerte le sobrevino por ruptura de un pulmón, su vejiga, cadera y órganos vitales, a las 23:40 horas del mismo día.

El Cuerpo de Bomberos de Valparaíso se hizo cargo del traslado de los restos mortales del señor Aixalá hasta la ciudad de Santiago, expresando su malestar por tan lamentable hecho al Sr. Comandante del C.B.S. don Alfredo Santa María.

Recién el 28 de Octubre de 1997, el H. Directorio General del Cuerpo de Bomberos de Valparaíso acordó, en respuesta a la petición hecha por la "BOMBA ESPAÑA" de Valparaíso, nombrar al Sr. LUIS AIXALA PLUBINS como Mártir de la Institución. Lo anterior fue comunicado oficialmente a la 7ª de Valparaíso por carta del Sr. Superintendente de Valparaíso del día 4 de Noviembre del año. A su vez el 16 de Noviembre el Director don Manuel Rivero González le informa a la "BOMBA ESPAÑA" de Santiago tal nominación. El 13 de Noviembre se le recuerda por primera vez en Valparaíso como "Mártir del Deber.

Existe una antigua tradición en bomberos que expresa que al momento de su muerte un buen bombero debe "patear", lo que significa que se desatará un incendio de proporciones equivalentes a la calidad del voluntario fallecido.

Al morir Santaella estalló un incendio de proporciones mientras su cuerpo yacía inerte para congoja de sus compañeros.

Mientras se velaba el Cuerpo de Luis Aixalá en el Cuartel General, a las 3.05 horas estalló un incendio en Martínez de Rozas y Baquedano. Concurrieron 13 voluntarios décimos y 2 de la Séptima de Valparaíso.

El Cuerpo de Bomberos de Santiago debe sentir la muerte en acto de servicio de 40 voluntarios. LUIS AIXALA PLUBINS, siendo el primer mártir de la "BOMBA ESPAÑA" de Santiago, fue el Nº 12 del Cuerpo de Bomberos.