El Estado es responsable por acción
y omisión de la masacre
ocurrida el pasado 16 de mayo en Barrancabermeja
(Santander), así como de la “impunidad en la que permanecen los
autores y responsables de estos actos”, así lo señala el
fallo del Tribunal Internacional de Opinión (TIO), dado a conocer
ayer, exactamente un año después de la incursión paramilitar.
Como estaba previsto, después
de dos días de sesión, el TOI reveló las conclusiones
a las que llegaron nueve jurados y un fiscal, después de escuchar
los testigos, pero sin la versión del Estado colombiano, puesto
que el Gobierno se negó a enviar un representante defensor.
Además del fallo, el TOI entregó
once recomendaciones al Gobierno (ver nota anexa), sobre las que el presidente
del TOI, el italiano Giulio Gerardi, dijo “esperamos que las pongan en
práctica”.
La lectura del veredicto se produjo
sobre el mediodía, cuando los integrantes del TOI se instalaron
en una tarima improvisada sobre un camión, en frente a las instalaciones
de la Unión Sindical Obrera (USO).
Consideraciones del fallo
El primer interrogrante que se planteó
el TOI fue, si el Estado colombiano tenía alguna responsabilidad
por acción en la masacre y desaparición de las víctimas.
En este sentido, el TOI determinó
que miembros de las Fuerzas Armadas (Ejército y Policía),
junto con civiles hicieron parte del grupo de personas que realizó
la masacre.
Manifiesta el fallo que los testigos
oculares han ofrecido suficiente información fiable, mediante la
que pueden identificarse algunos agresores como miembros del Ejército
y la Policía.
“Algunos de los testigos se han referido
a oficiales del Ejército como colaboradores activos de la acción
criminal... calificamos estos crímenes como de lesa humanidad,
a causa de la participación activa del Estado en los mismos “, dicen
apartes del fallo, que sustentan la responsabilidad del Estado por acción.
La segunda cuestión que el
TOI pretendía aclarar era si había responsabilidad del Estado
por omisión durante la incursión paramilitar al Puerto Petrolero.
Sobre este punto, el Tribunal sostiene
en su veredicto, que ha quedado probado que las Fuerzas Militares de las
guarniciones cercanas a los lugares de los hechos nada hicieron para impedir
que se perpetrara la masacre.
“Ha quedado probado que los disparos
efectuados por el grupo atacante a la población civil tuvieron que
ser claramente escuchados por los militares de la guarnición y,
sin embargo, nada hicieron ante ellos”, señala el fallo.
Igualmente, el Tribunal señaló
que se probó la imposibilidad que tenían los atacantes de
salir y entrar a los barrios donde se cometieron los asesinatos sin que
fueran vistos por la Fuerza Pública.
“La responsabilidad del Estado no
sólo es negativa a raíz de la no actuación de sus
agentes, sino activa”... Estamos hablando de coautoría y no de desentendimiento,
dice la decisión.
En cuanto al tercer y último
punto, que pretendía establecer si había “responsabilidad
del Estado en la impunidad en que permanecen los autores y responsables
de la masacre”, el TOI consideró que “una vez valoradas todas las
pruebas presentadas... el Tribunal estimó que el Estado de Colombia
es responsable de la impunidad que se mantiene con respecto a los hechos
criminales que ocurrieron en Barrancabermeja ese 16 de mayo”.
Once recomendaciones para el
Gobierno
Barrancabermeja
Además del fallo de responsabilidad,
el Tribunal Internacional de Opinión (TIO) dio las siguientes once
recomendaciones al Estado colombiano, dentro de las actuaciones que se
adelantan por la masacre en el puerto petrolero:
“1. Instamos al Estado colombiano
a que identifique, juzgue y castigue a los autores del asesinato de las
siete personas y de la desaparición forzada de las 25.
2. Instamos al Estado a que de manera
pronta y urgente informe sobre el paradero de las 25 personas desaparecidas
y proceda a restablecer su derecho a la libertad.
3. Instamos al Estado a que proceda
a separar del cargo a los miembros de la Fuerza Pública que de forma
directa o indirecta han participado en la ejecución de los crímenes
de lesa humanidad.
4. Instamos al Gobierno a que cumpla
los compromisos asumidos que negoció en la Comunidad Internacional
y que se encuentran en la Declaración del Presidente sobre Colombia,
en el 55 período de sesiones de la Comisión de Derechos Humanos
de la ONU en Ginebra. Especialmente, instamos al Congreso de la República
que legisle con el propósito de criminalizar desapariciones forzadas
y que esa ley esté de conformidad con los instrumentos internacionales.
5. Instamos al Estado, que desde hace
décadas ha impulsado y tolerado a los grupos paramilitares, a que
los declare ilegales y los desmonte.
6. Instamos al Estado a que juzgue
a los militares culpables de delitos no típicamente del servicio,
ante los tribunales civiles y que esto sea el primer paso para la supresión
del Fuero Penal Militar.
7. Instamos al Estado a que indemnice
a los familiares de las víctimas de Barranca y que facilite asistencia
sicológica y otros servicios para que puedan superar los traumas
por la violencia.
8. En vista del riesgo en que se encuentran
quienes han denunciado y testificado, instamos al Gobierno a que presione
a las autoridades de Santander con el fin de que éstas garanticen
la vida, integridad y libertad de quienes han concurrido ante este Tribunal
y ante las autoridades de este país.
9. Instamos al Gobierno a que brinde
la debida protección a los defensores de derechos humanos.
10. Urgimos a la alta comisionada
de las Naciones Unidas a que apoye los proyectos de las organizaciones
base que luchan contra la impunidad en Colombia, particularmente urgimos
su colaboración con el proyecto Nunca Más.
11. Urgimos a las ONG internacionales
a divulgar los documentos de este Tribunal Internacional de Opinión
en sus publicaciones nacionales e internacionales y en los medios de comunicación.”