Al margen de lo que sucedió en el juego, el partido de ayer fue el último con la camiseta verdiblanca de dos auténticas leyendas ya de este club: Facundo Salinas y Carlos López. Los dos argentinos decidieron cambiar de aires, y el primero luchará la próxima temporada por los colores del Barcelos, mientras que Carlos López se pasará a las filas del verdugo ayer del Liceo, el Barcelona.
El Barcelona, que ya está en la final, salió enchufado. Le dio igual el 2-0 a favor con el que llegaba al Palacio y las tres oportunidades que le quedaban para acabar con el Liceo. No quiso esperar y a la primera tumbó a los verdiblancos. Si los primeros 25 minutos de los coruñeses son para olvidar, los de los catalanes son para enmarcar. Su tremenda efectividad en ataque -lanzaron ocho veces entre los tres palos y marcaron cuatro goles- fue demoledora.
Su defensa, agresiva, extenuante, asfixiante..., fue siempre un muro infranqueable para los verdiblancos. A Carlos López, bien sujetado por José Luis Páez y Benito, ni se le vio, y el único que hacía levantar al respetable de sus asientos era Jordi Bargalló, pero él sólo no podía con todo el Barcelona.
A los ocho minutos, los catalanes ya inclinaron la balanza de su lado. Dos goles de Borregán acallaban al Palacio y la efectividad visitante también: tres disparos, dos tantos. El Liceo intentó despertar, pero Carlos López falló dos claras ocasiones en los minutos 9 y 11. Quien no lo hizo fue el Barcelona que gracias a David Páez subía el 0-3 en el 14. A partir de ese momento el Liceo desapareció y no volvió a generar una oportunidad hasta diez minutos después. El empuje catalán era tan grande que obligaba a recular a los liceístas junto a su portería. Francesc Bargalló tuvo la oportunidad de que la épica se asomase a Riazor, pero falló un penalti a falta de dos minutos para el descanso. En la jugada siguiente, David Páez daba la puntilla. El Barcelona marcaba su cuarto gol tras una fase de dominio brutal de los visitantes.
El descanso sirvió para que los verdiblancos se acabasen en el vestuario toda la empanada que les quedaba. Nada más ponerse la bola en juego, el Liceo ya era otro y a los 14 segundos Jordi Bargalló marcaba el 4-1. Parecía que podía haber remontada, pero fue un espejismo. Salinas se autoexpulsó con una roja directa y en el 37 Masoliver machacaba a la contra. El resto ya sobró, aunque también sobró la segunda parte. O visto como fue la primera, llena de despropósitos liceístas y superados por un Barcelona muy superior, hasta también sobró. No fue una digna despedida de temporada.
FC Barcelona: Egurrola, Benito, David Páez, Borregán, J.L. Páez -cinco inicial-, Masoliver, Panadero, Cairo.
Arbitros: Fran García, de Galicia, y Luis Delfa, catalán. Roja directa a Salinas y al preparador físico del Liceo, Pablo Arias.
Incidencias: Tercer partido del playoff de semifinales de la OK Liga, disputado en el Palacio de los Deportes de Riazor ante unos 3.500 espectadores.
Gol | Minuto | Jugador |
---|---|---|
0-1 | 5 | Borregán |
0-2 | 8 | Borregán |
0-3 | 14 | David Páez |
0-4 | 23 | David Páez |
1-4 | 26 | Jordi Bargalló |
1-5 | 37 | Masoliver |
2-5 | 42 | Carlos López |
2-6 | 49 | Borregán |