14 de enero de 2001
Siempre había oído hablar del Congost de Montrebei pero nunca había
llegado a comprender lo que me podría haber perdido hasta que fui a
verlo. Cuando unos amigos me hablaron de hacer una excursión, la que
fuera, típica de paseo, automáticamente pensé en ese lugar. Había
llegado el momento de ir allí.
Me estudié las posibilidades,podíamos enfocar la caminata por el norte
pasando de largo el Embalse de Cellers (Terradets), pero ese recorrido
era muy corto para llegar al congost, apenas 10 minutos a pie. La
segunda alternativa es la mas idónea, la Nacional II hasta tomar el
desvío de Balaguer y de allí, bordeando el embalse de Camarasa, al
dejar atrás la Baronía de Sant Oïsme, giramos a la izquierda. Después
atravesamos la población de Ager hasta llegar a Agulló donde dejamos
el coche.
Iniciamos la excursión por una pista forestal ancha y bien preparada
donde encontramos las marcas del GR-1 que nos acompañarán durante todo
el recorrido.Algunos se atreven a llevar el automóvil hasta la cercana
Ermita de la Pertusa, pero la verdad es que son solo 30 minutos a pie
y de lo mas agradables.Al llegar a la comentada ermita nos encontramos
con la primera sorpresa del día al estar enclavada en medio de un
risco que, a priori, parece de difícil acceso pero que comprobamos no
tiene ninguna dificultad cuando nos introducimos en él. Ese risco se
adentra en el Embalse de Canelles dándonos una imagen espectacular de
todo el lugar.
No he podido evitar fotografiar todo el conjunto y exponerlo en
primera plana en esta hoja; os podéis hacer una idea si miráis la
composición que he hecho de ese lugar mas arriba. Encima de la imagen
de los compañeros de excursión podéis encontrar el risco y la ermita.
No es muy nítida pero a la derecha la veréis centrada y aumentada.
A partir de ese momento el camino se estrecha y nos adentra en la
pequeña franja de tierra que se introduce en el espacio que deja el
Noguera Ribagorzana a la derecha y la Sierra del Monsec d'Ares a la
izquierda. Seguimos hacia el nortes por un sendero con pocas
dificultades que va atravesando pequeños barrancos hasta llegar al
Congost de Seguer, anuncio del precioso Congost de Montrebei. Si
afinamos la vista podremos ver, a la izquierda y al lado del Noguera
Ribagorzana, una extraña roca que se alza entre los pequeños árboles.
Se asemeja a una calavera humana pero os aseguro que no es ninguna
señal de mal augurio. En el reportaje fotográfico que he hecho de
esta excursión la podéis encontrar en segundo lugar.
Unos centenares de metros mas y nos topamos con las denominadas
"Paredes o caras de Aragón y Catalunya", que no son otra cosa que los
límites verticales y enfrentados del Montsec de l'Estall y del Montsec
d'Ares, separados por el río. He de indicaros que esas dos sierras
forman un todo con una tercera llamada Montsec de Rúbies y que está
separada de la de Ares por el Noguera Pallaresa que las divide.
A partir de ese momento iniciamos el recorrido propiamente dicho de
Montrebei, por un itinerario excavado en 1929 en la vertiente d'Ares,
a la derecha del Ribagorzana. Pongamos en tensión todos nuestros
sentidos y empapémonos de la belleza del lugar, el camino tiene un par
de metros de ancho y la pared de Aragón se encuentra tan cerca que
casi podríamos tocarla extendiendo el brazo. Tres kilómetros que se
nos hacen cortos a pesar de la infinidad de veces que nos detenemos a
fotografiar las escarpadas rocas, los enormes buitres y el curioso
túnel que aparece en medio del recorrido. Poco a poco las paredes se
van separando hasta llevarnos al Barranco de la Sangonera donde
encontramos un curioso puente colgante.
En total hemos empleado 3:30 h. desde que dejamos el coche en Agulló y
emplearemos 2:30 para volver a esa población. Hay que tener en cuenta
que a la vuelta no nos entretuvimos en visitar la ermita y su
laborioso acceso, tampoco hicimos fotos ni nos detuvimos tanto al
volver a atravesar el congost.
Id, os aseguro que os gustará
Mapa recomendado: Alpina - El Montsec
Presiona aquí para ver el recorrido fotográfico de esta travesía:
Congost de Montrebei
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