Si no un escándalo, por lo menos, una nueva sorpresa viene a ser la confirmación personal del señor Adam Pollack como asesor del presidente Toledo en materia de inversiones extranjeras.

El señor Pollack es judío. También es acompañante insustituible del presidente en todos sus viajes gratuitos al exterior.

Por lo tanto, tenemos a otro extranjero que participa en los asuntos del Estado peruano y se pasea por los pasillos de palacio, como Juan en su casa. Primero fueron los consejeros chilenos, ahora es el señor Pollack.

La sorpresa que nos causa la intervención de extranjeros en nuestro país tiene dos preguntas rápidas. Primera: ¿Quiere decir que entre los profesionales peruanos no hay nadie con la capacidad suficiente para asesorar al presidente Toledo?. Y segunda: Por más que sea ad honorem ¿no constituye un riesgo tener a un extranjero compartiendo las políticas del gobierno en cualesquiera de sus áreas?.

Porque es un hecho que estos señores participan en los consejos de Ministros, en reuniones privadas entre algunas autoridades gubernamentales, o con el mismo presidente para tratar asuntos internos del país.

¿Cómo pudo ser posible que hubiera chilenos en el entorno presidencial en momentos en que las relaciones entre algunos de los ciudadanos del pais del sur y el nuestro son tensas; se ve por televisiòn que los inmigrantes peruanos sufren mil afrentas en Santiago de Chile?.

En la Universidad de Milán trabaja una economista, la doctora Isabel Recabarren, que podría desempeñarse diez veces mejor que diez Pollack juntos. ¿Por qué, por ejemplo, no tratan de convocrla?. Ella sabe demasiado de inversiones extranjeras, pero, sobre todo, es cien por ciento peruana. Sería una asesora de lujo.

Volviendo a Pollack, los periodistas Alvaro Vargas Llosa y Nicolás Lúcar, en sendas informaciones, pusieron en tela de juicio la honorabilidad de este señor. Elsa Ursula afirmó en uno de sus reporajes televisivos que el citado señor es un hombre de negocios quebrado, con deudas bancarias y, por esas razones de finanzas, hasta expulsado de su país, Israel.

Pollack enjuició a Vargas Llosa por difamación, pero según el joven periodista, fue declarado inocente de haber cometido semejante delito contra el judío. En una entrevista de Pollack con Jaime de Altahus se le vio trastabillando, enfureciéndose y hasta casi yéndose de bruces ante la andanada de preguntas de Vargas Llosa.

Tal vez la influencia de Pollack, declarado por el mismo, amigo íntimo del presidente Toledo ha influído suficientemente para hacer que la nueva administración del Canal 4 liquide el programa "La Revista Dominical" donde apareció el reportaje sobre la vida y milagros de dicho empresario; y en el progama del domingo 3 de junio –según se había informado- habría aparecido un punzante reportaje sobre retazos de la vida de Elliane Karp. Lo que se está haciendo ahora con la prensa televisiva, ¿no será calco y copia de las tácticas montesinistas acremente descalificadas por tirios y troyanos?.

No olvidar que la señora Karp y el señor Pollack, no sólo son amigos íntimos, sino también paisanos, tienen la misma nacionalidad incambiable asi adquirieran la nacionalidad peruana. Mientras esas lucubraciones, ellos siguen gozando del entorno presidencial, como si fueran miembros natos.