Carmen Maura

Home Atrás

 


Era su otro yo
Si hay que hablar de la gran musa del director de 'Mujeres...', ésta es sin duda Carmen Maura. Ella ya aprecía en la primera película de Pedro, 'Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón', y su presencia era obligada en cada una de ellas hasta 'Mujeres...', la última cinta en la que intervino antes de su separación como dueto artístico. Sus carreras corrían paralelas. Maura interpretó cinco películas a sus órdenes, en las que daba vida a mujeres solitarias que acostumbraban a estar en crisis. En plena movida madrileña, participó en 'Pepi, Luci...', donde daba vida a una actriz fumadora de porros, y que es violada por un policía; y ella, cual Charles Bronson, se venga, aunque de una manera un tanto peculiar. Después fue Sor Perdida en 'Entre tinieblas', en la que, tal y como su nombre indica, daba vida a una monja que no tenía nada claro esto de dedicarse al celibato y a la pregaria. Un pequeña intervención en 'Matador', y de nuevo otro protagonista, un papel de los llamados bombón, el de '¿Qué he hecho yo para mercer esto?'. En ella daba vida a una ama de casa harta de su vida, de la suegra, del marido que la maltrata, un papel que le iba que ni pintado y en el que demostró su gran valía como actriz. Cosa que volvería a hacer de nuevo en 'La ley del deseo', donde le confió el papel de un transexual después de desechar a Bibi Andersen porque "quería una mujer que representara la feminidad exagerada, crispada y exhibicionista de un transexual, y eso sólo lo podía hacer una mujer como Carmen". Del film siempre quedará la imagen de ella en la calle, con un calor asombroso, y que aprovechando la presencia de los servicios de limpieza de calles, decide que le den un buen baño con el agua para regar. Un papel difícil en el que aprobó con sobresaliente. Y para rematar la jugada, dio vida a Pepa, la protagonista de 'Mujeres...', un papel que el director afirmaba que estaba muy cercano a Carmen: el prototipo de mujer moderna que reivindicaba su independencia, pero simpre en pleno conflicto con sus sentimientos. A partir de ese momento sus caminos se separarían -dicen que por culpa de Pedro, que no quiso que se sentarán juntos en los Oscar de 1989, ya que la peli estuvo nominada-, y es posible que no se vuelvan a encontrar, aunque nunca se sabe.

1