Confidencia
El cielo transparente
de esta tarde de julio
que nace en las veredas
me entibia la piel,
tras los cristales
que guardan mi estructura,
rayo de luz
bajando hasta mis manos
que huelen al perfume del recuerdo.
déjame que te cuente
mientras gasto
en las frías mañanas de este invierno,
mi pensamiento ansioso de encontrarse
con esa voz que quiero.
Déjame que te cuente
lo pronto que ha llegado
hasta mi vida
ansiosa de esperar y no tenerle,
que quiero mirarle así, de frente,
tomada de su mano, por la calle,
gorrión apretándome a su pecho
que me ame y me proteja.
Déjame que te cuente
que aún es tiempo
de olvidar lo que no tuve nunca,
hilo de seda, la caricia trunca
que guardo en un bolsillo de mi saco.