POEMA 4 Arden dos ramas en medio del patio. Este domingo tiene aquellas escaras donde era creíble el paraíso.
Alguien hace el amor con una extraña en el recodo de girasoles. Después duermen ajenos a lo temido a lo no amado.
La resistencia de los cuerpos ofrece a la tierra graníticos sudores.
Se hace posible esta noche rastrillar un laberinto. |