Introducción.
La mayor parte de la población
ha tenido su primera experiencia informática en la escuela
o en los campus universitarios. Dicha experiencia supone el aprendizaje
del funcionamiento de los principios que regulan la máquina
y supone un choque frontal con una cultura extraña. Con
el tiempo los ordenadores han modificado muchas de nuestras actividades
cotidianas (la compra de entradas para espectáculos, las
gestiones en el banco y numerosas tareas administrativas), casi
todo se realiza hoy día mediante tecnología que
trata grandes volúmenes de información y que permite
acceder al dato necesario desde cualquier punto y a cualquier
hora. El crecimiento de la tecnología de los ordenadores
se ha visto acompañada de un incremento del número
de individuos que se muestran ansiosos o intimidados frente a
los ordenadores. Algunos autores consideran la ansiedad frente
a los ordenadores como el resultado de un dialogo interno subyacente
al sistema de creencias, acciones y conductas movilizadas en el
trabajo con un ordenador.
Se puede considerar que el 25% de los
usuarios sufren "computerphobia" leve y un 5% se ve
afectado por la forma mas severa de este trastorno. Según
la experiencia de los autores el 32% de los sujetos no graduados
sufría estos problemas y un 55% de una muestra de adultos
informó sentirse intimidado por los ordenadores.
La alfabetización en el uso
de ordenadores ha llegado a ser un importante factor en el éxito
académico, sin embargo entre algunos estudiantes aparece
el handicap de la ansiedad frente a los ordenadores.
Desde hace tiempo se ha relacionado
la ansiedad en el uso de ordenadores con la ansiedad frente a
las matemáticas y las actitudes hacia las actividades numéricas
y de cálculo en general. Investigaciones anteriores señalaron
algún tipo de relación entre el éxito en
el uso de ordenadores (Fennema & Sherman, 1976) y con el nivel
de ansiedad general (Betz, 1978). Respecto a este último
punto parece jugar un especial papel la variable de la autoconfianza
o seguridad en sí mismo.
Otros autores han evaluado la influencia
del locus de control frente a la interacción con un ordenador
hipotetizando como los sujetos de control externo se beneficiaría
de aquellos programas que marcan de modo automático el
ritmo del trabajo, en tanto que los sujetos con un control interno
preferirían aquellos programas en los que el usuario dispone
de un mayor grado de influencia.
Definición
de alfabetización informática.
Abarca cuatro áreas fundamentales:
Tipología según el usuario
(Lerer, N., 1987).
La percepción del ordenador
varía en función de los conocimientos y la experiencia.
De este modo los tres primeros grupos percibirán el ordenador
con características mas personales, en tanto que los dos
últimos tenderán a ver una máquina limitada.
Criterios para el diagnóstico de la ansiedad ante los ordenadores (Maurer & Simonson, 1984).
Definiciones y consideraciones de la ansiedad
ante el ordenador.
(Powers, 1973) la definió como
los cambios en cuatro medidas fisiológicas entre las que
destaca la presión arterial y la frecuencia cardíaca,
cuando los sujetos interactúan con un ordenador.
(Ahl, 1976; Coovert & Goldstein,
1980; Raub, 1982; Reece Gable, 1982) Consideran que las actitudes
hacia los ordenadores se hallan en la base de estas dificultades.
Un tercer grupo de autores pone el
énfasis en elementos de tipo afectivo (Heinssen, Glass,
& Knight, 1987; Jay, 1985; Loyd & Gressard, 1984; Rohner
& Simonson, 1981) tales como el temor, la aprensión
y el miedo subjetivo.
Modelo descriptivo de la ansiedad ante el
ordenador.
Modelo de ansiedad ante el ordenador
basado en los dialogos internos (autoinstrucciones) de Meichembaum,
creencias subyacentes y comportamientos específicos frente
al ordenador.
Se encontraron diferencias estadisticamente
significativas en los cuatro factores implicados en el modelo
descrito. En el área de los dialogos internos se encontraron
evidencias de que los sujetos ansiosos frente al ordenador evaluaban
peor su ejecución de tareas informáticas que los
sujetos no ansiosos, apareciendo de modo concomitante pensamientos
negativos respecto a su ejecución. Los sujetos ansiosos
presentaron también diferencias estadísticamente
significativas relacionadas con la frecuencia de pensamientos
desvalorativos hacia sí mismos y en especial en lo relativo
a aquellos temas que hacía referencia a su ejecución
personal en cualquier area.
Respecto al tercer factor implicado
en el trabajo se pudo comproar como los sujetos mas ansiosos eran
los que tenían menos experiencia con ordenadores e intereses
mecánicos mas bajos. Por último cabe destacar como
los sujetos con mayor ansiedad ante los ordenadores presentaron
mayor número de indicadores de arousal fisiológico
y mayor sensación subjetiva de ansiedad, pese a que el
número de errores no fue estadísticamente significativo.
Sugerencias
para el tratamiento.
Los tratamientos para hacer frente
a este problema deberán intervenir en diferentes puntos.
En primer lugar deberán contemplar una reestructuración
cognitiva y la utilización de técnicas de relajación
que contribuyan a la modificación del sustrato cognitivo
básico en el origen de estas dificultades. Por otra parte
la introducción de elementos educativos relacionados con
el manejo de ordenadores contribuirán a paliar esta situación.
Un porcentaje importante de sujetos
podrían ser tratados mediante la exposición a los
ordenadores en situaciones que no estuvieran relacionadas con
su actividad (laboral o académica) y que por tanto fueran
conceptuadas como no amenazadoras. Quizá este punto pueda
quedar ilustrado por la facilidad con que se adaptan a los ordenadores
aquellos sujetos que anterioridad han utilizado videojuegos (exposición
en una situación de no riesgo).
Conclusiones.
La conclusión fundamental debe
situarse en el hecho de considerar la ansiedad frente a los ordenadores
como una forma muy específica de ansiedad ligada a un objeto,
extendida pero de intensidad moderada.
Difícilmente encontraremos auténticos
sujetos fóbicos en relación a los ordenadores y
probablemente los casos que se den estarán muy mediatizados
por variables caracteriales. No obstante la comodidad y seguridad
frente a la utilización de ordenadores debería preocupar
a los responsables organizativos por una doble vertiente ; la
salud laboral y la productividad. Ambos elementos justifican el
desarrollo de programas, no sólo de formación, encaminados
a integrar las modernas tecnologías en todos los niveles,
otorgando un especial énfasis a la modificación
de actitudes (técnicas cognitivas) y a la formación
en conceptos de base que permitirán huir de situaciones
de indefensión percibida, que se dan cuando la formación
es parcial y ligada a actividades específicas. La introducción
de entornos gráficos puede ser una medida, que si se ve
acompañada de las correspondientes precauciones formativas,
reducirá de modo notable este tipo de trastornos.
No obstante la renovación del
equipamiento informático suele considerarse por gestores
y administradores como una prioridad de nivel terciario, cuando
no como una veleidad. No resulta extraño ver en la actualidad
sistemas informáticos a "pleno rendimiento",
que conocieron su esplendor hace cinco o tal vez mas años,
muchas veces tenemos la impresión de que algunos administradores
consideran que la microinformática todavía se basa
en el chip Intel 80286, ignorando la aparición de cuatro
generaciones de microprocesadores que han posibilitado los actuales
entornos, pletóricos de botones, íconos y donde
el usuario no debe esforzarse en comprender y memoriazar una serie
de convencionalismos dignos de otra época, en suma un avance
que permite al individuo concentrarse en su tarea y no en "lo
que debe hacer" para hacer su tarea.