12. Tratamiento de la hidrocefalia

 

Frecuentemente se trata solo el síntoma y solo ocasionalmente la causa; cuando sea posible se debe tratar la causa, por ejemplo un tumor que obstruye la circulación de l LCR o la repermeabilización de una estructura normalmente abierta.

 

Al tratamiento, generalmente quirúrgico, se asocia un tratamiento médico temporal para disminuir la evolución de la hidrocefalia. Este tratamiento basado en la acetazolamida y la furosemida (ambos inhibidores de la anhidrasa carbónica por mecanismos diferentes) debe ser transitorio y es ineficaz a largo plazo.

 

Igualmente las punciones lumbares evacuantes , son de gran ayuda en el tratamiento temporal de la hipertensión por hidrocefalia comunicante.

 

12.1 La derivación externa del LCR

 

Consiste en colocar un cateter ventricular (generalmente en el cuerno frontal derecho) conectado a un sistema externo, con control por columna hidrostática del débito de LCR a ser drenado.

 

Es una solución de espera usada en los casos de hidrocefalia temporal en la HSAE aguda y en el tratamiento de una sobreinfección de sistemas de derivación. Posteriormente algunos de estos pacientes necesitarán una derivación definitiva del LCR.

 

Puede servir también para la conexión de un sistema de monitoreo y vigilancia de la PIC, en pacientes donde para indicar la colocación de una derivación definitiva necesita argumentos mas sólidos que el simple cuadro clínico.

 

12.2 Ventrículocisternostomía bajo control endoscópico

 

Es el tratamiento de primera elección en la estenosis del acueducto de Silvius y consiste en comunicar, bajo control visual endoscópico, el III ventrículo con los espacios subaracnoideos de la base a nivel de la cisterna interpeduncular.

 

 

Vision endoscópica del foramen de Monro y

el plejo coroide en el ventrículo lateral

 

Su ventaja consiste en evitar el implante de una prótesis de derivación pero requiere que los sitios de absorción de LCR estén permeables.

 

Es de elección también en el tratamiento de los quistes aracnoideos supraselares y de la sisura tentorial, ya que se puede comunicar el quiste que produce la obstruccion, con el sistema ventricular directamente.

 

12.3 Las derivaciones internas

 

Permite establecer una comunicación entre los ventrículos y una cavidad interna, por medio de un catéter con o sin interposición de una válvula subcutánea, reguladora de presión. La selección de la cavidad (peritoneo, aurícula derecha, pleura, vejiga, vesícula biliar) depende de cada paciente.

 

 

 

 

12.4 La derivación lumbo-peritoneal

 

La comunicación de los espacios subaracniodeos lumbares con la cavidad peritoneal, es de utilidad solo en las hidrocefalias comunicantes. Se le acusa en varias publicaciones de favorecer la migración transforaminal de las amígdalas cerebelosas.

 

<Tabla de contenido>

1