“El Bodhisattva Fukyo del remoto pasado aseguró que todas las personas poseen la naturaleza de Buda y si abrazan el Sutra del Loto, sin falta lograrán la Budeidad. Además expresó que despreciar a una persona significa despreciar al mismo Buda. De esta manera, su enseñanza se basaba en el respeto a todas las personas. El también respetaba a aquellas personas que no creían en el Sutra del Loto porque ellas también poseían la naturaleza de Buda y, podrían algún día, creer en el Sutra. Por lo tanto, es más que natural respetar a los sacerdotes y a las personas laicas que han abrazado el Sutra del Loto”.
The Major Writings of Nichiren Daishonin, Vol. III, pág. 205
Antecedentes
Nichiren Daishonin escribió esta carta en el Monte Minobu, en diciembre de 1276, dos años y medio después de haberse retirado a ese lugar. Fue dirigida a Matsuno Rokuro Zaemon Nyudo, quien vivía en la región de Matsuno, provincia de Suruga (Shizuoka-ken) en respuesta a una pregunta que él le había hecho al Daishonin acerca de la práctica del Sutra del Loto: ¿Existe alguna diferencia entre los beneficios del daimoku de una persona sabia y los del daimoku de una persona común? Este gosho, también es llamado “Las catorce calumnias”.
Puntos principales
@ No existe ninguna diferencia entre los beneficios del daimoku de una persona sabia y los del daimoku de una persona común.
@ Sin embargo, para aquellos que practican desobedeciendo el espíritu del Sutra del Loto, en otras palabras, cometen alguna de las catorce acciones contra la Ley, los beneficios se extinguen. Es ahí donde radica la diferencia entre los beneficios.
@ No deber despreciar o calumniar por ningún motivo a una persona que cree en el Sutra del Loto ya que todas las personas vivientes poseen la naturaleza de Buda.
@ En lo que respecta a la Ley budista, debemos tratar de aprender de las personas aunque sepan sólo un poco más que nosotros, sin tener en cuenta su apariencia o su posición social y practicar con un espíritu de total consagración, tal como lo hizo Sessen Doji, quien ofrendó su vida al demonio para recibir un verso de una enseñanza budista y alcanzar la iluminación.
@ Los sacerdotes que no estudian la Ley budista, no refutan la calumnia, no se esfuerzan en la propagación y se dedican a la diversión, son animales vestidos con la piel de maestro de la Ley. De ninguna manera son verdaderos maestros de la Ley.
@ Si cantamos daimoku y nos esforzamos en propagar la Ley con nuestra capacidad, sin falta lograremos la Budeidad.
@ Catorce acciones contra la Ley: 1) arrogancia hacia el Budismo; 2) negligencia en la práctica budista; 3) juicio arbitrario y egoísta sobre las enseñanzas budistas; 4) conocimiento superficial y “autocompla-ciente”; 5) apego a los deseos mundanos; 6) falta de espíritu de búsqueda; 7) falta de fe; 8) censura; 9) duda infundada; 10) calumnia; 11) desprecio por los creyentes budistas; 12) odio hacia los creyentes; 13) envidia a los creyentes; 14) rencor hacia los creyentes.
Las diez primeras son acciones contra la Ley, y las cuatro últimas, contra aquellos que la abrazan.
Explicación
“El Bodhisattva Fukyo del remoto [...] se basaba en el respeto a todas las personas.”
Este párrafo sobre la práctica del
Bodhisattva Fukyo, quien en una existencia posterior renacería como Shakyamuni.
Su práctica consistía en recitar la siguiente enseñanza para todas las
personas: “Yo los respeto a todos ustedes profundamente y jamás los
menosprecio. ¿Cuál es la razón? Si ustedes realizan la práctica del
camino del Bodhisattva, sin falta podrán lograr la Budeidad (Kaiketsu,
pág. 567)”.
Esta enseñanza consta de 24 caracteres,
y en ellas está condensado el espíritu del Sutra del Loto, por eso se
la denomina “el sutra de los 24 caracteres”. La esencia del Sutra del
Loto nos enseña que, todos los seres vivientes, sin excepción, poseen
la naturaleza de Buda. La mejor forma de respetar la grandiosidad de la
vida y la dignidad de cada persona es el espíritu fundamental de la propagación
(shakubuku).
Cuando hablamos de Nam-myoho-rengue-kyo
con otra persona, reconocemos el estado de Buda de esa persona, y es la
conducta para que se manifieste; por eso, hablar sobre la Ley Mística
es la “práctica de venerar” en esta época.
“El también respetaba a aquellas personas [...] las personas laicas que han abrazado el Sutra del Loto.”
El Bodhisattva Fukyo creía firmemente
en la Budeidad inherente a todas las personas, a tal punto que, también
veneraba a las personas que lo perseguían. Por ello es natural que, en
concordancia con el comportamiento del Bodhisattva Fukyo, por sobre todas
las cosas, respetemos a los creyentes de la Ley Mística.
En este gosho, Nichiren Daishonin
nos advierte sobre las catorce acciones contra la Ley. Con respecto a las
cuatro últimas, nos amonesta severamente acerca de calumniar, guardar
resentimiento, odio o envidia hacia nuestros compañeros de lucha, creyentes
del Budismo Verdadero. En la página 1382 de este gosho está escrito:
“Aquellos que mantienen su fe en el Sutra del Loto son ciertamente Budas,
y cualquier persona que desprecie a un Buda comete una grave ofensa”;
es decir, como consecuencia de haber actuado en contra de la Ley, todos
los beneficios se desvanecen.
En la revista Daibyakurenge de mayo,
el Dr. Daisaku Ikeda explicó acerca del Capítulo Fukyo del Sutra del
Loto (Cap. 20: “El bodhisattva Jamás Despreciar”): “El respeto
genera más respeto y el desprecio provoca más desprecio... Aquellas personas
que respetan de corazón a sus compañeros de lucha poseen una grandeza
de espíritu”.
Respetando y protegiendo a todos los
miembros de la S.G.I., ¡avancemos esforzándonos en la práctica para
la propagación del Budismo Verdadero!
Daibyakurenge, agosto de 1998, pág.
43 a 45.