Nos perdemos a veces en la búsqueda de cosas nuevas dando vida a respuestas inesperadas. si es necesario encontrar un sentido, lo lógico sería buscarlo en frases existentes, en ideas plasmadas en tinta y papel por otra persona. Aún así mis trémulas manos siguen escribiendo palabras que desconozco si ya han sido habladas por alguien más en algún otro momento o en algún otro lugar, buscando incansablemente una explicación a esta locura que no parece ser pasajera. Quisiera inventar la vida de nuevo para así asegurarme de que los errores cometidos dejarán de serlo porque tendrían un significado distinto, pero no puedo.
Es cierto entonces que la incapacidad para aceptar la realidad en que vivo me lleva a crear otra realidad que existe sólo en mi mente, si bien una idealidad. En esta idealidad soy el ente máximo de la creación; aún más, soy la creadora. todas las ideas pensadas, los sonidos escuchados, las imágenes vistas, las sensaciones, las percepciones...todas ellas me pertenecen a mí solamente porque en mi idealidad sólo yo existo, junto con la entidad, tal vez divina, que dio vida a esta creadora.
En mi idealidad no puedo hacer nada malo, nada reprobable, porque nadie me juzga más que yo misma y cuando no me gusta una regla del juego puedo cambiarla a placer sin ser criticada.
En mi idealidad cumplo todas mis expectativas y las supero. En mi idealidad satisfago mis necesidades y hasta las vuelvo placeres. En mi idealidad toto está cubierto por mí, porque yo todo lo hago.
En mi idealidad, mi necesidad creativa no me molesta más porque yo todo lo creo. Inventar y reinventar constantemente. Nunca me encuentro con el ocio, nunca con el hambre. Pero hay cosas que aunque quiera no pueden existir en mi idealidad porque faltan elementos para que conciba mi mente.
Si estoy sola en mi idealidad, ¿cómo puedo describir lo que ocurre dentro de ella? Es imposible. no hay nadie conmigo, pero no quiero salir de ella. Pienso si a caso es cierto que no se puede ser feliz del todo si se está solo, como en la realidad sucede. Sin embargo mi idealidad es tan bella. ¿Cómo dejarla y volver a la realidad? No estoy dispuesta a hacerlo.
Ahora soy una prisionera de mi mente. vivo encerrada en una idealidad inexistente. Existo sólo callada por una psicósis destructiva. estoy aislada y ni siquiera esquizofrénica porque en la idealidad no hay voces que me digan qué hacer. no hay paranoia porque en mi idealidad no existe quién me persiga. Eso es, estoy tras las barras creadas por mi misma y mi maldito pensamiento y esque en mi idealidad no existe nada que me impida salir excepto los muros construidos por mis torcidas ideas.
Si a caso aluien, alguna vez, en algún lugar se pregunta qué es lo que me impide dejar atrás la idealidad voy a responder ahora:
En la idealidad que pensé para mí a pesar de ser yo quien creó todo, me olvidé de inventar la capacidad de ser destructora. mis ideas son entonces muros inderribables y mis pensamientos barreras indestructibles.
Desaparezco de la realidad y me quedo en la idealidad para siempre...
Adriana L.A.G.