Querido Ed:
Hace varios meses atrás, cuando se publicó la carta de James Penn, le escribí a Sam Ajemian y a otros ex miembros una carta que decía en parte así:
"Los miembros que declaramos en Argentina, nos ajustamos estrictamente a la verdad y no hicimos declaraciones maliciosas ni que se pudieran malinterpretar, es más hay otros que no declararon por miedo pero que han vivido los mismo. Eduardo Lause (Benjamín Amor)"
Ahora he recibido tu carta y la que publicaste en tu página web.
Antes que nada me alegro que tengas una vida tan feliz junto a los tuyos y tan prolífica, yo también estoy muy feliz estudiando Derecho, trabajando en un estudio jurídico viviendo y disfrutando de la vida.
Bueno, paso a contestarte lo que me has escrito.
A pesar de que yo tengo algunas diferencias con Hugo Gabutti, (ya que él mira las cosas como policía), yo pretendo ser fiel a la verdad y lucho por mis convicciones, No le concedo el control de mis actos ni de mi pensamiento a nadie desde que salí de La Familia. No me explico cómo Ricky te puede haber dicho que Gabutti me amenazó, porque eso no ocurrió. Espero, y disculpa que sea sarcástico en esto, que no hagas como María y Peter que pusieron en boca de Rick después que murió palabras que el nunca había dicho.
Hugo Gabutti ha sido siempre un hombre muy honesto y luchó para mejorar las condiciones de los niños, Pero hay que tener en cuenta que Hugo Gabutti en realidad hizo todo el trabajo previo de investigación e inteligencia. Cuando se realizaron los allanamientos de los Hogares él ya no estaba al frente de los operativos. El juez Marquevich eligió a otro oficial, el comisario Rebollo, como encargado de los procedimientos.
Todo lo que declaré como testigo sobre la Familia ha sido y es la verdad. No lo hice por estar presionado por nadie. Mi intención era la de ayudar a todos los que permanecían dentro de La Familia engañados por un líder enfermo y manipulador, y para que, aunque siguieran dentro de la secta, tuvieran mejores condiciones de vida, en especial los niños.
También pretendía estar en paz conmigo mismo al dar a conocer los hechos reales..
Puedo tener muchas diferencias de opiniones con Hugo o con el Dr. Héctor Navarro, con quien también tenemos muchas discusiones (él fue perito en las causas de Rosario, Mercedes y San Isidro) y yo como ex miembro tengo a muchos amigos dentro de La Familia, gente a la que quiero mucho y que sé que ha sido sincera en su servicio a Dios aunque estuvieran en el lugar equivocado o hayan sido engañados. Pero no todos los ex son anti familia ni todos los ex persiguen los mismos intereses, así que en honor a la verdad voy a contestarte de la forma más honesta, sencilla y sincera, que es como yo soy en definitiva.
De acuerdo a lo que yo sé nadie mintió en Argentina. Estoy seguro de ello. Todos me parecieron honestos y muchos de los testimonios coincidían con lo que yo había visto, vivido y leído. Lo que le pasó a Mene me puso totalmente en contra de MO, porque además de que ella contaba que le hicieron, todo lo que dijo estaba confirmado por las cartas “El postrer estado”. ( AHORA ESTÁ EXPURGADA) y las cartas de educación juvenil de la tía Chrystal, en la que, si bien trataban de justificarlo, no ocultaron nada.
Sobre lo que no tengo una real confirmación, y quien lo podría hacer está muerto para preguntarle, es por lo que dijo Rick Dupuy sobre Steven Colon. Según Rick, cuando estaban en Tateyama, Japón, Steven había salido de La Familia y se puso a trabajar con el narcotráfico. También dijo que Steve Colon por intermedio de él, con quien eran amigos por haber trabajado juntos, ayudaba a la familia en la producción de Chiquivideos. Si luego comprobamos cuál es la opinión de La Familia sobre los narcotraficantes, tal como aparece en las BN 141, donde Pablo dice: ”Los enemigos de nuestros enemigos son nuestros amigos“ refiriéndose a los narcos como amigos y a EEUU como enemigos.
Además tú, Ed, no has negado nada, Por el contrario has confirmado todo. Y sabes muy bien que todos, incluído tú, dijimos la verdad, tal como confirmas en la página web que has abierto:
http://geocities.datacellar.net/onlyspeakingtruth . Tú sabes que jueces, peritos, policías y abogados estaban estupefactos a medida de que iban avanzando en la investigación que había empezado con la búsqueda de los hermanos Frouman. Su madre primero se los había robado a su padre porque él no estaba en la Familia. Pero luego a ella la expulsaron cuando se enfermó de cáncer porque ya no le servía más a la Familia. Pero no le permitieron llevarse a sus hijos y ni siquiera verlos antes de
El juicio empezó con el pedido de ella y luego de su hermana por recuperar a los hijos y devolverlos a su padre en USA.
Yo, que vivo en Argentina, tengo una visión completamente diferente de los hechos. Si bien en el pasado el gobierno militar argentino fue culpable de torturas y desapariciones en una guerra interna entre grupos guerrilleros y el ejército y que hubo 30.000 desaparecidos, el juicio contra La Familia se hizo diez años después de esa dictadura, durante un gobierno constitucional, con todas las garantías de la democracia.
Además cuando el caso pasó a la justicia federal ya estaban planeados los allanamientos para mayo e inexplicablemente se hicieron en septiembre. Estoy seguro de que los dirigentes sabían que iba a haber algún movimiento porque sacaron del país a todos los extranjeros que no tuvieran los documentos en orden, hicieron casarse a todos los que no tenían los papeles en regla y tenían todo preparado. Además tenían captado a un agente de inteligencia llamado “el pulpo negro” a quien habían ffeado, el que les avisaba de todos los movimientos.
Eso se puso en e videncia cuando yo y el Dr. Héctor Navarro, perito judicial, llegamos de Rosario al juzgado de Mercedes, donde estaba radicado el juicio. Ocurrió fuera de hora de trabajo en los tribunales de esa ciudad. En la puerta de los Tribunales nos esperaba Clara Borowick y Juan Carlos Cavazza, dirigentes de La Familia. Clara Borowick tenía una evidente amistad con Ángel Centeno, el Secretario de Relaciones Exteriores y Culto del gobierno argentino, tal como se evidenciaba en una grabación telefónica que hizo la policía de una de sus conversaciones.
Tú, Ed, hablas con compasión de Kay Roberts (Charity), una madre que simulaba mucha preocupación por la suerte de sus seis hijos. Debieras saber que ella, junto con su esposo Tito, eran los encargados del correccional de menores de Capilla del Señor, Provincia de Buenos Aires.
Una cárcel similar a la que estuve Mene en Macao. Me gustaría que me respondieras con cuántos de sus seis niños ella vivía, porque sabes muy bien que en La Familia nadie tiene consigo a todos sus hijos, sino que los tiene repartidos por todo el mundo para impedir que “deserten” ante el riesgo de perderlos a todos.
Además tú tienes que recordar, porque también estuviste en Buenos Aires que los niños en Pilar salían al jardín solamente cuarenta y cinco minutos por día, con vigilancia y por grupos. Esos niños son prisioneros de La Familia. Sin posibilidad de elegir, porque nosotros, los grandes. habíamos elegido voluntariamente ingresar a la secta, pero a los niños se los obliga a vivir en esa vida carcelaria y no tienen otra opción ni conocen otra forma de vida.
Mi madre trabaja como regente en algunos correccionales de Mendoza.
Por ella sé muy bien que el Instituto Garrigos, donde estuvieron internados los niños de La Familia, es un ejemplo en el país de orden, limpieza, buena comida y excelente atención al menor.
Los menores que estuvieron allí pueden decir, si tuvieran oportunidad, que no fueron maltratados por el personal. Por el contrario estoy seguro que cuando los niños de La Familia estuvieron en esa institución estuvieron mucho mejor que en la cárcel dictatorial que siempre es La Familia, donde los niños son permanentemente maltratados y donde ni siquiera se salvan los bebés, a los que María recomienda golpear a partir de los seis meses, como tú sabes muy bien, con ley de silencio, o el encierro en los planes Victor.
James Penn dijo que no sentía ninguna simpatía por los “lunáticos arginales”, la facción de antiguos miembros que “hicieron a sabiendas falsas acusaciones en contra de miembros de La Familia” durante la persecución en lugares tales como Argentina. Dice que la consecuencia directa fue que muchos niños y adultos pasaron meses en institutos del Estado y en prisiones. Dice también que desde su punto de vista, nuestra conducta fue reprensible, literalmente criminal y a la par con las atrocidades por las que MO. MARÍA Y PETER SON CULPABLES.
Dice también: “Si esos individuos hubiesen realizado tal ‘tour de force’ en un país en el que las reglas de la ley prevaleciesen, es muy factible que hubiesen terminado en la cárcel. Los miembros de ese lunático grupo marginal necesitarían seguir el buen ejemplo de Bithia, arrepentirse y pedir el perdón de los individuos que sufrieron debido a su comportamiento criminal. Tal como yo lo veo, esa sería la conducta cristiana a seguir.”
Yo les puedo decir que las secuelas de los maltratos psicológicos que yo sufrí dentro de La Familia las tuve que llevar durante muchos años, pero hoy, gracias a Dios, estoy totalmente recuperado, estudio derecho (leyes), trabajo en un estudio jurídico y pienso totalmente independiente. Me he encontrado con varios miembros que antes estaban muy enojados conmigo por haber denunciado los abusos de la Familia y hoy me saludan con mucho afecto, hasta casi te diría yo, agradecidos, una madre incluso me dijo que los peores jueces son los hijos (que ahora son grandes), las principales víctimas de las enseñanzas de Berg.
Yo estoy completamente convencido de que si no hubiera sido por los juicios de Argentina e Inglaterra no hubieran sacado la declaración de deberes y derechos (EN LOS QUE NO SE RECONOCEN LOS DERECHOS DEL NIÑO) ni hubieran reconocido la culpabilidad de Mo, pero asimismo según el mismo James esas condiciones lamentables no han cambiado. Si alguien sufrió estoy terriblemente apenado por ello y si hay una hermana embarazada que por falta de resonancias perdió a su bebe puede hacerle a la Nación, un juicio por daños y perjuicios, aunque eso no le devolverá el bebe pero se hará justicia; desde mis páginas le ofrezco la oportunidad para dar su versión de lo que vivieron, sobre lo que vivieron los chicos con esas revisaciones traumáticas.
Hay que aclarar también que el Comisario de Policía Hugo Gabutti, si bien realizó todo el trabajo de inteligencia previa, no estuvo a cargo de los allanamientos, porque había habido un cambio de juez en la causa, el que había nombrado a otro Oficial de Policía, el Comisario Juan Carlos Rebollo.
Abigail contó cómo los líderes de La Familia la habían preparado para mentir sobre supuestos abusos durante los allanamientos del año 1989 ordenados por el Juez Dr. Piotti. Por esa razón el nuevo juez, el Dr. Marquevich, resolvió hacer los allanamientos con el Comisario Rebollo, el que tenía un cargo federal, de otro nivel que el que tenía el Inspector Gabutti.
Sin embargo La Familia consiguió la firma de cincuenta abogados de los Derechos Humanos y presentaron un pedido de juicio político, que no tuvo éxito, por las presuntas irregularidades del caso. Yo sé muy bien que no hubo ninguna irregularidad y que por el contrario en el juicio que se hizo en la Argentina se le dio el primer golpe grande, con enormes consecuencias y que hizo entrar a La Familia en una enorme crisis, de la que aún no han salido.
- Pueden visitar: http://geocities.datacellar.net/RainForest/Andes/3129/
Y prometo que allí publicaremos tanto vuestra versión del caso como nuestra respuesta. Yo les agradecería que ustedes hagan lo mismo, tanto en inglés como en español

Eduardo Lause (Benjamín Amor)
Ituzaingo 827 dto 3 rosario 2000
lause@geocities.com