Patricia Noguera Escamilla, Ph.D.
Profesora Titular Universidad Nacional
de Colombia.
Directora IDEA Manizales
E-mail: anoguera@nevado.manizales.unal.edu.co
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Preámbulo
Si en un primer momento de la historia de la preocupación por la destrucción de los recursos naturales, hubo una especie de rechazo a la tecnología, la ciencia y la ciudad modernas, y, por supuesto, al hombre, que fue mirado como un destructor del Medio Ambiente; y si anterior a esta preocupación, las ciencias naturales, las ciencias sociales, la tecnología, las profesiones, el arte y la filosofía modernas habían dado tanta importancia al hombre, hasta el punto de pensar que él era el rey y dominador de la naturaleza; ahora, la reflexión sobre la relación entre los grupos humanos y el medio ambiente ecosistémico está buscando una especie de justo medio, es decir, de valorar en su dimensión real las acciones de los seres humanos sobre el medio ecosistémico, y a los ecosistemas mismos en sus relaciones con los humanos.
Estas relaciones suponen una eticidad, es decir una forma de valoración, que, como lo vamos a mostrar en la primera parte de este documento, ha tenido unas características muy especiales en la modernidad y en los procesos históricos de modernización, hasta llegar al momento actual, donde dicha eticidad ha entrado en una Crisis profunda. Veamos cuál es el origen de esta Crisis desde el enfoque ambiental, cuál es el potencial que tiene Colombia hacia el futuro, y en qué radica nuestra propuesta.
1. Origen de la Crisis
La crisis ambiental que actualmente se ha venido manifestando a nivel global, tiene su origen en el movimiento de la vida misma: desde que existe la vida, existe la muerte, y los momentos de equilibrio que ha tenido el universo, el cosmos, son momentos que anteceden y preceden al desastre, al desequilibrio, al caos. Queremos decir con esto, que la crisis es natural en cuanto que el Universo es movimiento.
Sin embargo, nuestra reflexión sobre las relaciones modernas que el hombre moderno tiene con el medio ecosistémico podemos ubicarlas desde el punto de vista de su origen, en el momento en que nace la ciencia moderna y la forma moderna de pensar al hombre y al mundo: la racionalidad tecnológica. Para encontrar el origen de la crisis ambiental, que en la modernidad toma una forma radicalmente diferente a las formas de la crisis premoderna, es necesario hacer un mirada histórica, que en este momento de nuestro seminario puede ser suscinta.
Tres conceptos claves nos guiarán en esta corta reflexión:
a.El concepto moderno de mundo
b.El concepto moderno de hombre
c.El concepto de instrumentalidad racional,
cuya manifestación histórica es la tecnología.
a. El concepto moderno de mundo
Durante el siglo XVII, Galileo Galilei funda la ciencia moderna. Esta fundación consiste en observar los fenómenos del universo desde una novísima perspectiva: la perspectiva matemática. El mundo, a partir de Galileo, es un mundo matemático y matematizable en cuanto que sus relaciones pueden expresarse en términos matemáticos. Qué significa ésto? Si recordamos el significado de la palabra Matemáticas, que viene del griego ta mathemata, y que significa saber anterior a toda experiencia, la matematización del mundo, que comienza su desarrollo a partir de Galileo, consiste en que anterior a la experimentación, el investigador moderno tiene un apriori ordenardor de esta experimentación, apriori que es la Matemática.
Sin embargo, -y ese es el aporte fundacional de modernidad científica- cuál es la diferencia entre la mirada matemática que los científicos de Grecia antigua y Clásica hacían al universo, y la mirada moderna a partir de Galileo?
Que los antiguos se pensaban como partícipes de ese orden matemático del universo, mientras los modernos a partir de Galileo, se piensan como los ordenadores del universo. A partir de la ciencia Galileana, aparece la idea de objeto de conocimiento, como nuevo concepto del mundo. ¿Qué significa objeto? objeto significa 'producto del sujeto'. El mundo de la ciencia moderna, se convierte en un producto del sujeto, que por supuesto, es la razón humana. A partir del siglo XVII, y a lo largo de la historia de la modernidad occidental, el conocimiento en general, se fundamentará entonces en este nuevo concepto de mundo como objeto, es decir, como analizable desde el punto de vista lógico y expresable en términos matemáticos.
Pero la idea galileana de mundo como objeto de conocimiento racional, tiene una fundamentación irrefutable. Galileo descubre y construye el telescopio, que simboliza el Ojo, la Mirada moderna, la base de la ciencia moderna: ver lo invisible. Con este instrumento, que es el artefacto fundador de la Tecnología, Galileo demuestra que si se mira más allá de lo que se puede ver a simple vista, encontraremos la verdad, es decir la mirada precisa. Recordemos que es con este instrumento, que Galileo demuestra matemáticamente, que el sistema Aristotélico del universo era erróneo. Además Galileo escribe y publica textos donde manifiesta explícitamente su nueva mirada del mundo: El ensayador, Diálogo de los dos sistemas del mundo, y cartas famosas como la dirigida a la Duquesa Cristina de Lorena, muestran el concepto Galileano de un mundo medible, explicable desde la razón matemática del hombre.
Desde este momento, la investigación científica moderna, se relacionará de una manera tan íntima con la tecnología, que llegarán incluso a confundirse. Sin embargo, -y es lo que queremos resaltar aquí-, la tecnología es el lenguaje por excelencia, de la Modernidad. La tecnología, ha permitido la mirada precisa al mundo como objeto de conocimiento.
Es necesario, sin embargo, hablar un poco sobre el concepto de hombre a partir de la Modernidad, pues este concepto, nos permitirá encontrar otro elemento para comprender nuestro hilo conductor: la crisis ambiental como parte de una crisis en la eticidad humana.
b. El concepto moderno de hombre
Contemporáneo a Galileo Galilei hay otro científico y filósofo, que participa en la fundación de la Modernidad: Con la publicación del Discurso del método, Renato Descartes hace un descubrimiento tan importante como el Telescopio de Galileo: El Método basado en la duda. Este es una especie de instrumento, que lleva a Descartes a una verdad precisa, irrefutable, de la cual no se puede dudar: esa verdad fundacional, esa verdad de la cual emergen otras verdades como las verdades de la ciencia Galileana, es el Cogito ergo sum que significa Pienso luego existo. A partir de Descartes, el sujeto productor de objetos, será el hombre, pero entendido éste como ser racional.
A partir de Descartes, el concepto de hombre que se difundirá en toda la literatura ilustrada, es de que el hombre es un ser pensante.
Sin embargo, es necesario definir qué
es pensar, para Descartes. Como él mismo lo plantea en su Discurso
del Método, publicado en 1637, pensar, es poner en movimiento la
razón para ordenar y entender el mundo. Por ello, pensar y pensar
lógicamente, son sinónimos en la Modernidad. Poner en movimiento
la razón, que es la esencia del hombre según Descartes, permite
el estudio sistemático del mundo, logrando así una mayor
eficacia en los resultados del conocimiento, y utilizando mejor la naturaleza,
la cual está puesta a la razón, para que ésta la ponga
a su servicio. El éxito de esta nueva actitud en términos
del gran desarrollo del pensar instrumental se traduce en la eclosión
de lo tecnológico.