Jorge Echeverri González
E-mail:
jorgeche@col2.telecom.com.co
© Derechos reservados por el autor
El 03 de marzo de 1999 llegó a mi buzón de correo electrónico este mensaje:
"Querido Sr. Jorge:
Soy una estudiante de segundo de bachillerato de Barcelona (
Mataró ) , por casualidad buscando información sobre la obra
"El Perfume" de Patrick Süskind en internet para hacer un trabajo
leí su escrito y me gustó muchísimo.
Me he leído ya dos veces el libro i cada vez me fascina
más pero temo volverlo a leer i aborrecerlo. Me gustaría
disfrutar de el tantas veces como quisiera pero no se cómo . Es
como Grenouille que deseaba tanto la fragancia de Laure que temía
la hora en que esta se acabara.
Me dirijo a usted de forma espontánea , solo esperando
ser leída , i con la esperanza de que me pueda ayudar en mi dilema.
Agradeciendo mucho su atención se despide:
Susana"
No pude dejar de enternecerme con el mensaje de esta niña (supongo, pues está en segundo de su bachillerato). Me hizo pensar en el destino incierto que puede tener un artículo colocado en algún sitio en Internet. Y en el nuevo fenómeno que significa la comunicación por este medio. Antes, mis comentario de libros llegaban a un público restringido del ámbito geográfico donde los publicaba el periódico cultural local. Ahora, la más diversa gama de personas pueden acceder y acceden a él. Pues este mensaje no es el único. Dos días después me llegaba este otro:
"Mi nombre es Sandra, <safandy@yahoo.com> tengo 16 años y soy estudiante del cuarto semestre de preparatoria en el Tecnológico de Monterrey campus Toluca. Leí su ensayo y me gustó mucho la forma en que esta escrito, me gustaría saber en qué se basó para hacerlo, ya que tengo que realizar uno sobre el mismo libro".
Como no sabía a qué se refería le contesté
pidiéndole aclaraciones. Su respuesta:
"El libro sobre el cual me gustaría saber es el de El
perfume, retrato de un asesino de Patrick Süskind, le agradecería
mucho que me dijera dónde puedo encontrar su biografía y
algunos datos sobre su obra literaria.
Muchas gracias. Sandra Lara"
Sobre el mismo tema Héctor Aguirre Torres <haguirre@srv8.telconet.net> me solicita: "Que posibilidades existen de que se me envíe una copia de esta magnifica novela de Patrick Suskin?" En este caso tuve qué responderle que no sé de sitio en Internet donde exista copia. Copia escrita ni enviaría, ni sabría dónde enviarla en caso de que quisiera. Quién sabe desde qué punto del planeta se comunica el sr. Aguirre. Lo interesante es que todos compartimos esta inmensa comunidad virtual.
Pero no sólo son interlocutores estudiantes en plan de tareas escolares. Un escritor veterano de temas psicológicos y literarios, Leopoldo Perdomo <lperdomo@geocities.com>, como puede verse en su página WEB <http://geocities.datacellar.net/Athens/Agora/3938/index.html> desde las Canarias me envía su mensaje: "Hola, Jorge: Estaba por aquí visitando tus cosas en esa hoja de Mundo Latino. Te felicito, tío. Escribes muy bien. Muy bueno eso de Barba Azul y eso de la cultura del siglo. Hasta otro día."
Desde Ciudad de México, Adriana Torres Prado <atorresp@iname.com> me dice: "soy una lectora ávida de Angeles Mastretta y he leído tu reseña acerca de Mal de Amores y me parece excelente, sabrías si hay alguna dirección a dónde pueda enviar mis comentarios para Angeles Mastretta. Felicitaciones de nuevo." Pues yo tampoco sé dónde puede enviar sus comentarios. Pero estoy seguro que si ubica una página WEB en uno de los innumerables sitios que las permiten gratis, puede colocar sus comentarios y algún motor de búsqueda la indexará y podremos leerlos. Uno de los efectos de la comunicación por Internet es la democratización que está permitiendo, pues cualquier persona puede colocar su información o comentarios y alguna vez será leído. Ya no necesitamos pasar por la aceptación de una editorial o periódico, de una selectiva comisión editorial. Ya no necesitamos aprobación.
Y no es necesario tener cuenta personal en Internet. Rosa Dugarte utiliza cuentas de otras personas <dcardozo@caracasstock.com> para su consulta (he dejado la ortografía original): "e leído sus ensallos y escritos en su página Web y me parecen de una riquesa inigualable y quisiera me remitiese algún escrito o ensallo sobre la cultura pero a nivel general (la cultura a nivel macro) a la siguiente dirección en la web. <ventural@eudmail.com>. Por las direcciones parece ser que se comunica desde Venezuela.
Otra forma de comunicación fácil es desde cualquier café internet u oficina de comunicaciones que preste el servicio. Este sistema lo ensayé desde España el año pasado, y podía leer mis correos no importaba el sitio en que estuviera. Milagros de la red inimaginables cuando estabamos en la universidad, hace pocos años. Cuando joven y viajaba mucho, para comunicarme con mis amigos les enviaba telegrama desde los sitios a los que llegaba. Recibir comunicación de ellos era muy difícil por no tener dirección fija. Hoy, los mochileros (viajeros con mochila como equipaje, que hacen autostop por el mundo) tienen su dirección en uno de los innumerables sitios que ofrecen buzón electrónico gratis y de tanto en tanto lo abren: la percepción de la globalización no necesita discursos, es inmediata.
Por último, Joan <joan@cambrabcn.es>, de quien no tengo
más datos, quien me escribe desde España, me dice: "Dios
mio ... un pedagogo..!!!
Hola Jorge,
No me hagas mucho caso, me encanta la ironía, creo que
forma parte de la vida y que es lo que permite reírte de ti mismo.
Eso lo he conseguido no hace mucho, pero ahora que se hacerlo, me lo paso
mucho mejor.
Estuviste en Barcelona ... ay que pena.. con lo bien que lo podíamos
haber pasado... Sanpedro, bien. A Rosa Montero la conozco menos y a Marsé
.. prácticamente todo. Ahora leo menos, el "maldito" ordenador me
roba el tiempo.. pero así conozco personas que me aportan más
cosas que algunos libros..."
Ordenador le dicen al computador en España. Joan señala el fenómeno que se está presentando: ya son más las horas que nos pasamos ante este aparato, algunas de las cuales antes las pasábamos metidos en un libro impreso. Y en su mensaje se está refiriendo a algunos libros que le comentaba había leído recientemente: La Sonrisa Etrusca, La Hija del Canibal y Tardes con Teresa, respectivamente, de los autores mencionados en su e-mail. Todavía en mis actividades la red y sus fenómenos no me han robado del todo el placer de la lectura impresa. Al fin y al cabo yo soy producto de la cultura de la palabra escrita.
Sigue Joan: "Me he dado una vuelta por la página en la
que están tus escritos, y he fisgado en alguno de ellos. Curiosamente
entre los que he mirado esta: "Español: más de un milenio"
y me ha chocado lo siguiente: No sabia que se celebraba el día del
idioma español el 23 de Abril. y eso es lo curioso del tema. El
23 de Abril es el día de San Jorge que es el patrón de Catalunya
(sabrás que se trata de esas provincias de España que quieren
ser independientes desde hace tantos años) y este día se
celebra mediante unos actos de afirmación del idioma entre otros.
De afirmación del Idioma Catalán, y precisamente este
día el resto del mundo se reafirme en el Español.. Curioso
cuanto menos....
Podemos charlar de tantos temas... incluso puede que lo hagamos.
Si quieres sufrir algo de lo que he escrito (te será mas
difícil de encontrar) esta en una revista electrónica que
se distribuye por mail cuya web es <http:\\web.kaos.es/mizar> pero no
esperes mucho de mi, porque cuando alguien se atreve con todos los géneros,
sus escritos son "escrotos" en fin... si quieres sufrir no tienes
más que leerlo."
Hasta aquí Joan.
Son solo unos casos de las nuevas realidades. A mi me ha servido, como pueden ver, para entablar una comunicación mundial (bueno, en el ámbito del Español), intercambio en el que aprendo cada día más. Cuando me critican que pierdo mucho tiempo en estas relaciones internéticas, respondo: y cuando nos sentabamos en el café, o nos reuníamos en la esquina y pasábamos horas charlando con nuestros amigos, ¿qué hacíamos?. Para mi no es tiempo perdido, es la percepción de nuevas realidades. Inclusive si participamos en listas podemos llegar a construir verdaderas comunidades de amigos. En mi caso pertenezco a la lista Enlace_Alt originada en Costa Rica, que pretendió ser una lista de periodistas que intercambiaran ideas sobre el fenómeno de la comunicación, y que pronto se convirtió en una aldea virtual riquísima, por la calidad de las personas que allí intervienen y el respeto absoluto que existe entre todos los participantes, de los más diversas tendencias ideológicas, edades y condiciones sociales.
No hay duda que estamos en el germen de una nueva cultura.