Fuente Prensa del Ombudsman de la Nación Argentina
    Un La actuación se inició de oficio, ante notas periodísticas que informaban el fallecimiento de una niña en la localidad de Pozo del Toba, Santiago del Estero, provocado posiblemente por la ingesta de agua contaminada con agroquímicos.
Funcionarios de la Defensoría del Pueblo de la Nación visitaron el lugar, donde viven unas 100 personas, entre niños y adultos, en un estado de total precariedad. Al momento de la visita se proveían de agua de un bebedero para animales, utilizando también el agua de lluvia que se acumula en los techos de la escuela y el dispensario.
De la información suministrada por los lugareños se supo que la fumigación aérea de los campos aledaños da lugar a que los aviones esparzan agroquímicos sobre sus casas, situación que los obliga a cubrir el pozo de agua.
Por otra parte, los envases de agroquímicos empleados son abandonados en las cunetas de los caminos contaminando suelos y aguas cuando se producen lluvias o inundaciones.
Ante el pedido de informes del Dr. Maiorano, la Secretaría Técnica de Saneamiento Ambiental de Santiago del Estero contestó que "dadas las características de la zona, existe gran dificultad para efectuar cualquier tipo de controles en relación a la utilización de agroquímicos". Agregó que "cada productor decide de acuerdo a su experiencia o criterio que tipo de plaguicida usará, dosis y forma de aplicarlo" e indicó que ante la situación planteada "se implementó la ley N° 6312, denominada ley provincial de agroquímicos, que aún no ha sido reglamentada".
Por las razones expuestas el Defensor del Pueblo de la Nación exhortó a los funcionarios santiagueños para que se realice la reglamentación e implementación de la citada norma.