Clavos.

Joker.

El joker se incorporó a las barajas durante el siglo XIX, en Estados Unidos. Es posible que la figura del bufón o el arlequín se haya inspirado en la carta del loco del tarot. Usualmente se usa como comodín y puede reemplazar a cualquier otra carta.




Clavos.

Torre de Hanoi.

La Torre de Hanoi fue inventada por el matemático francés Edouard Lucas. Con ocho discos requiere 18 446 744 073 709 551 615 movimientos. Este rompecabezas suele ser usado para ilustrar el concepto de recursividad. En la web hay miles de applets y pequeños programas para jugarlo.




Clavos.

Clavos.

Un rompecabezas muy simple (sólo tiene dos piezas) y muy popular (se lo encuentra por doquier). La solución no es trivial. Hay muchos otros rompecabeszas con clavos. En la clasificación de James Dalgety y Edward Hodern pertenece a la categoría «tanglement puzzles».




Dado romano.

Dado romano.

Los dados romanos eran idénticos a los actuales: las caras opuestas sumaban siete y los puntos se dibujaban de la misma manera. El de la imagen es de hueso y fue encontrado en las ruinas de Pompeya. Los romanos eran excesivamente aficionados a los juegos de apuestas.




Cara reversible.

Cara reversible.

Si se mira la cara de este severo policía al revés, se ve otra cara distinta: un sorprendido marinero. Desconocemos quién es el autor del dibujo. Algunas caras reversibles aparecieron en cajas de fósforos de distintas épocas y lugares.




Libro de go.

Libro de go.

Libro sobre el juego de go editado en Japón hacia el siglo XVIII. Fue impreso usando bloques de madera de una sola pieza. Muchas ilustraciones antiguas relacionadas con el go pueden verse en la página de IGS.




Tetralott.

Tetralott.

Rompecabezas diseñado por C. Markus Götz y construido en madera de nogal. Hay que ensamblar veintinueve piezas para formar lo que se ve en la fotografía. Participó en la competencia anual de diseñadores de rompecabezas mecánicos organizada junto al International Puzzle Party.



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