Iury Lech tiene, como escritor, cualidades de guerrero o quiza, teniendo en cuenta los territorios abruptos en los que se mueve, seria mas correcto decir que posee los atributos que se le suponen a un buen guerrillero.
Iury Lech es valiente, noble y honrado. En la trilogia que concluye con La fabulacion del plectro, hay una ambicion artistica, una sinceridad y una superacion de los miedos inherentes al acto creativo (bueno, ya se sabe que no es valiente el que tiene menos miedo sino el que consigue vencerlo) que convierten a Iury en un escritor poco comun y no me estoy refiriendo unicamente a la indudable originalidad de sus temas, sus reflexiones y la forma de su escritura. A lo largo de este volumen, que engloba dentro del genero de la "intriga retorica", y a lo largo de toda su obra, tanto audiovisual como literaria, nos damos cuenta de que Iury Lech es, como los cowboys de los clasicos del Oeste o los heroes de las peliculas de serie negra, un tipo honrado. Algunos pueden pensar que cuando uno escoge el camino mas largo, cuando un artista decide que el trayecto mas corto entre dos puntos es un laberinto, en vez de una linea recta, lo de ser honrado, valiente y noble no es tan dificil. Hay quien puede pensar que cuando uno no quiere regirse por las dictaduras de las multinacionales y no tiene la obligacion de hacer continuamente un libro o un disco que sea un best seller, es mas facil crear lo que uno realmente quiere. Pero la dificultad dentro del arte experimental es mucho mas grande que en el de los productos claramente comerciales (aunque habria que advertir que lo experimental tambien puede llegar al gran publico, pero ese es otro debate).
En la creacion donde se intentan encontrar otras vias de expresion, el problema enorme esta en ser sincero con uno mismo, algo mucho mas complicado que serlo con los demas.
Iury Lech en esta trilogia lo h conseguido. No escribe lo que se espera de un escritor, ni siquiera lo que se espera de un narrador experimental al uso. Y nos hace plantearnos preguntas sobre las que de otra forma, jamas hubieramos reflexionado. Sobre la vida, la muerte, el amor, el arte, los medios de comunicacion, las leyes del mercado...Asuntos recurrentes en la literatura a los que el da la vuelta y enfoca desde un prisma no transitado con talento indiscutible y una sinceridad poeticamente obscena.
Pero creo que para entender, al menos en parte, la poetica tanto audiovisual como literaria de Iury Lech, lo mejor es recurrir a las palabras de Likoz, uno de los personajes de La fabulacion del plectro, que dice en su conversacion con un auditor (palabra certera para redefinir a algunos editores y ARS): "A la literatura, como al resto de las expresiones artisticas, no hay que tratarla con guantes de seda, sino que hay que violarla, enfangarla, destrozarla y luego volver a reconstruir su perdida virginidad, o dignidad, de forma plastica, a partir de las visceras del autor y de un concepto heterodoxo, no reduccionista".
Poco mas que decir. Simplemente advertir que a pesar de lo que este personaje creado por Iury Lech propone que hagamos con la literatura, les puedo asegurar que Lech, Iury Lech, es un artista noble...y casi siempre delicado.
SILVIA GRIJALBA (escritora y periodista de El Mundo)