Los poemas del Moliné


El último viaje de Alejandro Moliné a Nueva York lo convirtió en poeta (pasados los 30 años descubrirnos enfermos...vaya!). Es para mí un gran placerrrrrrrrr presentarlo así, a todos ustedes en el ciberespacio!!!!

New York

ciudad

anonimato

pasan los días

y no acabas de enterarte

que he llegado


Times Square

sobretodo de noche

templo abierto, pagano e inconciente

donde rendimos tributos a deidades comerciales

oh! Dios mío, todo fluye con sentido malicioso

y no lo digo yo, sino ellos mismos

éste y no Wall Street es el centro simbólico del mundo

Disneylandia en la calle, gratuita y sin fila


Religión del neón

fuegos artificiales deslumbran como siempre

eterno magnetismo arrebatado de la luz

pero no de la interna, la medular, la verdadera

la que si permitimos que fluya por nosotros nos libera

no

la luz artificial

la que si te aproximas mucho incinera

la luz del hombre que queriendo ser Dios lo crucifica

luz simulada que pretendiendo liberar nos esclaviza


Funciones milimétricas

relojes muy precisos y ajustados

coordinación de partes

la máquina aceitada

confianza repetida y reafirmada

orden articulado

ya no soy necesario

me olvido de mí mismo


Movimientos opulentos

excesos de las formas y de acciones

reposos embotados

impercepción del todo

pero si une las partes

monotonía visual


He entrado a tu tienda

estamos solos

no merezco tu cara de terror

no me ves

estoy desnudo


GET MET. IT PAYS

nos dice el dirigible

pero cómo te alcanzo

cómo despego con estos pies de barro fundidos al asfalto

y éstas alas quemadas antes de haber soñado


Ni cuando yo me rio

vuelvo mi cara al otro

mi risa es sólo mía

no la comparto


Amos de siempre

amos rubios, lacios, pálidos

blancos, como yo


Súbitamente

por un orden subliminal, imperceptible

esta ciudad

te marchita el amor y lo reseca

así hecho una momia

lo esconde tratando de que nadie

pueda resucitarlo

el mío

dónde está

dentro, cerca de mí

no lo sé, estoy perdido


De la mano del subway

fluyo en círculo concéntricos, no en espirales

me dejo arrastrar, dubitativo

hacia el lugar de siempre

Imaginación pido,

que la realidad falta

y en todo caso

está afuera


Cejas fruncidas

rostros secos, a pesar del rocío

amargo es el espíritu que esconde

mi tez multicolor


Todo funciona

funciona sin parar

y cuando se detiene, no estoy yo

sino aquél, el robado, el que fue

y se repite cuatro veces más

para finalmente

dejar de ser


Desconfianza del otro

fidelidad a la máquina

corto menú de opciones

poca improvisación

poco importa


Antípodas presentes todo el tiempo:

la cara de ese niño y

la esvástica roja en el subway

como sello de época

al que nadie hace caso


No tengo hambre

y no he parado de comer


[(excisión + unión formal, inevitable + excisión) x atomización = no hablo con nadie en el subway]


Esta es sólo una parte de la amenaza de poemario del Moliné. Pronto tendremos un poco más... si lo soportan!!!

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