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En 1979 los ya bastante
conocidos AC/DC, no sólo cambiaron de estudios ni de productor, sino que pasaron de
estarse unas 3 semanas como máximo para grabar un álbum, a los casi 6 meses que se
estuvieron con este magnífico Highway To Hell, que les llevaría ya a ser una banda
conocida mundialmente. |
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Beating Around The Bush tiene uno de esos
inicios que a uno le gustaría saber tocar, uno de esos inicios que no son muy
complicados, que son juegos de dedos y a los que Angus Young, el hombre que siempre va
vestido de niño y que patalea cada vez que toca la guitarra, nos tiene acostumbrados. Love Hungry Man sí que es un poco lenta pero no demasiado. Baladas aquí no hay y si las hay, lo cierto es que uno no acierta a captarlas. Y es que en principio, a primera vista, estas gentes no tienen mucha pinta de hacer baladas (en un principio, okis?). La última canción, Night Prowler, también es medio lenta. Aquí paro para comentar una chorrada como tantas otras. Se trata del final de la canción, en la que se oye al (creo yo) cantante de la banda, Bon Scott, soltando una frase en plan Pato Donald o algo por el estilo. Es una frase muy graciosa que nadie que escuche el álbum se puede perder (así uno se echa unas risas de cuidado). Y ya que hablamos de Bon Scott, comentaré lo que todo el mundo sabe (o casi todo) y que sucedió unos meses después de haber sacado este "listero" álbum que, como muy bien se titulaba, llevaba a algunos por la Carretera del Infierno (noble carretera donde las haya). Pues nada, que un amigo del cantante lo dejó dormir en su coche dado que no podía sacarlo de allí debido a su inconsciencia y allí la palmó Bon Scott, ahogado en sus vómitos por culpa de una mala posición adquirida durante la noche. En fin. la banda luego encontró al que ha sido hasta ahora su cantante, Brian Johnson y todavía siguen en pie de guerra, como muchos de vosotros sabréis. Por cierto!! Los que seáis fanáticos de la banda de las tierras de Cocodrilo Dundee, que sepáis que hace un par o tres de meses, si no me equivoco, que han editado una caja con 5 cds de canciones inéditas y material ídem, dedicado a Bon Scott, el hombre que empezó como conductor de la banda y acabó como cantante de una de las bandas, irreprochablemente, más conocidas en todo el planeta, AC/DC.
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Damien, 26/04/98 |
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Dos años después de su
redondo e inolvidable Angels Cry, loa brasileños power-metaleros del copón Angra,
sacaron este Holy Land, como si del Roots de Sepultura se tratara. Y cuando digo esta
tontería, no me refiero a que el álbum sea muy duro, ni mucho menos, sino que me baso en
que el cd esta íntegramente dedicado (coño, que no me digan lo contrario) al soleado
país que los vio nacer, Brasil. |
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Y si no no hay más que oír Carolina IV
se nos adentra en esos ritmos de los que hablábamos, con instrumentos mezcla de
contrabajos, bombos y violines famélicos, golpes de tambor oriundos de estas tierras de
Sudamérica, voces que cantan agudamente y más voces que hacen de coro o coros,
acompañando a un Andre Matos que no está tan genial como en Angels Cry, pero que sigue
dando la talla, evidentemente. La canción dura más de 10 minutos pero no se hace para
nada pesada por que cambia de ritmo varias veces (gracias a diox) y hay una larga parte
instrumental con pianos y con todo tipo de instrumentos típicamente heavies (y no tan
heavies, como violines and so on...). Holy Land se abre con un piano de Matos realmente bonito. También aquí el piano se perderá al poco rato para volver al final de la canción y dejarnos a todos con buen sabor de boca. The Shaman es otra canción YA típica de Angra. Esto no es nada malo, dado que las buenas canciones de la banda son realmente buenas y esta es una de ellas, así como Make Balieve pero esta última en plan más lento y algo tristecillo. Z.I.T.O., aunque animadilla ya algo cañera es bastante normal y Deep Blue, que parece el nombre del super ordenador que batió a Kasparov para desgracia de ajedrecistas de todo el mundo, es de nuevo otra lentilla muy maja que hace que el cd en general no sea demasiado batallón. Para finalizar el soleado álbum, tenemos quizás la mejor canción del mismo, aunque corta y de nuevo baladística, pero esta vez sí, más que nunca. Se trata de Lullaby For Lucifer, de título impresionante, a base de acústica con ruidos de mar y de gaviotas de fondo y la voz de Matos que hacen de estos casi 3 minutos de lo mejorcito. Muy bonita, palabra. El álbum ha sido producido de nuevo por Sascha Paeth y por Charlie Bauerfeind aunque no ha conseguido, como he reiterado en mil ocasiones en estas pocas palabras que llevo escribiendo sobre el cd, el gran nivel que consiguiera el álbum debut de esta banda con un futuro más que asegurado si no dejan pasar la oportunidad. Esperemos, pues, que el próximo álbum (el que salga después del directo que han puesto a la calle hace un tiempo) sea más parecido al Angels Cry que al Holy Land. Por el Diox Sol! |
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Damien, 12/04/98 |
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Nadamás empezar a
escuchar el cd God Cries de Asphyx me vienen a la mente tres bandas que hicieron que el
death diera sus primeros pasos seguros en el mundo del Heavy: se trata de Morbid Angel y
Cannibal Corpse, que me vienen a la mente con el inicio guitarrero de God Cries, y Death
al oír, en cualquiera de las canciones, la voz del cantante y máximo compositor de la
banda, Theo Loomans, que a parte de parecer en la foto un componente de los últimos
Tiamat, dedica este álbum a su padre muerto un año antes de la edición del cd. |
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Les letras de las canciones son algo
durillas algunas, otras están algo en contra del cristianismo y todo esto y otras son
algo rabiosas: nada nuevo en el panorama Death. La presentación no está mal, con una portada bien guapa aunque a veces el librillo resulta un poco frío. Ojo a la cara que tiene el batería Bob Bagchus: da un miedo... |
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Damien, 5/3/98 |
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Nos encontramos con el
anterior álbum de estudio al Magic, del virtuoso germano Axel Rudi Pell. Se trata, para
sorpresa nuestra, de un cd posiblemente mejor que su siguiente trabajo, a pesar de seguir
ambos por una línea muy parecida, como es de esperar en alguien que a pesar de tener un
estilo bastantes personal, bebe o ha bebido directamente de Yngwie Malmsteen, por ejemplo. |
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Todas las canciones están muy bien, de
verdad, pero las que destacan, a mi parecer, podrían ser por ejemplo Gettin' Dangerous,
que si por algo destaca, a parte de por la caña que lleva consigo, es por contar como
bajista con el diox Peavy Wagner (cantante y bajista de Rage, leches!!) que nos demuestra
que sabe imprimirle velocidad a su instrumento de 4 cuerdas. Luego tenemos Fool Fool que comienza de manera interesante y que tiene un estribillo de lo más pegadizo en todo el disco. También se engancha muy muy bien Touch The Rainbow, que aparte de tener el consabido estribillo, posee unas letras muy guapas (imaginaros... tocar el arcoiris... como???). Ahora llega el momento de disfrutar de una instrumental como dios manda. Se trata de Sphinx' Revenge, y es que, por si alguien no se había dado cuenta, estamos con el tema de los faraones, las pirámides y demás que te cagas. Muy guapa, con una melodía muy agraciada y con un solo de la ostia que le hace a uno sentir que se le escapa la sangre del cuerpo... vamos.. una pasada de canción... Seguimos con más canciones. You And I sí que parece realmente Malmstiana. Lo que es la canción en general no destaca demasiado pero, como siempre, el estribillo, que es donde Soto se esgañota más, es la que la hace memorable. Ahora le toca Silent Angel, una balada que no solo está muy bien sino que además está tan bien, o le ha gustado tanto al señor Pell, que ha querido incluirla como final del álbum en plan instrumental. Paga por una, y llévate dos :D Se inicia con pianos (también Christian Wolff ha colaborado aquí con los teclados) y el tema es, para gracia o desgracia del oyente, el amor. La larga del álbum es la que lleva por nombre el título del cd, Black Moon Pyramid, que está realmente bien aunque quizás sobre algún minuto de los casi 10 que dura la misma. Si los solos de las canciones cantadas de Pell fueran un poco más variados, quizás ya estaría bien como está. Aquí sí que podríamos decir que el tema de pirámides y de Egiptos perdidos en el tiempo podría parecerse mucho a alguna canción que Malmsteen haya hecho antes (que ha hecho varias del tema) pero no es así. Pell ha usado, no sólo algún riff estilo arabesco sino que además los coros de voces (sinó de qué iban a ser?), han hecho que la canción sea la más pretenciosa del cd que nos trae aquí. Después de la magna de BMP, Serenade Of Darkness (Opus #1 Adagio Con Agressoya lo decía mi madre...) viene siempre bien. Instrumental donde las haya donde Pell se corre de gusto soltando una de solos increíble. Hay que oírla. Hay que oírla como la otra instrumental, Aqua Solution, una ida de la olla de casi un minuto que no se como demonios la han hecho estas gentes. En fin. Es muy curiosa, eso sí, y está más que enganchada con Aquarius Dance, que parece también que haya sido metida en este álbum por equivocación. Parece un rock bonjoviano aunque ésto, gracias a diox, sólo ocurre mucho al principio. Y digo mucho por que la canción más o menos todo el rato sigue igual. Supongo que estaban muy iluminados todos el día que la compusieron. Ha sido producido por el mismo guitarrista, que en las fotos parece algo entre una bruja y entre un post-electrocutado y por Ulrich Posselt, que produjo algunos trabajos de Rage. Bueno. A pesar de las coñas que haya podido hacer, el cd está de muerte, de verdad. |
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Damien, 19/04/98 |