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Realmente genial. Forrest Gump es una película genial
en la que uno puede pasar de llorar tristemente a reir a carcajadas como si nada, a pesar
de que 90% de la película uno no para de descojonarse de lo que puede llegar a hacer un
ser inhumano como es míster Fores Gaaaaaam (me han llegado a salir muchas lágrimas que
me caían al echarme unas risas viendo esta película, de verdad). Dirigida por Robert Zemeckis, la peli trata de la vida de Forrest Gump, personaje interpretado por Tom Hanks (supongo que no demasiada gente pensaba que este señor pudiera protagonizar un papel como éste), y de su entorno así como de la sociedad americana y los acontecimientos que le rodean. Toda la historia nos la va explicando Forrest desde una parada de autobuses en la cual debe cojer un autobús que no llega. Esto hace que Forrest vaya dando la paliza a los pobres desgraciados que se van sentando a su lado. |
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Forrest es un niño un poco tonto que
tiene que usar una especie de hierros chungos en las piernas, que se hace muy amigo de una
chica llamada Jenny (Robin Wright, la hermosísima Princesa Prometida), y con la cual se
va encontrando durante toda la película en diferentes sitios y por la que Forrest daría
el alma. Cosas como que Forrest corre mucho y muy rápido (pero que mucho y muy
rápido...), hacen que sea un campeonísimo en un equipo de fútbol americano, y de allí
pasa a la guerra del Vietnam, en la que conoce a seres entrañables como Bubba, un tipo
que conoce a las gambas como si fueran sus propias hermanas, o como al teniente Damm (Gary
Sinise, el doble americano de Oriolb ;-D ), un hombre que perderá las piernas (dos en
concreto) y que junto con Forrest formará una compañía en memoria de Bubba, dedicada a
pescar gambas y gracias a la cual se harán millonarios. Después de mil historias, Forrest conseguirá el amor de Jenny y tener un hijo con ella pero..algo tarde...porque Jenny padece lo que suponemos puede ser el SIDA, o alguna enfermedad que no pueden curarle, y por la cual deja a Forrest con su hijo, también llamado Forrest. El argumento puede parecer no demasiado complicado y muy normal pero os puedo asegurar que no lo es. Pensar que Forrest inspira al Rey Elvis Presley con sus movimientos imperdonables y ortopédicos, que a cada presidente que conoce, que no son pocos, acaban matándolo, que salva la vida de muchos compañeros suyos en la guerra del Vietnam, que se hace millonario y campeón del mundo de ping-pong (no de pin y pon), que se pasa 2 años y medio corriendo sin parar y que incluso llega a ser socio-inversor de Apple!!!!!!!!... y la cantidad de efectos especiales generados por ordenador que hay aquí, em todos los momentos en que saluda a los presidentes y habla con ellos o cuando juega a ping-pong a una velocidad de espanto... lo gracioso y a la vez inocente que es Forrest y la de cosas que llegan a pasarle, hacen de estas 2 horas y cuarto, algo muy muy entretenido y muy gracioso (anda que no...) que no hay que perderse. La madre de Forrest ha sido interpretada por Sally Field y la película ganó 6 Oscars: realmente se los merece. "La vida es como una caja de bombones... nunca sabes lo que va a tocar." |
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Bueno. La película no es nada nueva, ni mucho menos ni
nos trae nada nuevo en cuanto efectos especiales y el argumento tampoco es que sea de la
ostia... pero, que cojones, la peli no está mal y entretiene un ratillo. Siento no recordar el nombre del actor que protagoniza la película pero se puede decir que es uno de los, al menos, algo conocidos. A parte de él, algunos de los otros personajes del film también son típicos secundarios aunque, como no, no recuerdo sus nombre :-(( |
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Pero qué más da, no?? La película trata
una PUA grande que quieren hacer unos policacos corruptos de los webones con respecto a un
capo mafioso. Lo que quieren hacer es simular sus asesinato en beneficio del capo y suyo
propio y para esto usarán como conejillo de indias a nuestro protagonista que es un
experto en efectos especiales, no generados por ordenador, que participa en películas
conocidas y el cual, quizás algo tarde, se dará cuenta de la mala intención de los
polis y, como no, se convertirá en el superman de la película. Bueno. Normal no? Si ya digo yo que la peli tampoco tiene nada especial. Quizás lo curioso sea el título original, FX que pronunciado en americano suena a effects (efectos) que es de lo que va la peli por que nuestro protagonista se salvará gracias a los mil artilugios en plan McGiver (sí, el de la navaja con mil cosillas...) que domina con gran maestría. Nada de genial, pero maja. Por falen. |
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En la última película de John Woo (al menos que
sepamos) y su segunda entrega en los USA, el diox oriental John Woo se nos muestra algo
diferente a como nos tenía acostumbrados, sin perder, ni mucho menos, un ápice del
carisma que posee y del estilo personal que tan conocido le ha hecho. Vamos con el argumento. En Face Off, o Cara a Cara, que es como la ha llamado aquí, trata básicamente del enfrentamiento ya archiconocido en las películas de Woo entre el bueno y el malo, el poli y el caco, el portador del bien y el portador de la muerte. En un principio la situación es que John Travolta hace de bueno interpretando al policía/antiterrorista Sean Archer y Nicolas Cage hace lo propio con el malo malo Castor Troy. La "lucha" que hay entre ellos es debida a un intento fallido de matar a Archer por parte de Troy que le costó la vida al hijo del primero en vez de ser el policía el que dejara la vida. A partir de entonces se establece una persecución entre el policía herido (más psíquica que físicamente) y Troy, un perverso y paranoico criminal que junto a su hermano colocarán una mega bomba en el centro de la ciudad que dejará la misma en condiciones poco nobles y presentables. |
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Es aquí donde Archer se jugará el papel
de mala manera y se pondrá, una vez capturado Troy, en manos de un cirujano
estratosférico que OJO!, le cambiará la cara, la voz y el físico por el de Troy para
poder enterarse, infiltrándose en tierras de Polux Troy, el hermano pequeño de Castor,
de donde está y como se puede desactivar la bomba. Hasta aquí la cosa es "más o menos" normal....pero también es aquí donde Castor Troy despertará de su letargo para mirarse al espejo y darse cuenta que alguien le ha robado literalmente su cara. Lleno de rabia hará que sus sabuesos obliguen al cirujano a ponerle la única cara que sobra es esa especie de hospital donde se encuentran, que no es otra que la del policía... mola no? Pues sí.. aquí encontraremos los momentos más divertidos a la vez que desesperantes al ver a cada uno "interpretando" el papel del otro, yendo por donde sea con la misma cara, voz y cuerpo que su peor enemigo... desde luego algo bastante chungo si nos paramos a pensar en al pobre mujer de Archer que se acuesta con Troy pensando que es su marido o cosas por el estilo. Con este curioso argumento John Woo deja un poco de lado la multitud de balas para jugar un poco, de manera más que excelente, con los efectos especiales, las cámaras lentas o incluso con los mismos actores, que parecen dar lo mejor de sí en este film del chino Woo. Con Michael Douglas a la producción ejecutiva, Cara a Cara contiene escenas inolvidables como cuando vemos a Nicolas Cage, vestido de cura, bailando en plan pastillero o colocón monolítico delante de un coro espiritual de bata blanca y negra con tía güena incluida. O por ejemplo el efecto que se repite varias veces durante la película de la bala saliendo del cañón como si ésta viniera hacia nosotros, a cámara lenta e hiper-aumentada... o el salto que pegan los dos actores en la explosión final... son cosas dignas de ver, de recordar y fácilmente atribuibles a John Woo. Desde luego John Woo se luce bastante en la película. Con solo mencionar que hasta a mi madre le ha gustado la película!! (si..debo reconocer que tengo madre...) creo que habría bastante. Pero me gustaría recalcar el trabajo que ha hecho el director con los actores, que parece haberlo exprimido hasta la saciedad, quizás un poco más a Cage que a Travolta (parece ser ya su actor fetiche para los USA) aunque no muy distantes uno del otro, pasando los dos de encarnar una parte del Yin y en Yang a encarnar la contraria...me parece fenomenal..la verdad. Como última parida, mencionar lo cachondo que se puede uno llegar a poner viendo en bragas a la moza que interpreta la hija de Travolta. Esto sí que merece la pena. JODER. |
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Protagonizada por Michael York, el mismo que hiciera lo
propio en Money, Money, La Fuga de Logan fue en su tiempo una película que intentó ser
futurista y que lo consiguió en varios aspectos aunque no en su totalidad. Desde luego
los efectos dejan mucho que desear pero quizás la cantidad de imaginación que hay puesta
en ellos, o en su realización, hace que nos olvidemos un poco de la "pena" que
nos dan algunos de los truquillos que podemos presenciar durante el visionado de la
película. El argumento de la película es también bastante original. Se trata de una especie de ciudad-prisión en la que vive la mayoría de la gente del futuro. Por su forma y su estética uno se podría pensar que se trata del parque de atracciones típico que siempre vemos en las películas americanas, pero no es así. Se trata de una ciudad muy moderna, llena de edificios con formas o bien piramidales o bien edificios altos con formas variopintas, muchos cristales, mucha vegetación y todo muy "modenno". Dentro de tanta modernidad existen seres humanos con cierto aire de vegetales, todos vestidos de semejante modo siendo el color el único punto distintivo entre ellos. Dicho color, sea verde, rojo o amarillo indica la edad o vejez del tipo o de la tipa que lleve dicho traje. |
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Todos y todas, más o menos, son rubios,
guapos and so on, pero algo que llama a la atención (si no lo había hecho ya alguna de
las características que he mencionado anteriormente) es que todos son jóvenes y que no
hay ningún abuelete entre ellos. De manera rápida podemos decir que en la futurópolis donde se hallan los protagonistas de la película tienen una especie de ritual o fiesta que básicamente consiste en pulir la ciudad de la gente que ha sobrepasado los...creo que eran los 33 años. Qué quiere decir esto? Que todos los habitantes de la ciudad son muy jóvenes, que alguien que tenga 32 años no sólo es un viejo xoxo sino que está a punto de dejar la ciudad para visitar sitios mejores. Y Logan es un defensor del pueblo con porra electrónica incluida, que se enfrasca en la difícil misión de intentar descubrir que hay más allá de los límites de su ciudad, ya que hay sospechas de que los que son "apartados de la ciudad" o los que se han escapado de dicho rito estúpido, viven concentrados en las afueras y de que son bastante peligrosos. Para ello contará con la inestimable ayuda de una señorita (no recuerdo su nombre) y con ella descubrirá muchas cosas (no sólo las afueras sino también los adentros :-))) Mister York no es que sea de los actores que me atraen, que digamos, y menos si le vemos con el traje que le ha hecho poner el director (hay algún puto traje normal en esta película??) pero la película, a pesar de estar cargada de ese aire cutre-salchichero, no aburre como uno pudiera esperar en un principio. Es una película de ciencia-ficción bastante vieja que deja entrever las ganas de aventurarse en el mundo futurista y desconocido que tenían algunos directores como el que comanda la película. Ojo al sistema de contactos (ya sabéis, relaciones "setsuales" acordadas por las dos partes) que utilizan en la ciudad. Es de lo más novedoso y original! |
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Cómo describir Four Rooms? Pues diciendo lo que me ha
recordado cuando he visto la película esta tarde. Me ha recordado, ni más ni menos, que
aquellas nobles películas de Creepshow. Y si esto puede parecer una afirmación temible,
no lo es tanto si lo vemos desde el punto de vista de que se trata de 4 historias
diferentes, dirigidas por 4 directores diferentes (como se hacía en las Historias de la
Cripta) pero todas ellas con algo en común: que la acción transcurre en un mismo hotel y
con un mismo botones, que podría decirse que es el máximo protagonista de la película a
pesar de no ser, ni mucho menos, el más conocido de cuantos actores o actrices salen en
la película. De todos modos, la que comentamos ahora está muy alejada de las dos mencionadas como comparación semi-inútil, basándose esta en la puesta en escena de 4 historias contiguas y no paralelas, que le suceden al botones Ted (Tim Roth) la noche de fin de año en el hotel Mon Signer, historias sin igual, todas rayanas a la exageración y dignas, como mínimo, de una noche tan "especial" como pueda ser la de fin de año, a pesar de que la mayoría de las historias podrían haber sucedido una noche cualquiera sin necesidad de cambio de año. La primero historia está dirigida por Allison Anders y tiene como protagonistas conocidas a Madonna y a Valeria Golino, que junto a otras 3 mozas, interpretaran a un Aquelarre con intenciones de resucitar la diosa Osi, una mujer bella donde las halla que unos años antes fue encerrada en una piedra a causa del maleficio de un marido o amante suyo. Cada una de ellas hará su ofrenda personal: las lágrimas de todo un año, el sudor sexual de una de ellas, la sangre de una virgen o, la más importante, el semen del último amante de una de ellas que, por descuido de ella, fue a parar en lo más profundo de su garganta por lo cual, instigada por sus compañeras, de verá obligada a conseguir el semen de algún macho y.. quién mejor que el botones para proporcionarle tan necesario elemento? |
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La historia se llama El Ingrediente que Falta y ocurre en la suite nupcial del hotel. No está nada mal. A parte de ver unos pares de tetas, nos echaremos unas risillas con las curiosas danzas que ejecutan las diversas hembras que en tan grande habitación se congregan. El Hombre Equivocado, historia que sucede en la habitación 404, es la segunda que se nos cuenta y esta vez lo hace Alexandre Rockwell. Esta vez se trata de una confusión que hace que un marido celoso a parte de atar a su mujer, la guapísima Jennifer Beals, en una silla, confunde a Ted con un tal Theodore, el amante de su esposa. Dicha confusión llevará a Ted casi a cagarse (de miedo) encima al ver el pistolón que lleva en la mano el marido cabreado con intenciones de cargarse tanto a su infiel mujer como al cabronazo que ha metido su nabo en ella. La situación parecerá arreglarse en un momento y no será hasta que la mujer, puta (de lista) como son las mujeres, soltará una cantidad industrial de adjetivos para describir el gran tamaño del pene del tal Theodore, momento que aprovechará Ted para escabullirse de la habitación que tan mal rollo lleva consigo. Luego será llamado de la habitación 309 para llevar champán. Aquí sucederá la 4a historia, dirigida por Robert Rodríguez y llamada Los Traviesos (creo que se titula así, lo he traducido del catalán y nunca se sabe...). Antonio Banderas, más engominado que nunca, con bigotito y todo, hará de mafioso mexicano con mujer japonesa y un par de hijos bien propios de la familia Monster o de la familia Adams. Al ser fin de año, la pareja decidirá dejar a sus hijos a cargo del botones, a cambio de un buen puñado de dólares y alguna que otra amenaza si les pasa algo a los cachorrillos, mientras la pareja disfruta de una noche de lo más caliente. Ted no se imaginará la de cosas que le van a esperar por aceptar cuidar al par de mocosos, unos hijos que se pondrán a fumar, beber, dibujar en las paredes, chuparse los dedos de los pies, ver un canal erótico, encontrar una mujer muerta dentro del colchón de la cama o, para redondear todo, prender fuego a la habitación. Pobre Ted... Y por último, la historia del paranoias de Quentin Tarantino, con él mismo, Bruce Willis y de nuevo, Jennifer Beals, una moza que parece que no tiene suficiente con tener un amante. Aquí, en El Hombre de Hollywood que acaece en el ático del hotel, Ted se verá metido en una apuesta de borrachos en la que uno de ellos apostará a que es capaz de encender su Zippo 10 veces seguidas. Si lo consigue Quentin, actor archi-conocido, le regalará su flamante coche. Sino, alguien, de nuevo el sufrido Ted, tendrá que cortarle el dedo meñique al del Zippo además de recibir unos cientos de dólares por dejar caer el afilado cuchillo sobre la gruesa madera que soporta el pequeño dedo. También tenemos a Marisa Tomei en un pequeño pero curioso papel entre la historia de Rodríguez y la de Tarantino, haciendo de tía colocadísima en casa de una amiga de Ted, amiga que será la que le convencerá para que, antes de irse del hotel, el botones suba al ático a servir al cliente más importante, dando así paso a la última historia que hemos contado. De las cuatro historias no sabría decir cual es mejor. Todas me han gustado. Lo que sí está claro es que la de Quentin Tarantino huele a Tarantino por todos lados, no sólo por tener a Bruce Willis entre los actores, sino por los pedazo de diálogos que se sueltan en la historia, con marca todos del director de la historia. Quizás las dos últimas historias sean las mejores, pero de verdad que todas tienen un nivel bastante alto. Four Rooms, pues, se trata de una idea muy original que no estaría mal repetir o hacer en más de una ocasión, la de que un grupo de directores, amigos o no, propongan sus diferentes y personales puntos de vista sobre un mismo hecho o sobre un mismo tema y en formato corto, de unos 20 a 30 minutos por historia. Por último, no podemos olvidar al tipo que más sale en toda la película, el botones, Tim Roth, que hace una de caras y de muecas dignas de Jim Carrey (exagero un poco) que le hacen merecedor de la buena y diferente interpretación que ha hecho en Four Rooms. |
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