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Nada nuevo en el plano de las pelis guarras. Dirigida por Charlie Diamond, Gritos en la noche nos presenta la curiosa investigación de un asesinato, investigación que correrá a cargo de un tipo joven y guaperas (creo que es Woody Long) que irá preguntando a las diferentes posibles homicidas, las cuales le irán explicando con todo detalle lo que supuestamente estaban haciendo en el momento en el que se cometió el crimen. Evidentemente lo que todas y cada una de ellas estaban haciendo en dicho momento era follar, o bien con algún pavo (tenemos al pesado de Randy West que deja que una mozorra muy caliente le lame un poco el bujero del culo, entre otras cosas) o bien entre ellas (varios lésbicos bastante currados) y, también evidentemente, una de ellas, en esta ocasión la hambrienta Ashlyn Gere, acabará tirándose al investigador contratado para averiguar el culpable de la muerte del tipo que recibió un balazo la noche anterior. |
Las escenas guarras no están nada mal. Casi todas las hembras (menos alguna despistadilla que sólo piensa en ella) se lo curran mucho y se esfuerzan bastante en las escenas, ya sean lésbicas o normales. No hay uso de consoladores ni de aparejos extraños, más que los propios aparejos sexuales de los tres protagonistas masculinos que se ocuparán de satisfacer a las diferentes chicas de la película, Sandra Scream, la ya mencionada Ashlyn Gere, Amanda Stone y alguna más. En fin. Si no hay nada mejor... |
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| Era necesario tardar tanto en saber que Golpe en la
Pequeña China había sido dirigida por John Carpenter? Quizás lo que pasa es que ya lo
sabía pero no lo recordaba... es posible no? En fin... cuando me di cuenta de quien
había dirigido la película, me dije a mí mismo que tenía que estar en El Desguace, y
aquí está. Teniendo como protagonista principal a Kurt Russell (no es la primera vez que Carpenter dirige a este actor), el director nos presenta una historia que puede llevar a más de uno a la confusión. Y es que claro, que Carpenter dirija una película de magia negra china no es algo, ya no habitual, sino esperado, al menos en un principio. Así que el autor de La Noche de Halloween, nos tiene posiblemente acostumbrados a otro tipo de historias algo diferentes de esta especie de comedia que mezcla las artes marciales, una parte de lo oculto proveniente de la China y los efectos especiales como si de toda la vida esta unión hubiera sido válida o fácil de ver en cualquier cine. Y quizás lo sea... Pues Jack, que es como se llama el camionero protagonista, se mete en un gran lío sin querer al acompañar a su amigo a buscar a una novia hermosísima que llega en avión desde China y que es secuestrada por una banda conocida por un temible nombre - que para variar no recuerdo - con unos fines realmente originales y difíciles de imaginar. |
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Así pues, entre Jack, su amigo, una hembra americana que será la compañera de Jack y unos cuantos más trataran desesperadamente de salvar a la futura novia / mujer del amigo chino de nuestro protagonista con pinta de camionero guarro mezclado con cara de buen chico. La sorpresa para ellos será cuando se den cuenta de quién tiene a la hermosa asiática de ojos verdes y por que la tiene. Se trata, a fin de cuentas, de una banda oscura, cuyo jefe está dotado de unos poderes extra-naturales (como se anuncian algunos de los "frucos" del país) obtenidos por una especie de maldición hace muchos muchos años, por lo que necesitará casarse con una joven de ojos verdes para poder materializarse, rejuvenecerse y ser más feliz que un cerdo entre mierda. Ya veis... que cosas no? Pues Carpenter no sólo ha dirigido esta entretenida y curiosa película sino que, como ha hecho otras veces, ha compuesto la música de la misma, esta vez junto a Alan Howarth. Los efectos especiales, muy currados, corren a cargo de Richard Edlund y ha sido producida por Larry J. Franco. La película, como he dicho antes, es bastante entretenida, con bastantes paranoias y mucho humor, bueno o malo, pero humor al fin y al cabo. Salen algunos secundarios de los que salen en montones y montones de películas de artes marciales y éstas, están bastante bien coordinadas a excepción de las escenas de lucha final que emulan los combates de las películas chicas de hace milenios en las que los luchadores o espadachines no hacían otra cosa que dar saltos kilométricos y pasarse casi la totalidad de la película en el aire. Pero todo queda perdonado. La cuestión es pasar un buen rato mirando la pantalla del televisor (u séase, el mismo televisor, que más que nada es una pantalla) o la del cine, no aburrirse mucho y si es posible, echarse unas risillas. Ah! La película tiene un final no muy esperado, con sorpresilla incluida, aunque nada del otro mundo. |
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| La pregunta es, ¿de dónde han sacado las gentes que
hicieron Squirm tantos gusanos? o, ¿es posible que existan tantas toneladas de gusanos en
el mundo? Bueno.. la verdad es que no sé de donde los sacaron pero lo que sí que sé es que salen y muchos en esta película que podría confundirse con la siempre memorable Slugs, también Gusanos, no es nada del otro mundo pero sí una de esas películas que ves y que te recuerdan a tantas y tantas otras películas que se hiciera durante los años 60-70 de terror o de algo parecido al terror. En este caso en concreto, terror no mucho. De todos modos la película cuenta con alguna escena bien noble así como un aire de pueblo que te peich. La historia que se nos cuenta se sitúa en un pequeño pueblo de Georgia, donde fue filmada la película, llamado Fly Creek donde, a causa de una tormenta unos postes de electricidad caen al suelo, produciendo los cables rotos que éstos sustentan, una reacción poco verosímil en todos los gusanos que habitan las profundidades más escondidas del puto pueblo. Esto, traducido al cristiano poco noble, podría explicarse como que la electricidad les pone las pilas a los gusanos de tal manera que parece que se hayan metida una ingente cantidad de pastillas de las que rondan las discotecas, provocando en estos repugnantes animales el hambriento deseo de jalarse a todo aquél que se mueva y que sea "denominable" como persona. |
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Así pues, tenemos a unos gusanos carnívoros, que no sólo tendrán suficiente con serlo sino que le añadirán a la cosa una muy dudosa inteligencia para escaparse cuando es necesario, así como esconder esqueletos para que el sherif no se crea a los protagonistas o meterse en casas ajenas. A todo esto, nos falta hablar de los protagonistas, que básicamente son un chico joven llegado de Nueva York cuyo nombre es Mick (Don Scardino, un tipo con pinta de muy poco héroe), la chica que le vuelve loquillo, llamada Gery (Patricia Pearcy, una chica que no puede tener más pinta de pueblo) y su hermana Alma, otra con pinta de pueblo que usa unos zapatos con dos metros (2 m) de tacón, a lo que uno se pregunta cómo es posible que alguien ande sobre un apoyo tal. (Cuando digo con pinta de pueblo, para que os hagáis una idea, se trata de gente con la cara bien blanca, mofletes rosados ellas, delgados todos ellos y con cara de no saber lo que es el sexo o de no querer saberlo) Bueno, no es necesario decir que estos tres serán los únicos que se salvarán de todo el pueblo de la masacre producida por miles de gusanos hambrientos de carne humana. Ahora lo "tésnico". Jeff Lieberman a la dirección, Robert Prince con sus musiquillas que parecen imitar la banda sonora de La Semilla del Diablo optando por la vocecita de una chiquilla como fondo, y Rick Baker diseñando el maquillaje, junto a Norman Page. En definitiva, una película que SI que os dejará dormir después de haberla visto pero que dado el género de la misma, de animales o animalillos que se zampan a la peña, hay que verla y recordar una época y un tipo de cine muy difícil, sino imposible, de olvidar. |
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| Nos encontramos, como se dice en la misma película, en
un futuro no muy lejano. Lo de no muy lejano da a entender a que el director, suponemos,
cree en la posibilidad de lo que sucede en su película en la realidad no necesariamente
dentro de mucho tiempo. Seguimos en el mencionado futuro y nos damos cuenta de que nuestro protagonista masculino, un tal Jerome Marrow, interpretado por Ethan Hawke, se prepara como si de una misión importante se tratara, como si el primer polvo anunciado se acercara o como si hubiera estado 2 meses sin lavarse ni limpiarse. Al llegar en la especie de fábrica en la que trabaja es cuando nos damos cuenta que quizás el futuro no muy lejano estará mejor bastante lejano. A la entrada en su trabajo diario tiene que dejarse pinchar en un dedo de la mano para verificar que es él quien entra y a veces incluso son muestras de orina las que demuestran que es Jerome quien afirma serlo, eso sin contar la enorme seriedad, silencio y el aparentemente inmutable y estricto comportamiento de todos los que se encuentran bajo el mismo techo que Jerome. Todo es muy raro. Luego, a medida que la película avanza, que conocemos a la guapa de mirada misteriosa (o no) Irene (Uma Thurman) y que, atontados perdidos, descubrimos el porqué Jerome se frotaba tanto en la ducha (no decían que el frotar se iba a acabar??) estamos seguros de que nos encontramos frente a una película buena e interesante que durante el principio de la misma no para de mostrarte novedades sorprendentes que tienen normalmente mucho que ver con el protagonista. Lo malo de la película es que es lenta, bastante lenta, sin acción, sin asesinatos, muy pacífica aunque entretenida. |
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Ethan Hawke pega en Gattacca un cambiazo sorprendente con respecto a Reality Bites, que es donde lo vi por última vez con mi ex, Noni (Winona), donde le sobraban unos buenos kilitos que se ha encargado de convertir de músculo o, más bien, de eliminar. Sabiendo lo que sabemos, podemos decir que este cambio pareció gustarle mucho a la Thurman, que se enamoró de su compañero de reparto y ahora los dos son padres (o lo serán dentro de poco) del fruto de su intercambio de fluidos corporales. También encontramos a Elias Koteas (Crash, Tortugas Ninja, La Delgada Línea Roja) haciendo de padre de Jerome, que como veréis en realidad no se llama así, que ha sido dirigido como el resto de actores por Andrew Niccol, un desconocido para mí que escogió a Michael "El Piano" Nyman para hacer una banda sonora bastante acertada a pesar de que se oyen quizás más guitarras que no pianos. Ya, ya sé que no he contado mucho del argumento de la película, extendiéndome mucho en mis parafernalias paranoicas.. y la verdad es que no puedo contar mucho sino quiero desvelaros el final de la película.. sin pasarme soltaré algunas cosillas más. Gattacca es el lugar donde trabaja Jerome y Irene, una especie de instalación de la NASA donde los que trabajan, y la mayoría de los que respiran en este futuro, son creados a gusto del consumidor, esto es, de los padres. La clonación no sería aquí la referenciada pero sí el tratamiento genético, que a su vez está ligadísimo con lo clónico. De esta manera una pareja que quiere tener un chico rubio, que no necesite gafas, que sea atlético y que ligue mucho (:-), sólo tendrá que acercarse al punto especializado más cercano para que lo creen con la semilla de los futuros papis mezcladas con un poco de zumosol, algo de tauritón o, en su defecto, de Red Bull y dos o tres sacudidas de Ariel Ultra (para que luego no se froten tanto como hace cada día Jerome, que debería tener el cuerpo ya no rojo sino crostrado y despellejado de la de horas que se pasa el mozo frotando su cuerpo...). Así los que nacen de manera normal, los que no nacen creados en laboratorios, son algo así como anormales, inferiores, dedicándose en su mayoría a trabajar para los que fueron creados a imagen y semejanza de alguna fantasía de pareja atontada. No puedo dejar de escribir sin haber mencionado un tema con el que nos echamos unas risas Bastard y yo cuando veíamos la película: los coches. Cómo puede ser que se trate de un futuro algo cercano (ni que fuera el presente, ostias) y que todos los coches que se ven parecen sacados de las pobres calles de una Rusia destrozada por la guerra, la falta de alimentos y el kaos más desesperante? Cómo pueden llevar todos los protagonistas coches harto anticuados que lo único noble que tienen es el color negro, cómo no, y que son superados hasta por los Seats??? En fin... un detalle de poca importancia... Mirad la película, coñe, que no está nada mal a pesar de que es un poco lenta. Y los que seáis nerviosos de por sí y no podáis soportar la tranquilidad y falta de acción, fumaros un porrete que quizás apreciaréis mejor la película. |
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