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Formados en Nueva York
en 1984 y financiándose su primer mini-cd, los trasheros Overkill llegan esta vez aquí
con un cd que, comparado con su W.F.O (más que nada por que es el único cd suyo que he
escuchado a parte del aquí comento) no es ni tan bueno, ni tan agresivo ni tan difícil
de recordar. Pero no empecemos a ponernos las manos en la cabeza que nada de lo dicho
indica que este último trabajo de los de Brooklyn sea malo, simplemente un poco
diferente, basándose la diferencia en lo extravagante que a veces puede sonar alguna de
las canciones, 10 en total, sin bonus track, sin instrumental y sin sorpresa. |
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Let Us Prey podría sustentar aún más la teoría, aunque no demasiado. Ya vimos anteriormente que Overkill puede iniciarse lentamente, como si se tratara de una balada, y darnos un poco por culo, en cierto modo, girando la tortilla y dejando las baladas para otras bandas o para otros momentos. La canción merece mucho la pena. Aprovecho ahora, antes de olvidarme de comentar una chorrada. Si leíste la krítica del W.F.O. recordarás que comenté en ese momento que el bajo de DD Verni era lo que más se escuchaba en todo el álbum. Que el BANG, BANG del aporreo de la púa en las cuerdas se escuchaba como nada. Pues bien... esta vez no sucede lo mismo. En contadas veces podemos escuchar el bajo claramente, aunque lo que sí es cierto es que cuando se escucha es para bien, en momento calculados como estratégicamente. De todos modos la fuerza o importancia de la base rítmica impuesta por el bajo y la batería, es de gran importancia, y esto se nota en cada una de las canciones. Parece ser que esta vez la banda se ha basado más en todos los instrumentos o, incluso, en los coros, que ya le empiezan a cansar a uno un poco (coros, gritos raros, muy agudos, que parecen desentonados o hechos por alguien con poquísima experiencia en cantar...). Revelation: más caña por un tubo. Stone Cold Jesus, cañera pero algo más lenta. I Am Fear empieza de tal manera que podríamos confundirla, un poco mal de oídos (poco) con Testament. Esto pasa lo al principio, ya que luego el estilo de la banda delata quienes son. Black Line es claramente la que más me recuerda al guapísimo W.F.O. (cd que he leído, extrañado, que sólo salió en Europa), cosa que me llena de alegría (a pesar de que suene un poco a poema) y que hace que la canción gane puntos. El estribillo, la melodía del mismo es lo que recuerda tanto a las canciones que compusieron para el álbum que sacaron antes del directo Wrecking Your Neck - Live, del 95. El solo también hay que destacarlo, que sigue la línea del estribillo y hace la canción más agradable. Y aquí es cuando el bajo llega a su máximo esplendor, mezclando sus notas con las de Blitz, que hace lo propio a base de silbidos y luego con coros. La mejor canción del cd. Y aquí se acaba este cd, producido por, los mismos Overkill y un antiguo amigo y colaborador, el técnico Andy Katz, en The Carriage House Studio, Stanford, y en el cual también ha colaborado en los coros Mary Ellsworth, supongo que la mujer del dinamitado cantante. Si queréis saber más cosas de la banda, no tenéis más que visitar su página web, www.wreckingcrew.com. No puedo irme de aquí sin soltar que la portada está muy guapa, muy terrorífica, al igual que el interior del cd, un desplegable tipo póster en el cual podemos ver a los componentes de la banda bajo un color mórbido-verde clorofila y una calavera con alas de hueso (lo que oís) que se impone en todo momento en cualquier imagen del cd. |
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11 millones de copias se
vendieron del que fue el 3er trabajo de estos punk-metaleros californianos llamados
Offspring, el super cañero Smash. |
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Luego por ejemplo tenemos Genocide, que es un poco más cañera que las anteriores y que habla de pena y muerte. Y lo cierto es que uno no puede imaginarse que una música que parece tan alegre, contenga algunas letras tan "profundas", pero el hecho es que éste, que sí. La más rockera, por así decirlo, sería What Happened To You?, una de las canciones más pegadizas del disco, que incluye solillo y todo, no muy complicado pero muy majo. Killboy Powerhead es la única versión del cd, se trata de una canción de los Didjits, a los que la banda da las gracias en su correspondiente apartado. Para acabar con las canciones, queda decir que el cd cuenta con una intro que nos da la bienvenida, Time To Relax, una especie de interludio en el meridiano del cd, y una outro que hace lo propio con la despedida, una no anunciada que suena al final de Smash, la canción que cierra el álbum. Pero aquí no se acaban las sorpresas, porque después de acabar de escuchar la curiosa voz que nos despide, nos llega una instrumental que usa el mismo riff que el principal de Genocide pero más lento, de manera más amanerada, mucho más tranquilo y acompañado por la batería de Ron Welty. Y después, los señores de Offspring dejan que pasen unos 5 minutos de silencio para cerrar, esta vez sí, con otra instrumental, esta vez la que usa el riff a lo árabe de Come Out And Play, y aquí sí que parece una canción parida en esos lejanos países... Como veremos en posteriores álbums, a Offspring siempre les ha gustado introducir algunas canciones o trocillos de otros estilos, ya sea del tipo que aquí comentamos o en plan mariachi, como en tu último trabajo Americana. El cd salió bajo el sello Epitaph, que fue creado por Brett Gurewitz, guitarrista de los también punkeros y también geniales Bad Religion, sello que Offspring dejo para la realización de su último trabajo con Columbia Records, hecho que les costó las críticas de grupos como Pennywise, Rancid, NOFX o el mencionado Gurewitz, todos ellos pertenecientes a la misma discográfica (y todos ellos, menos Bad Religion, que sacaron en su tiempo UNA canción que les dio cierta fama). Una verdadera joya americana, por que se nota un cojón que es americana, que nadie debe perderse. There's No Tomorrow... |
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Es indudable e
incuestinable la gran calidad de este cd, Blizzard Of Ozz, el que fue el primer trabajo en
solitario de Ozzy Osbourne después de dejar o ser echado de Black Sabbath cerca del 79. |
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En Revelation (Mother Earth), Ozzy apuesta por la cara positiva, por el bien hacia la Madre Tierra y hacia nosotros mismos, una crítica social y, sobretodo, ecológica de la cual tantas veces se han visto criaturas en diversas canciones de montones y montones de grupos. Sea como sea, el tema de las letras, letras que giran en torno a la locura, el satanismo, el alcohol y cualquier otra paranoia, mezcladas con la imagen que Ozzy daba de sí mismo, comenzaron a forjar una leyenda como la conseguida por gente como Marilyn Manson o, ya más vejete, Alice Cooper. A todo esto, el quehacer de Randy Rhoads, al cual desconocía antes de escuchar este trabajo del 80, es genial, una genialidad más perceptible cuanto uno más escucha las canciones. Y de él podemos disfrutar "a solas" en Dee, la acústica mencionada antes, que no tiene nada que ver con el Heavy y que se marca un puntazo entre tanta guitarra eléctrica. El cd fue producido por Ozzy y el resto de la banda: Rhoads, el bajista Bob Daisley y el bataca Lee Kerslake, estos dos últimos por poco tiempo ya que, como veremos en el siguiente trabajo, ya no formarán parte de la misma. Max Norman fue el ingeniero, y hay que destacar el tétrico inicio de Mr. Crowley, una de mis preferidas del cd, con un solo apabullante del que hay que disfrutar tanto como del estribillo de Crazy Train. Así comenzó la carrera en solitario de Ozzy, una carrera que, todavía hoy, con lo viejo que está el pobre hombre, sigue en pie sacudiendo millones de cabezas en odiseas de conciertos y siendo el mítico cantante de Birmingham una de las personalidades, sino la que más, más conocidas y veneradas dentro del Metal. |
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En un mismo año, el
1981, Ozzy sacó su ópera prima en solitario y su segundo trabajo, este Diario de un Loco
que, como el anterior pero con más aciertos y mejoras con respecto al sonido y a todo en
general, nos muestra un cerebro, el del mismo Ozzy, un tanto alocado a la vez que
extrañado de todo y de todos, parte de disfrute y parte de sentimientos algo frustrantes,
en el supuesto de que lo que encontramos en las letras fuera o fuese real, sentido de
verdad. Y si digo esto es simplemente por que con este álbum Ozzy ganó mucha más
popularidad y éxito y, según cuentan las estadísticas, posiblemente vendía más cds
que su ex-banda Black Sabbath. |
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La voz, como antes, sólo que esta vez, a pesar del poco tiempo pasado entre cd y cd, el sonido ha mejorado un poco, no demasiado pero sí un poco, lo suficiente para darse cuenta de ello. Y ya, por último, queda la parte instrumental, lo mejor de todo, debido principalmente a unas canciones que atrapan y enganchan y a unos riffs y melodías de "dedos" de Randy Rhoads del copón. Buena muestra de ellos y ellas son todas las canciones, sobretodo Believer o SATO, guitarras realmente guapísimas, y eso por que no hablamos de los solos, algunos de ellos especialmente conseguidos. De los miembros de la banda hay que decir que poco antes de sacar a la venta este trabajo, los antiguos Bob Daisley (bajo) y Kerslake (batería) fueron substituidos por Rudy Sarzo y Tommy Aldridge, respectivamente. También hay que comentar que, con respecto al anterior trabajo, Max Norman sigue siendo el productor y el ingeniero del álbum, así como Ozzy sigue queriendo dar esa imagen de loco-satánico o poseído, ya no sé si por que él se lo cree o para fastidiar a todos los que le criticaban y decían de él eso, que era un satánico etc etc (o quizás sea simplemente que dicha imagen vende más??). Sea como sea, este cd es todo un clásico cuyo único fallo es haber salido cuando salió y con sólo 8 canciones. |
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