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Conspiración o complot satánico. La venida del
Anticristo a la tierra o el nacimiento del mal. Una mujer atrapada en la red diabólica o
la fama y el éxito destrozan el amor. En fin... todo es lo mismo.. es lo que encontramos en La Semilla del Diablo, este clásico de 1968 que dirigiera Roman Polanski antes de que asesinaran brutalmente a su mujer Sharon Tate, junto con unos amigos, a navajazos 4 "discípulos" de Charles Manson. Y es que sólo hay que oír la canción que abre la película para darse cuenta de que nos hallamos frente a un clásico del terror gótico, por así llamarlo. La Semilla del Diablo, cuyo título original fue Rosemary's Baby, sienta la base del terror en la psique, en la mente, en la tortura escondida, dejando a un lado el terror explícito, la sangre y el salvajismo más brutal. Así pues en la película no vamos a poder disfrutar de sustos en forma ruidos en la oscuridad o de personas despedazadas, sino más bien seremos testigos del mal que se le avecina a nuestra protagonista Rosemary. Rosemary, interpretada por Mia Farrow, es una mujer joven muy enamorada de su marido Guy Woodhouse (John Cassavetes), un actor de no mucho éxito que ha participado en dos programas para la televisión y varios anuncios para la misma. Los dos buscan piso en Nueva York y lo encuentran, un 7o piso aparentemente muy tranquilo con vecinos de muy buen rollo, yayos la mayoría, pero simpáticos, muy atentos y encantadores. |
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Una vecina muere al caer desde su alto piso sin que nadie sepa por que lo ha hecho. Llega la noche en la que la pareja decide tener un niño y es cuando empiezan los malos rollos que estarán presentes durante toda la película hasta el último momento de la misma. Será entonces, la noche de la concepción del bebé, cuando, en una especie de pesadilla, Rosemary soñará cosas muy raras, cosas como que es violada por un ser medio humano medio animal, ser que le dejará arañazos en la espalda como testimonio de que lo que ha soñado ha sido tan cierto como que ha quedado embarazada. En el sueño, parta más "inri", también contemplará como mientras es violada por dicho ser irreconocible, su marido junto con la simpática pareja de vecinos y otras personas desconocidas, todos desnudos, observan atentamente el acto sexual, como si de un ritual (satánico) se tratara. El tiempo pasa y Rosemary es instada por la gente que le rodea, el marido y los vecinos, no sólo a cambiar de médico sino a dejar de tomar las pastillas que éste le recetaba optando por tomar un potaje que le prepara la simpática vecinita. A su vez, el marido consigue el papel de una película gracias a la inesperada ceguera del que iba a protagonizar la misma en un principio. Más sucesos que a primera vista no pasan por sospechosos, van sucediendo hasta que nuestra protagonista, más cercana físicamente a la muerte que no a la vida (blanca, pálida como el hielo y delgada hasta los huesos a pesar de estar embarazada) decide tomar cartas en el asunto, algo tarde ya, para darse cuenta de la verdad, de lo horrible de la misma y de que su destino está ya marcado. Cuando dé a luz será lo mejor de la película, cuando vea a su hijo y cuando sepa qué relación hay entre todas las personas involucradas así como cuál es su papel en toda esta macabra historia que hiela la sangre por muy caliente que ésta esté. La música ha sido compuesta por Christopher Komeda y lo cierto es que da justo en el blanco con la nana que compuso para la película, una canción que, como he dicho al principio, da miedo de verdad a pesar de que estamos oyendo en todo momento a una niña decir "laaaa, laaaaa, laaaa..." También encontramos Para Elissa, de Beethoven, que también le da un toque algo misterioso y siniestro a pesar de que la composición por si sola no dé esta impresión. La película está basada en una novela de Ira Levin, y el productor de la misma fue William Castle. Como datos curiosos, mencionar que el peinado de Rosemary corrió a cargo de Vidal Sassoon, hecho que no sólo se menciona en los créditos iniciales sino que encima la misma protagonista lo menciona cuando se corta el pelo (queda mucho mejor con el pelo largo). También, y esto es algo que leí hace unas semanas, decir que el "ente" que representa al demonio que viola a Rosemary fue interpretado por el Dr. Anton Szandor Lavey, el padre de la iglesia satánica, ese hombre noble que no se ve en toda la película pero que se supone que hace de Satanás. Por último, aunque esto ya se salga del ámbito de lo curioso, decir que en la película se ven dos hermosos pechos, aparentemente de Mia Farrow (fijo que NO son suyos), que fueron censurados a tijeretazos cuando la película llegó aquí en la época del caudillo. Qué tendría ese hombre bajito contra las bellezas del cuerpo humano femenino? Bueno. Como siempre digo, lo mejor es que veáis la película y que vosotros mismos opinéis si se puede considerar a La Semilla del Diablo como un clásico del cine de terror "discreto" o no. A mi madre (sí, yo tengo madre) le parece asquerosa, pero ya sabéis como son las madres... |
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Con una estética que podría ser resultado
tranquilamente de una mezcla entre Batman y Dick Tracy (aunque no la he visto, me lo
supongo), The Shadow nos trae en formato cinematográfico un nuevo personaje proveniente
del cómic, un héroe (cómo no) que combatirá el mal, ayudado por una moza hermosa donde
las hayan, con sus ayudantes y que a punto estará de cagarla pero que, al último
momento, será dueño del correcto final para una película de estas características. La historia empieza en el Tibet (hay que irse al Tibet, joder), donde Gimkho, un "carnicero" bárbaro interpretado por Alec Baldwin que se dedica a eliminar pueblos enteros para deleite propio, vive rodeado de hembras hermosas, de riquezas y de sabuesos malnacidos aficionados al saqueo y al asesinato, es secuestrado por unos monjes budistas - o algo parecido - que le llevan en presencia de su maese, un chavalín rapado con una voz medio humana medio monstruosa que decide, por que sí, que Gimkho tiene que redimir sus pecados combatiendo al mal en las calles de Nueva York, por escoger una ciudad, cosa que parece en un principio no gustarle mucho al bárbaro de greñas. Luego nos situamos ya en Nueva York, corren los años ... 20? 40? ejem.. bueno.. la ciudad respira ese aire gótico por la noche donde los mafiosos aprovechan para saldar sus deudas o hacer que los que las tienen con ellos paguen como es debido. Y es aquí donde entra en acción La Sombra, un ser aparentemente invisible que se dedica a fastidiar el mal que deambula por la noche en la ciudad de la gran manzana. Y no sólo eso, sino que La Sombra, cuando salva a alguien de las garras de la muerte, lo incorpora a la legión de ayudantes que posee en la ciudad, ayudantes que o bien la pasan información de primera mano o bien le llevan en coche, o bien le realizan trabajos específicos (en este punto creo que La Sombra es mucho más listo que muchos de los héroes que pretenden hacérselo todo ellos solitos). |
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LLega a la ciudad una especie de sarcófago del Tibet en cuyo interior se encuentra, para sorpresa de muchos, el último descendiente de Genghis Khan, llamado Shiwan Khan (John Lone) un tipo que da miedo sólo con verlo con ese traje de samurai que lleva. La finalidad de la visita de tan pintoresco personaje no es otra que acabar lo que su tatara-tatara-tatara-tatara-abuelo intento y casi consiguió un día, conquistar el mundo entero. Para poder llevar a cabo dicha misión, se valdrá de su poder mental, igual de importante que el que utiliza La Sombra para confundir a sus enemigos y pasar por invisible, y de un artefacto que ahora sería conocido como una bomba atómica que le será proporcionada por un científico investigador colaborador del padre de Kargo. Que quien es Kargo? Coño... pues Kargo Lane no es otra que la heroína de la película, la hembra que se la pondrá tiesa a nuestro protagonista, la guapa rubia que se enamorará / enamorará a La Sombra, interpretada por Penelope Ann Miller (no me podéis negar que el nombre que tiene esta moza es realmente noble). Bueno.. pues a lo que íbamos. Lo que tendrá que hacer La Sombra es vencer a Khan, a sus secuaces, destruir o hacer desaparecer la bomba y, como no, conseguir besar (al final) a Kargo. El final no os lo explico por que está más que cantado, así que ya os lo podéis imaginar. La película ha sido dirigida por Russel Hulcahy (olé apellido!) y qué queréis que os diga? Pues que ni es una pasada de película, que no supera ni mucho menos a Batmans & Co. pero que tampoco es tan mala como para no poder verla. Quizás sea la estética de la película lo que más puntos gane, al igual que ciertos efectos. Tales efectos pueden ir desde el seguimiento exhaustivo y vertiginoso del primer mensaje que se le envía a La Sombra, un sube y baja por túneles escuetos como si se tratara de toboganes interminables, hasta el cuchillo pecador con personalidad propia, realizado, cómo no, por ordenador y que da realmente la impresión que pretende dar. Es una peli más, como he dicho al principio, basada en un cómic, algo que parece que lleva unos años estando más que de moda. Quizás es que se le van acabando los recursos o las nuevas/buenas ideas a Hollywood pero realmente nosotros no repudiamos esta nueva vía cinematográfica. Lo que quizás si desearíamos más de uno, es que también se realizaran versiones de manga en película, como pudiera ser Porco Rósso o Akira. No? Me olvidaba. La música de la película ha sido compuesta por Jerry Goldsmith un tipo harto empleado para realizar bandas sonoras. |
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John Landis, el mismo que regalara a los amantes de
cine de terror Un Hombre Lobo Americano en Londres, dirige esta película a medio camino
entre el terror, el humor y el cine negro que es Sangre Fresca, del 1992, una película
que no está mal pero que quizás por contener elementos de distintos ámbitos, se hace un
poco difícil de definir. Marie (Anne Parillaud) es una vampira que se dedica a chuparle la sangre a los delincuentes hasta que decide un buen día buscar su alimento entre los mafiosos de Pittsburg, entre los cuales se encontrará el capo Sal Macceli (Robert Loggia), un tipo que descubrirá que ser un muerto viviente no sólo no es un contratiempo sino que es un elemento a tener en cuenta de caras a conseguir más puntos en el mundo de la ilegalidad. También pasará por sus dientes Tony Silva, un Chazz Palminteri que dura poco en la película ya que Marie se encarga de eliminarlo del todo, como suele hacer siempre para que no hayan más como ella. Y tanta muerte extraña hará que Joe Genaro (claro, genaro), interpretado por Anthony LaPlagia, el mismo que hacía de pardillo hortera en El Cliente, no sólo investigue el tema sino que sin comerlo ni beberlo se acueste con la hermosa vampira, una (semi)mujer cuya única finalidad en estos momentos será acabar - no matar por que ya está muerto - al mencionado capo debido a su nuevo hobby, el de hacer de sus esbirros viles vampiros como él. Así que entre mafias, vampiros y amor, tenemos una película un tanto curiosa en este sentido, en el de no poder decir: esta peli es de terror o esta película es de mafiosos. Y es bastante sencillo de ver esto que digo en la película ya que tan pronto nos da la sensación de que estamos viendo un Batman o "alguien que acecha", como momentos de humor no obligatoriamente prescindibles que nos harán soltar alguna carcajadita, o vemos que hay un mal rollo en la peli producida por los mafiosos que te cagas. Y así uno se pierde!! Podría tratarse tranquilamente de una comedia romántica vampírica o de cine de terror mafioso con tintes de humor pasados por colmillos llenos de sangre, por no llamarte Rodrigo! |
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Los efectos de Steve Johnson no nos sorprenderán mucho, dado que siempre suelen ser los mismos, los ojos y la cara del vampiro o la vampira que se dispone a morder. Hay algún efecto más pero nada importante. Tampoco se trata de un diálogo currado ya que no hay ni una sola frase memorable, que yo recuerde, pero sin embargo hay un hartón de coches derrapando, quizás demasiado. Coño.. ahora he pensado y sí que hay una frase maja, que precisamente es la que abre la película, un pensamiento que tiene la vampira Marie. De hecho en la película es Marie la que reflexiona, como si estuviera explicando o recordando lo que le pasó, su encuentro con la puta mafia chunga. Y pensar que todo empieza por un polvete!! ay diox... Muchos de los actores, son caras conocidas vistas anterior o posteriormente en películas donde hay mafias, bandas de traficantes o cosas por el estilo. De hecho es curioso que uno de los malos de la peli es el actor Kim Coates, el mismo que saliera en El Cliente, al igual que el actor principal. Sam Raimi tiene un cameo en la película. Ahora mismo no sé si es el encargado del matadero o si es el casero donde pasan la lujuriosa noche los dos protagonistas, pero al final de la película se nos indica que tiene un papel, saliendo incluso un momento de su actuación, sin la cual yo al menos no me habría dado cuenta de la presencia del maestro Raimi. Casi me olvido, que Angela Bassett también tiene un papel, más importante que el de Raimi pero bastante escueto, la verdad. Ella hace de Sinclair la "jefa" de Joe, con un peinado modosito que nada tiene que ver, ni el peinado ni la manera de ser, a lo que vimos (lo que pude ver, me cago en diexxx) en la entretenidísima Días Extraños o en otros papeles suyos mucho más movidos. Y bueno.. poca cosa más no? Anne Parillaud es una hembra de muy buen ver que nos dejará contemplar algunas escenas sensuales en las que demostrará que una vampira no sólo mata sino que también ama :-D |
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Una de las putadas más grandes que le pueden suceder a
uno sería por ejemplo el estar defendiendo algo o alguien por encima de todo, creer en
él o en ello como en ninguna otra cosa para luego, al final, darse cuenta que todo el
rato hemos estado equivocados y que en realidad aquello que defendíamos a muerte es
precisamente lo contrario de lo que creíamos. Pues algo parecido es lo que sucede en esta historia de terror sin terror donde una secta llamada Los Sirvientes del Crepúsculo, dirigida por Grace Spivey, creen haber visto en el niñato Joey Scavello el anticristo, con lo cual su principal misión será destruirlo, aniquilarlo, matarlo con tal de salvar el mundo. Pero claro, todo sería muy sencillo sino fuera por que la madre del acusado, Christine, acudirá al detective privado Charlie Harrison, un joven que perdió a su esposa hace unos años, para que no sólo proteja a su hijo sino que consiga meter en el calabozo a los fanáticos eclesiásticos. Aquí empezará la "aventura", por así llamarlo, y Charlie no sólo realizará muy bien su trabajo sino que, demostrando lo buen detective que es, realizará un reconocimiento físico-carnal a Christine así como se encariñará del niño de ojos raros. Éstos, la madre, el hijo y el detective, con el perro del niño inclusive, irán visitando diferentes lugares durante la película con el fin de escaquearse de los pérfidos y malditos esbirros de la loca de la iglesia perseguidora del anticristo. |
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En el último lugar donde se escondan será donde pasarán mayor número de cosas: el polvo entre el detective y la madre, la traición de maestro del detective, la llegada de la propia Grace con sus armados discípulos y la muerte de la misma a "garras" de un montón de murciélagos que aparecen de la nada como por obra de arte. Y aquí será donde el detective empezará a pensar en el tema para darse cuenta de que... quizás los seguidores del crepúsculo no iban tan desencaminados... Casi toda la película, menos el final, es contada por el detective a un amigo suyo, profesor o estudioso de algo que no sé, y que se quedará parado de todo lo que el dañado detective le explicará. El final simplemente.. sucederá. El detective ha sido interpretado por Bruce Greenwood; la madre por Belinda Bauer; el niñato, cuya cara ya habíamos visto precisamente en alguna otra película de temática muy parecida (es que la cara que tiene el niño canta, coño...) es en realidad Jarrett Lennon y Grace Zabriskie hace de la paranoia de Grace Spivey, cabecilla de los fieles anti-satán. La película ha sido dirigida por Jeffrey Obrow, quien además ha realizado el guión y ha producido la película, basada en la novela "Twilight" de Dean R. Koontz. La música ha corrido a cargo de Jim Manzie y en principio no tiene mucho que destacar, al igual que la película, una película mediocre como tantas otras que tratan el tema del terror uniéndolo con temas satánicos o demoníacos. Lo curioso es que en muchos momentos la película más que parecer de terror parece policíaca o de aventuras, una especie del escondite a grande escala, con muertos y todo. Así pues, no tiene mucho que comentar la película. Quizás los únicos efectos que hay en la misma, si no me equivoco, que son la muerte de Grace ante la atenta mirada del detective, de la madre y del niño. Quien haya visto La Profecía o alguna otra parte de "la vida" de nuestro querido Damien, se dará cuenta que al fin y al cabo siempre es lo mismo. |
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