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Con un sello formado por
ellos mismos llamado Burnt Offerings, los Testament nos ofrecieron en el 95, antes de su
recopilatorio The Best Of Testament y de su último trabajo de estudio Demonic, este
directo llamado Live At The Fillmore que no sólo cubre las expectativas que uno pueda
tener en un directo de cualquier banda de "música dura" sino que lo supera con
creces (creces, aumentas, te haces mayor y sea como sea la música heavy te sigue gustando
porque la llevas en el corazón, en el alma y en lo más profundo de tu ser. Digan lo que
digan, piensen lo que piensen.). |
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Luego tenemos grandes éxitos de la banda
(cómo no!!) como podrían ser The Preacher, Alone In The Dark, Practice What You Preach
(noble título) o Apocalyptic City, canciones que, como siempre, uno agradece en directos
o no directos para poder conocer un poco más el trabajo de estos tipos originarios de San
Francisco. El sonido más que apto es bastante bueno para ser un directo y las tres últimas canciones son un caso especial. Se trata de tres de las mejores baladas que Testament hayan hecho jamás, en plan acústico. Return To Serenity que está genial aunque el solo es con guitarra acústica sólo hasta la mitad, The Legacy, la cual no conocíamos hasta haber escuchado el cd y en la que también han decidido usar eléctrica a medio solo y Trail Of Tears, que a pesar de contar con voces femeninas, no difiere tanto de la versión de estudio que pudimos disfrutar en el Low. Y hablando del Low, lo que es la contraportada de la caja, ésta se parece también excesivamente a algunas fotos (montajes, más que nada) que aparecieran en el penúltimo trabajo de estudio de estos thrasheros-death metaleros. La portada es un dibujo majo, un montaje de manos de Tony Machado en el que se juega con las portadas de los cds de la banda y con algunos edificios que creemos son los mejores sitios para realizar directos espectaculares. A fin de cuentas es un directo que todo amante de Testament debe tener en su estantería junto a sus cds más preciados, aunque personalmente prefiero los cds de estudio que no los directos. |
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Con The Ritual conocí a
los Testament. Recuerdo todavía que lo escuché con el Radikalillo y que no nos gustó
del todo el cd. |
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Lo cual quiere decir que he podido
apreciar mejor este cd, llegando a gustarme, como es normal, más canciones que la primera
vez que mis tímpanos se dejaron bapulear por los ritmos y la caña de estos tipos. Las canciones que podríamos decir que están bien podrían ser, además de las mencionadas anteriormente, So Many Lies, que tiene un estribillo bastante guapo, The Ritual, que es medio lenta, con un inicio a lo balada pero que luego se deja llevar por caminos algo más machacones, machaconería que la producción de Tony Platt no ha dejado entrever demasiado, al contrario que en Low, su posterior trabajo con James Murphy como guitarrista solista, en el que sí que podemos disfrutar no solo de una caña impresionante sino de una producción poco menos que excelente. En cambio aquí, a pesar de que no he oído trabajos anteriores, por lo que no puedo decir si estaban mejor o peor producidos, parece que el trabajo de producción se ha quedado un poco a medias, sin rebajarse demasiado. Pero claro, la voz de Chuck Billy, que todos sabemos que es muy potente, aquí no lo parece tanto. El cd parece ser menos Trash que lo que parece que fue su pasado, el pasado de la banda, encaminándose por lares algo más comerciales o de heavy más tranquilo, más para captar grandes masas de fans. Y si no es esto, quizás sea la impresión que a veces le aparece a uno en mente de que todas las canciones o bien su gran mayoría se asemejan entre ellas, teniendo una estructura más o menos predefinida. The Ritual fue el último cd en el que el virtuoso mercenario Alex Skolnick participaría, después de largos años con la banda, y pasó a tocar en el Handful of Rain de los Savatage. Poco más que comentar. Una portada que no atrae demasiado y todo, la portada y el libreto, basado en grises y negros con varias fotos de la banda por las calles de "vete tú a saber dónde", abrigadillos con sus chaquetas y con una botella de cerveza en la mano. Como debe de ser? |
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Yo nunca he sido un gran
fan de los TESTAMENT, tan sólo me gusta su genial LOW, pues su anterior DEMONIC, por muy
duro que pretendiera ser, nunca llegó a convencerme del todo. |
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En esta ocasión, BILLY vuelve a jugar con varios registros vocales...desde el más brutal y DEATH en temas como LEGIONS OF THE DEAD o el final FALL OF SIMPLEDOME a registros más en la onda LOW, como DOWN FOR LIFE, TRUE BELIEVER, etc... A parte de estos dos elementos encontramos, atención: en las guitarras solistas a JAMES MURPHY (DEATH, OBITUARY, DISINCARNATE, KONKHRA y TESTAMENT), en el bajo a STEVE DiGIORGIO (DEATH, SADUS, etc...) y en la batería nada más y nada menos que a DAVE LOMBARDO (SLAYER y GRIP INC.). En general debo decir que es un muy buen lanzamiento de uno de los grupos más representativos del THRASH de la BAY AREA que han vuelto con un disco que, como ellos dicen : "Life is hard...TESTAMENT is harder". |
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Después de su genial
A'arab Zaraq Lucid Dreaming, el 98 se abrió con el esperado nuevo trabajo de esta banda
sueca comandada por Christofer Johnsson que tan bien sabe combinar los coros, la música
clásica, lo gótico y el heavy metal, dando como resultado obras tan buenas como sus
anteriores Theli o Lepaca Kliffoth. |
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Pero aquí no se acaban los nombres conocidos. Si por una parte los componentes básicos de la banda han variado un tanto desde el anterior álbum de Therion, a parte del propio Johnsson y de Tommy "Wilbur" Eriksson, ambos a las guitarras, también se ha contado con la colaboración especial de un tipo que todos deberíais reconocer si os digo que el álbum ha sido grabado en los Woodhouse Studios. Sí, el mismo, Waldemar Sorychta, que tanto en éste como en su siguiente álbum The Crowning Of Atlantis, ha realizado tareas de guitarra, ya sean solos o partes rítmicas. Sin embargo no ha producido el álbum, como se podría esperar, tarea que ha recaído en el mismo Christofer Johnsson. Como decía en un principio, el cd no es tan guitarrero como los anteriores. Se oyen guitarras en muchísimos momentos, eso es cierto, pero el hecho de que ya no cante (creo que no se le oye en todo el cd, y si lo hace, es escondido tras las otras potentes voces) Johnsson y que los que sí lo hacen son gente con voces muy melódicas, por así decirlo, ya denota que la música va a serlo también, de tal manera que Vovin podría pasar, como ya sucedió en un trabajo que hizo Johnsson para una película, por la BSO de cualquier película del ciencia-ficción, de fantasía o de misterio en pleno y majestuoso Egipcio. Es bueno que esto suceda? Bueno.. a mí el álbum me gusta, pero echo de menos - me repito - la caña que recuerdo yo de los dos álbums que más me han gustado de Therion, donde a pesar de usarse voces y coros como aquí, la guitarra seguía teniendo un protagonismo que aquí en la mayor parte de los cortes han adquirido los teclados, los violines y las propias voces, con guitarras de notas muuuuuy largas, o sea, ni contrapúas ni hostias. Pero mira... las cosas evolucionan así, y así hay que aceptarlas. De todos modos repito que el cd está muy bien. De las 11 canciones que contiene, sinceramente, me sería muy difícil destacar alguna por encima de las demás. Si hubieran sido unidas las diferentes pistas del cd, podría haber pasado todo por una canción... claro que por ejemplo la que canta Scheepers se diferencia bastante en cuanto a ritmo de las demás... pero bueno. Ya la primera, The Rising Of Sodom And Gomorrah, que es muy melódica, tiene algunas partes ciertamente misteriosas. Luego, por ejemplo, Birth Of Venus Illegitima, que dura más de 10 minutos, también es la ostia, lo mismo que los coros de Eye Of Shiva, que se abre con una parte instrumental cojonudísima, realmente poderosos. Aquí sí que hay guitarras guapas, pero tampoco nada del otro mundo. Lo que en esta canción destaca son las voces femeninas, que son sensualmente cautivadoras. Y antes de que empiece la trilogía draconiana, tenemos una instrumental guapísima - como todas las que salen de Therion - llamada Black Sun, de un minuto y medio que nos prepara para las 4 últimas canciones del cd, The Opening, Morning Star, Black Diamonds y Raven Of Dispersion. Curioso es que la versión que me han dejado, por ser especial, indica que tiene las 11 canciones pero no hay tu tía de escuchar la última, más que nada por que no existe. Como veremos en su siguiente trabajo, de este 1999, lo que es el diseño y maquetación de la caja, está magníficamente trabajada. Tan es así que a uno le da la impresión de que se trata de un pergamino o una misteriosas caja encontrada en una pirámide escondida durante miles de años... |
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