Entrevistas a Directores
Fernando
“Pino” Solanas
Revista Línea
Voto protesta, huelgas y piqueteros preanunciaron las grandes movilizaciones de los sectores medios cuestionadores del modelo que azotó al país en los últimos años. Pino Solanas, militante del proyecto nacional, laureado director de cine y diputado nacional (M.C) que lo denunció desde su origen, analiza a fondo los motivos de tales movilizaciones.
Hay que pensar que este siglo termina con un auténtico suicidio de una clase dirigente –no solamente la clase política-, hay una clase dirigente empresarial que apoyó alegre e irresponsablemente el plan de vaciamiento y enajenación del patrimonio público que hizo Menem, y sostuvo a ese delirante e inescrupuloso que fue Cavallo.
La verdad es que la clase política y económica se creyó lo que le vendió Cavallo: que un peso valía un dólar, ficticiamente amarrado por ley que en ningún país del mundo nos lo cambiaban; una clase dirigente aque való que se vendieran las reservas estratégicas del país: el petróleo, el gas, las comunicaciones, en los momentos de la globalización cuando el país podía dar un salto grande, pero tenía que defenderse ferozmente por que las grandes potencias, a pesar del verso globalizador, y el levantamiento de los defensas aduaneras, seguían aplicando fuertes aranceles a la importación de nuestros productos, léase los subsidios a productos agrícolas en Estados Unidos, o la Comunidad Europea, lo que nos produjo a los argentinos y a los latinoamericanos pérdidas espantosas. Todo esto lo saben.
Ausencia de una burguesía nacional
Hay que pensar que la Argentina carece de una burguesía nacional. La llamada burguesía nacional, apoyó la dictadura. Al final de esto se estatizó la deuda privada: 26.000 millones de dólares, lo hizo Cavallo, quien ahora lo volvió a hacer, blanqueando las deudas de empresas y, el Estado nacional del gobierno "anticorrupto" del Sr. De la Rúa les aceptó que pagaran con bonos, cuyo valor de mercado era del 35 %, tomándoselas a valor nominal. Osea, los cincuenta y tres grandes grupos económicos blanquearon sus deudas pagándole a los bancos con bonos porque el Estado se los iba a pagar a cien por cien. Fue hace meses y fueron 5000 millones de dólares hace dos meses. ¡Una degradación espantosa!.
La metáfora de Favaloro
Somos un país con una generación de dirigentes muy delictiva. Resulta indignante porque vivimos en un país absolutamente rico, dotado como pocos en el planeta por sus recursos naturales, y encima con un pueblo maravilloso, con un talento enorme, que brilla en las ciencias, las artes y el deporte.
Nos han saqueado, nos han robado hasta los tuétanos. Creo que el suicidio de Favaloro es la metáfora o el símbolo más grande del suicidio de una generación, después de veintitantos años, tomando desde la dictadura hacia delante, Argentina liquidó todo su patrimonio público, todo lo que había ayudado a financiar el desarrollo nacional: YPF, Gas del Estado etc., lo liquidó, lo rifó irresponsablemente con el sueño de acabar con las deudas y asegurar bienestar social.
¡Todo mentira!. Vendimos todo para endeudarnos tres veces más con crecimiento cero. Si esto no es en grandes titulares FRACASO, SUICIDIO, FALTA DE TALENTO, no sé que es. Mientras tanto el argentino ha perdido calidad de vida y gran parte de sus derechos sociales, quedando en la población un sentimiento de impunidad, de impotencia, con una justicia cómplice, una Corte Suprema de Justicia canalla heredada del menemismo.
No hay que enjuiciar sólo al progresismo
Nos equivocamos si sólo hacemos proceso al progresismo. Lo digo desde mi lugar de militancia en las corrientes nacionales y populares, me identifiqué con la corriente latinoamericanista, la tradición de Ugarte, las luchas populares del siglo pasado, la Reforma Universitaria, FORJA, un pensamiento democrático, nacional y latinoamericanista, anticolonialista, que fueron fuentes de lo expresado en el ´45.
Pero es necesario decir las cosas como son, esta última pueblada, el argentinazo, acaba de derribar dos gobiernos, el primero fue elegido con una abrumadora cantidad de votos hace dos años. Para este gobierno de un partido democrático liberal argentino, símbolo del democratismo, el radical, con esa suerte de centro izquierda que se expresaba en el Frepaso terminó ejecutando uno de los gobiernos democráticos -porque que fueron elegidos con el voto- más reaccionario de la historia argentina. No recuerdo un gobierno elegido por el voto popular que se haya tenido que ir después de una matanza de veintiocho muertos en nuestras plazas públicas.
Democracia formal
Al partido Radical que ha hecho de la vida institucional, democrática y la constitución una de sus banderas, pongámosle la lupa: su candidato fue elegido a dedo por Alfonsín. Los candidatos de los partidos políticos en la Argentina se han venido eligiendo a dedo, o por aparatos que respondían al dedo de las cúpulas, y cada uno armando su lista sábana con un conjunto de inútiles e ignorantes.
Lo que acaba de
pasar en Argentina es una traición espectacular de su clase dirigente. Hace
varia elecciones que la gente vota y le burlan sus contenidos y el mandato del
voto. Acá no hay ninguna democracia, esto es una farsa, es solo una formalidad
democrática. Carlos Menem dijo:
"Si yo hubiera dicho eso, no me votaban", burlándose del electorado.
Pero De la Rúa también lo hizo, lo hicieron todos.
Hace diez años, cuando construimos el Frente Grande como una opción vértice democrática y popular desde el peronismo, el radicalismo y todas las corrientes populares, pusimos el eje en una serie de medidas que se fueron cumpliendo todas: la oposición sistemática al endeudamiento externo, y a puentear al Congreso en los debates de la deuda, la oposición absoluta a la privatización de las reservas estratégicas del país. Dijimos que era una verdadera traición al país atar las tarifas de los servicios públicos esenciales para la ciudadanía, como el agua, el gas, la electricidad, los teléfonos, a la inflación y la moneda de las potencias del norte. Tuve debates públicos, recuerdo uno con el viceministro de Economía, también lo hizo Rodríguez, en el que sostenía que el país era sano y fuerte porque podía endeudarse, y como el país estaba en desarrollo había que seguir endeudándose. Hace cerca de un año apareció un artículo de Menem en Clarín defendiendo la política del endeudamiento, fue una irresponsabilidad absoluta.
Degradación de las dirigencias
Acá hay que resaltar dos cosas: por un lado la corrupción y degradación de la dirigencia peronista. Una parte de esa dirigencia fue llevada como ganado de inútiles ignorantes a votar leyes atroces contra el interés de la Nación, y contra los derechos individuales y sociales de los ciudadanos. Recuerdo una de tantas leyes, la de modificación del sistema previsional, que terminó en las AFJP, se llamó de "Solidaridad previsional", y fueron votadas por la inmensa mayoría de los justicialistas. Destruyeron YPF, Gas del Estado, nos vendieron todo. Por eso creo que no es que, por acá están los progresistas liberales -"los progres"- o "los de ceentro " y allá están "los nacionales". No, acá hay que pasar el cepillo en serio, hay una dirigencia que ha priorizado sus intereses personales por sobre los del partido o su movimiento y estos por sobre la Patria.
Cuando vimos el debate (Cámara de Diputados) en el que el partido radical terminó este año votando los poderes excepcionales para Cavallo, burlando la Constitución Nacional. Los mismos legisladores que tres años atrás insultaban a Cavallo en la Cámara, cuando el presunto jefe o líder del Frepaso, que venía a luchar contra la corrupción etc., terminó firmando la privatización de las obras sociales. El vicepresidente Alvarez, terminó votando la rebaja de salarios y proponiendo a Cavallo. El mismo que impidió todo debate en el Frente Grande, nunca hubo internas, estaba prohibido denunciar la deuda externa. En vísperas de la Asamblea Constituyente de Santa Fe estalló todo porque Alvarez – Meijide, con el apoyo ideológico de Auyero, habían prohibido que se llevara adelante la denuncia de la deuda externa y la macrocorrupción de las privatizaciones. Se sentían muy vivos atacando a Matilde Menéndez, pero no a la corrupción increíble de la tarifa telefónica, los peajes, telecom, el robo que se hacía con los hidrocarburos. Los mayores evasores son las petroleras, porque cerraron el círculo, lo que les permite extraer el petróleo, refinarlo y venderlo en bocas de salidas de estaciones de servicios. ¿Cómo se pagan estas regalías en la Argentina?. Se pagan a declaración jurada, es como ir al mercado llevarse el carro lleno y cuando llegás a tu casa les decís qué te llevaste.
País saqueado
Así es la Argentina, un país saqueado. Denunciamos todo eso, la falsedad de la convertibilidad, por que lo más perverso de la política de Menem-Cavallo, que siguió De la Rúa fue la paridad uno a uno. Históricamente la Argentina, a lo largo del siglo, tuvo una paridad de entre 2,50 a 5 pesos por dólar. La paridad uno a uno significa la destrucción de la industria nacional. Y así fue, nos destruyeron la industria nacional.
De esta dirigencia liberal-progre, lo que se enseñoreó en el país es lo que no se puede hacer "el no se puede" y la política de lo posible que significó la resignación. Impusieron la resignación, impusieron el hocicamiento, y no solamente los "progres". ¿Qué significó cuando Dromi en los primeros momentos de Menem dijo: "estamos de rodillas", la teoría de vivir arrodillado, hermana de las teorías de las relaciones carnales. Con esa ideología había que aceptar que las tarifas se ataran a la inflación de Estados Unidos; pero eso lo hicieron los herederos de Juan Perón. A su partido hay que tirarlo y tirar la cadena y que se lo lleven con toda la mierda que nos dejaron.
Contruir un proyecto nacional con base en la alianza estratégica Argentina Brasil
La deriva argentina es por que no tiene proyecto nacional, un proyecto estratégico, yo pienso que la Argentina tiene que salir de la convertibilidad en forma urgente, con una salida gradual y consensuada. Nosotros estudiamos la necesidad de construir un proyecto estratégico fijado en la independencia nacional, la justicia social, la profundización democrática interna, hacia una democracia participativa, asentado en un fuerte desarrollo del mercado interno con fuerte inversión en educación, ciencia y técnica para defendernos mejor en el mundo ,poniendo como prioridad la alianza estratégica Argentina-Brasil.
Sintetizando, la clase dirigente de estos últimos veinte años se puso en el rol de ser "clase gerencial" de los intereses de los grandes grupos económicos y los organismos internacionales.
No solo sin vocación nacional, sino con la renuncia absoluta a bosquejar un proyecto de nación.
Hablando del progresismo más cercano, aquel que venía a instalar una alternativa a los dos grande partidos decadentes, corruptos y degradados; el justicialismo (lo único que le queda del proyecto nacional de Perón y Evita es la usurpación de los símbolos, porque en general han sido un conjunto de canallas que se cagaron en todo el legado histórico de los fundadores del movimiento).
Hubo un gran vaciamiento ideológico y de contenido porque hay un movimiento social. En estos años hemos visto la respuesta popular, piqueteros, movilizaciones. Pero por otro lado hay muchos sectores que están podridos; la universidad es un antro de delincuentes; el sistema de Shuberof es delictivo, con dádivas donde al que no concuerda con Franja Morada y el partido gobernante, ni consigue hacer la carrera universitaria. Las instituciones están podridas, el Poder legislativo, el Judicial, hay que corregir renunciar a la corte Suprema de Justicia.
Sin cambiar la Corte Suprema, sin profundizar la reforma del Poder Judicial, sin una nueva Reforma Constitucional, como lo pensaba Perón en el 74, cuando dijo que una revolución en paz necesitaba adecuar sus instituciones, pero con un profundo debate acerca de qué modelo de país queremos. El país necesita una profunda reforma constitucional preparada democráticamente para una reforma democrática y participativa del país.
*************
Biografía: Director, guionista y productor argentino, ha desarrollado durante años un cine políticamente comprometido, que se nutre especialmente del imaginario histórico y contemporáneo argentino, pero también de sus esperanzas y de sus fracasos personales.
Solanas pasó por las facultades de Abogacía y Letras antes de ingresar al Conservatorio Nacional de Arte Dramático, del que egresó con una sólida formación teatral, en 1962. Mientras trabajaba como guionista de historietas, y tras regresar de una gira por Brasil con una puesta teatral de Luigi Pirandello, realizó su primer cortometraje, Seguir andando (1962), en el que narra el encuentro de una pareja a orillas del río. Su siguiente corto, Reflexión ciudadana (1963), es una crónica cargada de ironía sobre la asunción del presidente Illia, con textos de Enrique Wernicke.
Para esa época ya había comenzado a componer música de jingles publicitarios, actividad que desarrolló con tanto éxito que llegó a hacer unas 400 melodías en tres años. Esto le permitió, además de acercarse a todas las áreas de la realización, fundar una productora. En ese marco inició con Octavio Getino, en 1966, la realización de su mítica película La hora de los hornos: Notas y testimonios sobre el neocolonialismo, la violencia y la liberación (1968), que se filmó en la clandestinidad debido a que el golpe militar de Onganía había derrocado al gobierno democrático de Illia.
Durante dos años, Solanas y Getino filmaron en 16 mm y sin sonido esta obra paradigmática del cine de liberación, que pretendía romper con la dependencia estructural y lingüística que tenía el cine argentino del europeo y del norteamericano. En la presentación de la película en Europa, coincidiendo con el Mayo francés (1968), fue aclamada tanto por su libertad formal como por su contenido político y su función social. Sin embargo, en la Argentina no pudo ser proyectado pública y comercialmente hasta 1973.
Tras el rodaje, Solanas y Getino, junto con Gerardo Vallejo y Edgardo Pallero, formaron el Grupo Cine Liberación y elaboraron un manifiesto titulado "Hacia un tercer cine", que analizaba las relaciones entre cine y política y proponía un programa teórico de acción sobre la realidad. Actualización política y doctrinaria (1971) y La Revolución justicialista (1971) son dos documentales realizados en torno a la figura de Juan Domingo Perón en Madrid que surgieron como práctica del cine militante que proponía el Grupo.
Posteriormente, Solanas realizó una adaptación -antitética a las que se hacían habitualmente en la Argentina- del Martín Fierro de José Hernández. El film se llamó Los hijos de Fierro, tardó cinco años en gestarse y representó un punto de inflexión en su trayectoria. El golpe de 1976 obligó al director a exilarse primero en Madrid y luego en París, donde recién pudo concluir la posproducción de la película.
Su siguiente film fue un encargo del Conservatoire National des Arts et Métiers, un documental sobre los discapacitados que se tituló La mirada de los otros (Les regard des autres, 1980) y fue muy ponderado por la crítica por la sensibilidad y respeto con que trató el tema. Y tras este llegó la que probablemente sea su obra cumbre: Tangos, el exilio de Gardel (1985), con Miguel Angel Solá, Marie Laforet y Gabriela Toscano. Coproducida con Francia, la película narra una historia de ficción sobre un grupo de exilados argentinos en París. De estructura libre y con varios registros narrativos mezclados -incluído el musical-, El exilio fue un gran éxito comercial en la Argentina e inició otra etapa productiva en la vida de Solanas.
Su realización posterior fue Sur (1987), con Miguel Angel Solá y Susú Pecoraro, que también logró repercusión gracias a su emotiva metáfora sobre el retorno de la democracia a la Argentina. Luego vino la decepcionante El viaje (1992), reflejo de su frustración política con el gobierno de Carlos Menem en un tono tragicómico poco feliz. Y seis años después volvió al ruedo con La nube (1998), otra metáfora sobre el país pero expresada con una estética mucho más creativa y personal.
Contactos, pedidos, comentarios.