Cristo a punto de expirar, con el torso inclinado hacia adelante y la cabeza alzada, con el paño de pureza muy ceñido, estando anudado al costado derecho.
Sobre su cabeza el letrero con el texto completo en las tres lenguas en lugar del INRI habitual.
La cruz construida con palos redondos, tiene en su base una calavera y una tibia.
Al fondo un cielo tormentoso de coloración rojiza, y un horizonte de montes despoblados.
El estilo de este cuadro es el habitual de Luis Tristán, con influencia de El Greco en su representación alargada y tormentosa, aunque mucho más realista,