1 Latin American in School and College Teaching Materials, informe del Comité para el Estudio de los Materiales Educativos sobre Temas Interamericanos (American Council on Education, 1944); Castañeda, Jorge G. y Robert A. Pastor, Límites en la Amistad: México y Estados Unidos (Editorial Joaquín Mortiz, S. A., México, 1989), p. 69
2 Ibid. Castañeda op.cit., p. 425.
3 Alan Riding, Vecinos Distantes: Un Retrato de los Mexicanos (Joaquín Mortiz/Planeta, México, 1985), p.393).
4 María del Pilar Marrero, «Contribución de los latinos a Estados Unidos», en: La Opinión, 11 de febrero de 1994, ps. 1 y 11A. Según una encuesta realizada por Minority Owned Latino Futures Research Group, en 1983, en el Condado de Los Angeles, los negocios latinos por sector económico de producción son los siguientes: el sector de servicios agrupa al 43% de las empresas; las ventas al detalle (18%); la construcción (11%); Finanzas y Seguros (6%); transporte (6%), manufactura (4%); agricultura (4%), comercio al mayoreo (2%); otros (6%).
5«Northern Mexico, the Engine of Nation's Modernization», en: The O. C. Register, 19 de agosto de 1994, p. 16).
6Límites de la Amistad, ps. 408-409.
7 Castañeda, op. cit., p. 459).
8 Ibid.
9 Ibid.
10 Riding, p. 394.
11 Phillip E. Martin, Immigration Reform and U. S. Agriculture, University Press, Davis.
12 Eduardo Ruiz, «Hispanos Ocupan los Trabajos Más Bajos», en: Excelsior, 2 de febrero de 1994, p. 2; «La Agricultura: Pilar Económico de California», en: Unión Hispana, 17 de marzo de 1995, p. 12).
13 Adolfo Sánchez Venegas, «Empeora el Desempleo en el mundo, Menos en Partes de Asia y Oriente: ONU», en: Excelsior (México), 1 de marzo de 1995, ps. 5 y 20.
14«Invertir en países pobres podría detener el flujo migratorio hacia Estados Unidos: PAI», en: El Universal (México), 12 de junio de 1994, p. 30).
15 Agency for International Development, «U. S. Overseas Loans and Grants, Obligations and Loan Authorizations», July 1, 1945-September 30, 1985, p. 4.
16 Silvia Pedraza Bailey, Political and Economic Migrants in America: Cubans and Mexicans (University of Texas Press, 1985). Al comentar el estudio, Robert A. Pastor explica que los inmigrantes cubanos de clase alta y media han tenido mejores resultados que los mexicanos en su asimilación al país y su éxito económico y social gracias a que recibieron de EE.UU. «un complejo programa de educación y bienestar social» para ayudarles y aprovechar la «ventaja inicial de origen de clase» de los exilados y funcionarios políticos del régimen pre-castrista. La falta de igual programa de apoyo para los cubanos que hicieron su ingreso posterior al país y para los mexicanos, considerados «refugiados económicos», con menor nivel educativo, «retardó el proceso de asimilación» (op. cit., p. 432).
Aunque la comunidad hispánica en los EE.UU., está más educada que hace 10 años, ya que la proporción de inmigrantes hispanos, de 25 años o más, con un diploma de high school aumentó del 46% en 1983 al 53% en 1993, los inmigrantes mexicanos en tal categoría «muestran la menor posibilidad de obtener un diploma de high school o más alto de educación, mientras que su contraparte cubana obtienen más licenciaturas («bachelor's degrees») que los adultos jóvenes mexicanos o puertorriqueños» («Latinos 2,000», en: Unión Hispana (Santa Ana), 30 de septiembre de 1994, p. 5.
17 Castañeda, op. cit., p. 431. De hecho, fue el propio Roosevelt uno de los primeros en reconocer «la importancia estratégica de tener una frontera amiga al avecinarse la Segunda Guerra Mundial» (loc. cit, p. 115).
18 Venegas, op. cit.,
19 Cosme Zaragoza, Historia del pueblo de origen mexicano y el movimiento chicano, en: Inventario (Tijuana, Núm. 66, domingo, 1 de febrero de 1987), p.1.
20Alan Riding, Vecinos Distantes: Un Retrato de los Mexicanos, p. 392).
21 Ibid., op. cit., p. 392)