Poesía

Gato de Quilmes
 
 

COMIDANSIA

Un bebé se va
amanecerá con bigotes
y a los cinco años después de un portazo
se mudará con la cabeza
para verse entrar cansado
y saludar a sus hijos
pedirá comida fresca
y sus dientes chocarán al ritmo
de la duda y del enojo
desnudará el ropero y se irá de viaje a recordarse más jóven
y al verse caminando en la rambla
esperará a que lo salude
alguna libertad esclusiva
sin espirales ni revelaciones en todo este sinfin.

TE SANGRA EN LOS OJOS

Cada gota
cada pie que pisa
cada bola de agua gris en el vientre
te sangra en los ojos
Cada esfuerzo es longevo
cada risa es su risa

cada vez más
y te sangra en los ojos
estás en el medio  de lo que querés
y lo que quieren que quieras
y estás esperando
que todo se vuelva un templo silencioso
hasta que cada palabra
cada vez que sea dicha
diga algo distinto
para resignificar el día.



 






IRSE CON ELLAS
 

Ahí van las ballenas a enjuagarse de mar
junto a las manchas, a quitarse el color
ahí van los vientos a sedarse con Sol
junto a la Luna que se aquieta el rostro y no puedo ni pensarte
porque ya ahi alguien espera
Los chicos queman los regalos
para jugarlos con el fuego y medio siglo después regresan
a esperarse en el recuerdo.
 

ESTRELLA ARDIENTE

Si una pared está quieta y muerta y un perro está atado y ladra
ya sé está quieto.
Si la cadena se rompe o se quiebra
y el dueño está muerto y no habla ya sé así son las guerras.
Si estamos lejos mirando un video, deseando frenarlo o desconvencerlos
y ya sé
esté lugar es una enfermedad de años.
Entonces una estrella ardiente se cae
y es otro el que mira y señala
y otro el que escribe y señala

y otro el que dice y señala
y otro el que grita y señala
y alguno lo calla
y así la memoria les juega un partido invisible
creeyendo ganarlo nadie los recibe
y así son las guerras, la muerte de estrellas ardientes.


 
 
 

Una visita donando gestos de menta a tu rostro
promete convencerte de la vista de otro.
Sol gigante en la terraza
esa cabeza enorme que arremete distante
acertando los veranos
vi al miedo y cuando saberlo mio me paraliza
en una pollera de tu verde
se ensambla tu nombre

me lo dijiste
y ahora.
 
 




LA BUROCRACIA DEL ENOJO

Las ideas son ciudades en el aire
o dos frentes que se juntan a escribirse
cuatro días de vidas bloqueadas
por vientos de mejillas
y mientras la moral derrama fuego
seis silencios
voy y vamos a contarte
y será como un cuerpo movíendose dentro de otro cuerpo
con la misma idea en la otra memoria
esa la complicidad de la gente al cruzar la calle
mirando las fotos que tomaron de sus esquinas
el lago se hace océano en una casa de llanuras
que rebautiza tu nombrelas cuentas
sin números la burocracia del enojo fue.

AIRE DE REFLEJOS

Vuelve caminando
y se espían en el sueño
nadan fuerte
en un mar
ese es el aire
de los reflejos.
 
 



ROSTROS

Me siento a hablar conmigo sobre todos tus nombres
los que te diste
al fijarte en mi centro único de expansión
a la diversidad de lo invisible
¿cómo es que llegamos hasta aquí?
si las formas de tus rostros son demasiado bellas
 

ESTOCOLMO

En el sueño de otros
te pude ver caminar
al ver despacio en el tiempo
en el sueño de la distancia
durmiendo su memoria te dejaste los pies
y se moverán
en tu música
donde quizás estés.


 

nada descubre la completa conformidad
y entonces me percibo en tu penumbra
soy contornos de peces que deslumbran
imagino los olores de tu tacto
y recibo contensiones de tus sueños
¿cómo es que llegaste hasta mi?
¿será igual a la falta de preguntas?
Mientras me mueva te pondre delante de mi ayer
pues el silencio se llenará de tí.

BLANDURA DE HALLAR

La sinrazón me busca en una nota
donde cree contestar
si es certeza o locura
esta blandura de cuerpos
esta blandura de nada
que coincide el fin del mundo
con el nuestro
el último acorde
el último acuerdo.
 

El Gato de Quilmes, es escritor, poeta, músico, diseñador, compositor, editor e interprete de la vida.
 

Fotografías en "Estrella Ardiente", precediendo "Rostros y Estocolmo" y en "Te sangra en los ojos" por
MALAUS: Juan Cordonet y Paula Maccione. El resto de la fotografías por Fernanda Bargach.


 









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