A Paraná, ciudad amada

No quisiera irme nunca de aquí, de esta ciudad color de cielo y agua.

De esta ciudad - muchacha, amada por el río inquietante y oscuro, que pasa...

No quisiera dejar esta ciudad clavada en la barranca por donde tantas veces rodaron los recuerdos y subió la pendiente la claridad de un sueño.

Esta ciudad que ríe, canta y hacia noviembre estalla en carcajadas lila y azul, perfumando la tierra.

No quisiera irme nunca de aquí, de esta ciudad que tiene algo de lluvia

porque es cándida, fina, impetuosa y humilde, enamorada firme, musical, rediviva.

De esta ciudad que parece de fiesta cuando la noche llega a la barranca desparramando estrellas y silencio, y es un pez blanco el río escamado de luna.

No quisiera irme de esta comarca mía, de esta ciudad que vive, con gravidez de madre y levedad de niña.