Las
damas de la orquesta de salsa
Las damas de la orquesta de salsa
son muy truculentas a la hora de actuar.
Te tumban con sus sones sencillos
y no ahorran brillos para deslumbrar.
Las damas de la orquesta de salsa
son todas mulata y saben bailar.
Y elevan al mover su cintura
la temperatura de cualquier lugar.
Y cantan estribillos banales, la gente se
divierte.
Yo le pregunto a mi almohada
si en este país no pasa nada
las damas de la orquesta de salsa
no te hacen pensar.
Las damas de la orquesta de salsa
son una estrategia gubernamental.
Te enseñan cuando tienes problemas
que no hay otro tema que echarse a
bailar.
Para los romanos pan y circo.
Yo me revelo pero empiezo a tirar un
pasillo
y me está gustando el estribillo.
Las damas de la orquesta de salsa
te hacen olvidar.
Y así, viendo a la orquesta comprendí
que George Brassans, que Rapanuí, que
Luis Buñuel
como es cantar un son en una Torre de
Babel.
Las damas de la orquesta de salsa
son como una droga para alucinar.
Con graves efectos secundarios
cuando te devuelves a la realidad.
Te llevan a través de su historia
a ese país sensual que sólo existe en
sus canciones.
Y a mí que me toquen los trombones.
Las damas de la orquesta de salsa
son para gozar.
Estribillo
La orquesta, va tocando salsa.
Muera mi conciencia, vivan las mulatas, mulatas.
En la mesa empresario catalán
en la mente un estímulo sexual.
Y yo a ver dónde me meto tanta crítica social.
Tramposa.
Con tu meneo mataste la ideología
y nadie quiso esa noche escuchar mi teoría.
Quédate gozando inconsciente.
Déjame a mí teorizando.
De tal palo tal astilla y de tal trompeta
el mambo.
Las damas de la orquesta de salsa
son muy truculentas a la hora de actuar.